Serafino Perugino se está convirtiendo en un auténtico capo de la escena hard rockera mundial. No hace demasiado hablábamos de cómo había convencido a Joe Lynn Turner para montar un supergrupo de hard rock y obtuvo como resultado a Rated X. Pues el amiguete ha hecho lo propio con Michael Sweet de Stryper. ¿La idea? Montar otro supergrupo, y ante tal propuesta Sweet sugirió al legendario George Lynch (Dokken, Lynch Mob) como guitarrista.

Por supuesto, Perugino se entusiasmó con la idea y al dar luz verde a Sweet para producir también el disco, ambos artistas contactaron con mercenarios de solvencia contrastadísima como Brian Tichy (Whitesnake, Pride & Glory, Lynch Mob) para la batería y James Lomenzo (White Lion, Megadeth, Pride & Glory) para el bajo. ¿El resultado? Pues un proyecto un tanto bizarro llamado Sweet & Lynch. Mr. Scary ha sido el encargado de escribir la mayor parte de la música y se encargó de juntar mp3 de un minuto y medio de duración con las partes básicas de las canciones. Entonces, Sweet los recibía por correo y escribía la melodía vocal, las letras y estructuraba los temas. Una vez estuvieron los dos de acuerdo, se sumaron Tichy y Lomenzo para entrar directamente al estudio y grabarlo todo. Como podéis comprobar, química pura en el local de ensayo (ja).

El disco dista mucho, por poner un ejemplo justo, de la calidad que atesoraba el penúltimo lanzamiento de Lynch Mob "Smoke and Mirrors", pero la verdad es que tampoco está nada mal. Sin ir más lejos, "The Wish", el tema que abre el disco y sienta las bases para el sonido y dirección, es un auténtico torpedo de puro glam metal. La base del tema me hace pensar en Dokken de manera inmediata, pero está claro que la voz de Sweet supera en bastantes enteros a la de Don Dokken. La producción es moderna pero sin pasarse, y conserva el clásico sabor de la primera mitad de los ochenta gracias al sonido de Lynch, enterrado en reverb y delay, el clásico truco ochentero. Si todo ello es aderezado con un solo marca de la casa sin demasiadas florituras, pues obtenemos un tema que por fuerza ha de ser del gusto de los fans de RATT, Keel, Quiet Riot o los propios Dokken.

Con estos cuatro músicos criados bajo las mismas fuentes y gustos musicales, se nota que el corazón musical late al mismo tempo a pesar de prácticamente no haber estado nunca juntos en el estudio. Todo encaja a la perfección en temas como un interesante medio tiempo con el sonido característico de las guitarras de Lynch como es "Dying Rose", o en las fantásticas melodías vocales de "Rescue Me", otro de los temas destacados del álbum.

También hay momentos más reposados como "Love Stays" o "Me Without You", donde los músicos no se lucen tanto pero que distan mucho de ser meros vehículos para alargar el minutaje del disco. Sin embargo, en "Only to Rise" imperan más los temas contundentes como "Time Will Tell", "Recover" o el tema título que no necesariamente son de lo más brillante de la colección de títulos. En general el disco va combinando cal y arena, aunque, por suerte, los temas interesantes ganan la partida haciendo que el disco se digiera con facilidad. Incluso, en ocasiones, la banda se aventura con canciones que se salen un poco de la plantilla como "September", otro tema dedicado al infame 11 de Septiembre de 2001, y salen más que airosos del intento.

Un par de temas como "Divine" y "Strength in Numbers" quizá sean demasiado parejos en feel y tempo, aunque el segundo se lleva el gato al agua por jugar con sonoridades orientales que nos pueden recordar a los Led Zeppelin de "Kashmir". Obviamente, ni el tema ni la banda llegan a la brillantez de aquéllos, pero la solvencia y aptitudes del combo están fuera de toda duda. Lástima que el disco tenga sus pinceladas finales en dos temas que no llegan a las cotas que hemos podido disfrutar anteriormente.

A pesar de que de buenas a primeras, la unión entre Sweet y Lynch podría parecer demasiado bizarra (en cierto sentido, aún me lo parece), y que el proceso de creación del disco ha dejado todo el romanticismo de lado, "Only to Rise" funciona bastante bien. El disco quizá adolece de demasiados altibajos e incluso puede que le sobren un par de temas, pero hay que reconocer que cuando estos tipos dan con la tecla adecuada, todo encaja a la perfección: el sonido, la ejecución y la atmósfera en general que desprenden estos temas hará sonreír a más de uno. Vale la pena pegarle un tiento.

01. The Wish
02. Like a Dying Rose
03. Love Stays
04. Time Will Tell
05. Rescue Me
06. Me Without You
07. Recover
08. Divine
09. September
10. Strength in Numbers
11. Hero-Zero
12. Only to Rise