Nightwish + Beast in black – 30 de Noviembre’18 – Wizink Center (Madrid)

Uno de los grandes como es Nightwish ha pasado ya los 20 años y eso es motivo para celebrarlo, como? Con una gran gira como era de esperar.

Texto y fotos: David Aresté

Una gira que servía de presentación de su “Decades” que han editado meses atrás vía Nuclear Blast y que resume la trayectoria del grupo durante sus 3 formaciones. Siguiendo en modo remember, el grupo ha reeditado también su “End of an era” que cumple 13 años… resulta curioso que después de todo lo que ha pasado quieran seguir manteniendo la estela de Tarja recordando tanto material antiguo, cuando muchos de los grupos que cambian de cantante regraban sus temas más clásicos. Al menos “de eso” iba esta gira, de recuperar los temas clásicos de la banda a manos de la voz de Floor Jansen…. Aunque también es cierto que Tarja fue un icono para el grupo y la escena y tampoco es plan de olvidarla para mucha gente.

Al igual que en su anterior visita para presentar “Endless forms most beautiful” vinieron al Wizink Center, además de 2 fechas más en Barcelona, Bilbao y su paso por el pasado Leyendas del Rock este verano. El reclamo de ver los temas antiguos quizá fue importante ya que el público asistente se mantuvo respecto a la anterior vez aunque ahora fueran 4 fechas repartidas por toda España.

  

El grupo para abrir la noche iban a ser su compañeros de sello y unos de los grupos con más potencial del sello como son Beast in Black. Ya vimos a los fineses con la gira de reunión que hizo Rhapsody y nos causaron buena impresión por lo que vimos. Seguían presentando su debut “Berserker” con su segundo disco «From hell with love» apunto aunque aun falta un poco para que salga. Así que los temas fueron prácticamente los mismos desde que los vimos: «Eternal Fire», «Born Again» o «Crazy, mad Insane» como temas a destacar; el propio Yannis nos dijo lo que comentábamos del disco y que había salido un single, que lo escucháramos al llegar a casa, aunque siempre queda mejor y te llevas una sorpresa cuando alguien estrena algo en el concierto.

La banda hace honor a su nombre y es una auténtica bestia en directo, sobretodo su cantante Yannis que tira de voz hasta el infinito demostrando su buen estado de forma. Las guitarras de Anton y Kasperi siguen fiel ese esquema rítmico y técnico, típico para las canciones y ayudando a Yannis a los coros, de forma un tanto intensa respecto a cualquiera. El otro bestia es Atte Palokangas a la batería, que le da sin compasión y de una forma más que certera, loco y rápido… que más se le puede pedir a un batería?

  

Caldearon el ambiente, nos dejaron exhaustos, todo lo que se pide de un telonero… pero esperamos más de ellos, que dejen de ser una banda de batalla y nos ofrezcan material nuevo, dando una vuelta más que seguro que nos ofrecen un estilo más elaborado.

Con las bestias fuera del escenario se comenzó a dejar apunto el escenario para el gran montaje de Nightwish. 3 tarimas en la parte posterior coronadas por una inmensa pantalla de video en el fondo más dos laterales era lo que traían los finlandeses para el gran repaso a toda su carrera, junto a un sinfín de efectos de pirotecnia que iban a saltar durante toda la noche.

  

Ya se vio en toda la gira que era el mismo repertorio para todas las fechas, así que éramos conscientes de que iba a ser un amplísimo repaso a toda esa carrera de 20 años, del primer disco al último… un interesante ejercicio para ver como iban a sonar esos temas en la voz de Floor pero que los “pro-Tarja” quizá no aceptarían. Pero la vida sigue, podemos confiar o no en como se quedan las bandas y bajarnos del tren si no nos convence… así que fundido a negro, explicaciones y cuenta atrás en la pantalla para que saliera Troy Donockley a intepretar “Swanheart” mientras se posicionaban los demás.

Al igual que en su última venida comenzaron con “Dark Chest of Wonders”, un tema más que perfecto para los directos y sobretodo para comenzar y calentar al público sin contar la ráfaga de fuego que fueron soltando durante todo el tema, esperemos que los de la primera fila aguantasen. Una celebrada “Wish I Had an Angel” fue la que siguió con su ritmo frenético y la portada del Once referenciada en la pantalla del fondo, como hicieron con parte de los temas que sonaron durante la noche. Nos quedamos de piedra al escuchar “10th Man Down” de los primerísimos NW, la alegre “Come Cover Me” y la metalera “Gethsemane” aunque adaptaba un poco al tono de Floor. De puente estuvo la empalagosa “Élan” que celebró la gente para pasar otra vez a la primera etapa del grupo con “Sacrament of Wilderness”, “Dead Boy’s Poem” y “Elvenpath” viendo todos los estilos que podía tocar el grupo y que ahora obviamente también se defienden sin ningún problema.

  

“I Want My Tears Back”, “Last Ride of the Day” nos devolvían de nuevo a la actualidad desde su “Imaginaerum” con una Floor pletórica destacando su registro más potente y enérgico, con esos estribillos sinfónicos de los dos temas con todo el mundo cantando. Último tramo hacia la primera época, con una rescatada de las profundidades “The Carpenter”, “The Kinslayer” (es curioso que sea esa y no Wishmaster, quizá esa sí sea territorio Tarja al igual que Phantom of the Opera) y una oscura y diabólica “Devil & the Deep Dark Ocean” aunque sorprendió que Floor no se atreviera con grunts 100% y que lo hiciera junto a Marco en un intento de algo intermedio. “Nemo” puso el punto meláncolico y melódico entre el tema anterior y el siguiente “Slaying the Dreamer”, que fue de nuevo sangriento y potente aunque faltó ese toque de unos grunts más potentes.

Era el final, y faltaban dos… así que blanco y en botella, “The Greatest Show on Earth” (las tres primeras partes) fue la primera con videos, orquestaciones de Tuomas, pasajes oníricos… todos cantando y hermanados por el estribillo, pelos de punta… Y ya para rematarnos una “Ghost Love Score” incomensurable, elegante, potente, delicada, grandiosa… es una canción 10, y si lo rematas con vuelo de confetti, la lágrima está ahí a punto. No se podía acabar mejor.

  

Floor pasó el “examen” sin ningún tipo de duda salvo en ciertos momentos que modificaron algunos temas, pero por lo demás sirvió para verla en los diferentes estilos que tenía el grupo. Su parteneir Marco siguió en sus trece cantando genial y aportando la base rítmica junto a Kai en la tarima central, Tuomas como siempre en un segundo plano pero no paró con sus orquestaciones y sus momentos importantes en el show,aunque tuvo problemas de sonido en alguna canción . El saltarín Emppu no paró en toda la noche marcándose los solos de los temas y ayudando a Tuomas en la parte principal del ritmo.

Nightwish sentaron cátedra en el Wizink, se trajeron sus mejores temas, toda la pirotecnia que tenían y nos dejaron con la boca abierta demostrando porque son uno de los grandes. Esperaremos al próximo disco para ver hacia donde van con Floor totalmente integrada ya en el grupo, y utilizan esa esencia que han recuperado al rebuscar entre tanto tema antiguo y lo mezclan con esos aires sinfónicos de los últimos discos.A ver con que nos sorprenderán.

  

Texto y fotos: David Aresté