Había una gran expectación por ver a estas dos bandas. Y es que se colgó el cartel de “Sold Out”, ya que UNISONIC con Michael Kiske y Kai Hansen entre sus filas, y GOTTHARD, con Nic Maeder sustituyendo al malogrado Steve Lee.

Texto y Fotos: Sílvia López

Por eso había mucha gente desde el principio, mucha gente viendo a ambas bandas, llenazo total, algo inusual sobre todo para ver el telonero. Pero viendo la edad media de los asistentes, la verdad es que se podía entender el por que había tanta gente. La media podíamos decir que pasaba ampliamente de los 30, aunque si que había gente joven, pero la mayoría era de los que habían conocido la época dorada de Helloween, además de Gotthard.
Eso no era óbice para que el la temperatura de la sala subiera por enteros cuando sonaron los primeros compases de “Unisonic”, la canción con la que abrieron el concierto, donde se vió desde un primer momento que la audiencia estaba totalmente entregada a las canciones que iban a sonar por espacio de una hora y poco con UNISONIC que venía de otras actuaciones, quizás no tan existosas como estas.

Se les veía cómodos en el escenario, que como dijo Kiske no pisaban la zona desde 1989. Ahí es nada, pero Kai Hansen si que ha estado varias veces más en esta sala con su grupo Gamma Ray formado tras su salida de Halloween.

Es inevitable que haya referencias a su antigua banda, ya que ambos son los más conocidos precisamente por haber estado en ella en la época más exitosa de la misma, donde marcaron a mucha gente. Pero UNISONIC no son sólo Hansen y Kiske, ya que el resto de compañeros de banda son muy buenos y no desentonan en ningún momento, más bien al revés, ya que son un complemento perfecto. Dennis Ward al bajo, Kosta Zafiriou a la batería, Mandy Meyer a la guitarra.

Por eso, cuando en numerosas ocasiones se coreaba el nombre de Kiske o el de Hansen, el propio cantante hacía partícipes a todo el público de que los demás estaban ahí, y que había que aplaudirles como a los dos más conocidos. Pese a los años que han pasado y que se notan en su cuerpo, Michael Kiske es un frontman que sabe como mover a la gente y sabe como hacer disfrutar a todos, haciendo que cantásemos en el momento que había que hacerlo y marcando los tiempos del concierto con mucho acierto.

Su actuación la podemos dividir en tres bloques. Uno hasta que sonó la primera canción de Helloween, “March of Time”, tremendamente coreada, donde les siguió una balada “No one ever sees me”, que creo que sobraba, ya que no encajaba con la velocidad y con el ritmo que habían puesto.
Y de ahí hasta la parada, donde se veía la compenetración y la complicidad de la banda, donde todos son protagonistas, donde se les ve que son muy buenos músicos y que el directo lo tienen como su medio natural.

Tras el parón, y la petición correspondiente de su vuelta, Hansen que parecía muy animado, salió y se puso un momento a la batería, para enseguida marcarse un solo de guitarra que acabó con un clásico muy celebrado por todos, “Future World”. Sencillamente brillante en su ejecución, casi como si nos trasladáramos a los 80, cuando Helloween tuvo su máxima repercusión. A esta le siguió “I want out”, bajo el delirio total de los allí presentes, sin duda un gran broche de oro, y sin duda una grandísima actuación. Michael Kiske ya dijo además durante el concierto que próximamente, para el año que viene esperan poder venir de nuevo como cabezas de cartel. Seguro que se vuelve a llenar, visto lo visto en la Sala Totem

Set list UNISONIC:

01. Unisonic

02. Never Too Late

03. King for a Day

04. My Sanctuary

05. March of Time

06. No One Ever Sees Me

07. Star Rider

08. We Rise

09. Never Change Me

Bises:

10. Guitar Solo

11. Future World

12. I Want Out

Tras el cambio de instrumentos, era el momento de ver a GOTTHARD. Había expectación ya que era la primera gira con Nic Maeder al frente, a la voz, desde el fallecimiento de su cantante Steve Lee hace un par de años en un desgraciado accidente en EE.UU.

Se notó también el cambio de gente de las primeras filas sobre todo y que algunos ya se lo tomaron de otra manera, ya que pasamos de un heavy o power o como se quiera llamar a un hard rock tan potente como el suyo.El caso es que cuando se apagaron las luces y comenzó a sonar “Dream On”, fue ver salir a Leo Leoni con unas ganas increíbles. Y ya poco a poco el resto de componentes empezaron a darlo todo.

Evidentemente las miradas estaban concentradas en Nic Maeder, en tratar de ver si era capaz de estar a la altura del grupo, un grupo que por otro lado cuenta con muchos adeptos, como pudimos ver, por como la gente cantaba las canciones y por como se disfrutaba del mismo. Además la sala tiene una buena visibilidad prácticamente en todos los sitios donde te pongas.

Con un buen sonido, y con un Leo Leoni tirando del carro, para proteger a su cantante, además de estar magníficamente secundado por el resto de la banda, gozaron de un gran sonido durante prácticamente todo el concierto. Y pese a esa etiqueta de hard rock que tienen, escuchar temas como “Gone too far” puede hacerte cambiar de idea.
Si que es cierto que el nuevo cantante también acompaña a la guitarra acústica, como en “Starlight”, dando ese punto intimista.

Tampoco hay que olvidar que son cinco y que tanto Freddy Scherer a la guitarra como Marc Lynn al bajo y el batería de Hena Habegger, forman un combo que tiene un sonido compacto y que llevan ya el suficiente tiempo juntos y haciendo directos como para que canciones como “Top of the World” o “Sister Moon” suenen como es debido en directo.“Hush” parece que la han hecho suya, y fue un punto de inflexión ya que dio paso a un momento muy especial en medio del concierto, como fue cuando por parte de Nic Maeder y de todos los miembros del grupo se recordó a Steve Lee, con una sincera y emotiva interpretación dedicada a su figura con “One life, one soul”, que personalmente me llegó muy adentro.

Una vez tocada esta canción, el concierto siguió a tope, como con una recarga de energía y de pilas, ya que pusieron todo y ciertamente hicieron vibrar la Sala Totem de manera total.
En “Give Me Real” salió a relucir la guitarra de doble mástil enlazando con un final con "Mountain Mama", al cual es de agradecer por los que les siguen, continuando por "Right On" y "Lift U Up", a la que la enlazan con un especial ritmo que marca su inicio, ante la efusividad del respetable.

Ahí se marcó la obligada pausa, que si bien fue breve, hizo que volvieran para tocar "Master Of Illusions" y "Anytime Anywhere". Esta última canción, es casi un himno de la banda, y fue coreada por todos.
El detalle final estuvo en que se iban todos, y Leo Leoni se quedaba en el escenario tras saludar al respetable, y consiguió que sus compañeros se colgaran de nuevo los instrumentos para tocar la última de la noche, "The Mighty Quinn".

Ahí ya si, ya fue el final. Un final que se alargó agradeciendo la presencia de todos, agradeciendo el lleno y que ponía un punto y final a los conciertos por aquí de una manera sobresaliente. Quizás se echara en falta algún tema, quizás a Maeder le falte rodaje con ellos, pero lo que es innegable a tenor de lo visto es la entrega que tuvieron en el escenario, y la satisfacción con la que nos fuimos a casa.

Set list Gotthard: