Ya han pasado cuatro años desde que Marty Friedman presentara aquel Bad DNA para el mercado mundial y tres desde el Tokyo Jukebox, disco de versiones pop/rock japonés, por lo que ya íbamos esperando una nueva publicación del exguitarrista de Megadeth. Con respecto a anteriores trabajo pocos cambios se pueden observar. Sigue conservando ese derroche técnico del que hace gala el guitarrista estadounidense, basando todos los temas en el enfoque más extremo del metal, thrash y death metal. Quizás sí que llama la atención que haya minimizado la ambientación japonesa dándole un toque más directo, potente y heavy en definitiva. Desde el título del disco nos deja pistas de por dónde van a ir los tiros. Si no nos queda claro, solo necesitamos escuchar el primer corte para darnos cuenta de qué derroteros lleva este trabajo, energía, potencia y virtuosismo a raudales.
Belch
Nota:8/10  

Algo que destaca enormemente es la gran cantidad de colaboraciones de curriculums muy variopintos. Encontramos como destacadas, por ejemplo, a Jason Becker, excompañero suyo en Cacophony además de amigo suyo, dándole consejos e ideas reproducidas por Marty, hasta jóvenes promesas emergentes de medio mundo como el guitarrista hindú Keshav Dhar, o Jorgen Munkeby saxofonista en “Meat Hook” (quizás la aportación más sorprendente y curiosa cuanto menos), entre otros. Una mezcolanza de estilos y colaboraciones que no afean.

Comenzamos con el corte que da título al CD, con una línea melódica muy grandilocuente, casi orquestal, para que salgan disparados en un tema frenético, death melódico con tintes progresivos por los continuos cambios de estructuras, ritmos y riffs aunque sin una línea compositiva reconocible lo cual no ayuda mucho a enganchar con el disco. Todo lo contrario que “Resin”, tema que le sigue que, sin obviar el espíritu progresivo, sí que tiene un alma muy concreta, (muy tétrica y oscura) pero que al fin y al cabo un alma reconocido y me ha parecido un gran corte, digno de cualquier película de terror de serie B.

Por su parte, Wicked Panacea fusiona el jazz fusión con el death de manera sublime para acabar en un solo en éxtasis de Marty que se corta abruptamente, dejándote con ganas de más.I Can’t relax es el primero de los cortes con cantante al frente. Tema bastante diferente a la línea argumental de este Inferno, un death más moderno y más melódico, con voces limpias pero que acaba siendo pegadizo.Meat Hook, sorprende por un alocado y casi imposible solo de saxofón que se fusiona con la guitarra de Friedman. Mezcla curiosa por la falta de costumbre de mezclar un viento de esa manera al metal más extremo.

Hyper Doom puede ser el tema más thrash del disco, menos oscuro y más rápido si cabe, con un Marty probablemente de lo más inspirado del disco, una forma de dejar claro que él es un guitarrista más que sobrado para bandas como Megadeth, y quién sabe si un recadito para el señor Mustaine. David Davidson colabora en el corte más Death del disco llamado Sociopaths, dando la voz a un corte oscuro y bruto, frenético. De lo más extremo de este trabajo, corte sin concesiones salvo un estribillo limpio y adictivo como pocos.

Sin dejar de un lado las voces encontramos Lycanthrope, el cual, parece un homenaje a la buena época de Children of Bodom, más si cabe cuando Alex Laiho ofrece su colaboración en un corte que bien podría haber firmado él para su banda. Junto a ellos, Danko Jones también aparece aunque cuesta distinguirle entre la gran preponderancia de Laiho. Undertow por el contrario es un medio tiempo que si tiene un aura oriental, con teclados de fondo que enriquecen la línea melódica más sentimental y emocional que el guitarrista nos ofrece en todo el disco. Y aquí también encontramos nuevas colaboraciones como el batería Gregg Bissonette y el bajista Tony Franklin (conocido por haber tocado con Jimmy Page, Quiet Riot, entre otros).

Finalizando el repaso por este Inferno encontramos Horrors, En este caso la mezcolanza de estilos es abrumadora, pasando del jazz, al metal neoclásico, con tintes death hasta pasajes con guitarra española y mucho shred para regalarnos una canción agobiante, asfixiante, tétrica, horrorosa si se me permite pero que demuestra la calidad compositiva que atesora. Probablemente uno de los mejores cortes del disco.Para cerrar encontramos con una versión de Inferno, corte que abría el trabajo. Un Reprise de dos minutos que poco o nada aporta más que una canción de toque más virtuoso, shred, sin más.

En definitiva, este Inferno es disco que para los mayores amantes de la guitarra será interesante, porque tiene una cantidad ingente de riffs y solos sorprendentes dignos sacar e intentar imitar. Sin embargo, para los no guitarreros puede llegar a ser un disco algo largo ya que contamos con pocos temas cantados y el resto es 100% guitarra y virtuosismo a espuertas. La mezcla de estilos está llevada de manera más que sobresaliente ya que no rechinan al oído esos pasases más jazz fusión en medio de un tema devastador y extremo. Gran calidad atesora este Inferno al que le faltan en algunos temas melodías o riffs tarareables para ser un disco 100% redondo.

Belch

Temas:

1. Inferno
2.Resin
3. Wicked Panacea
4. Steroidhead
5.I Can’t Relax
6. Meat Hook
7.Hyper Doom
8. Sociopaths
9.Lycanthrope
10.Undertow
11. Horrors
12.Inferno (Reprise)