La cuarta cita de nuestro periplo por Inglaterra era con una banda norteamericana de esas que algunos denominamos ‘golosinas’, que de tan caras de ver te cuesta creer que la tienes delante y no es para menos… ver el pelo a Night Ranger por nuestro país es un fenómeno aún más difícil de ver que el cometa Halley, pero esta estrella pasaba por UK como nosotros así que… había que aprovechar que los astros se alinearon…

Texto y Fotos: Susana Manzanares.

Entramos a las 19:00h en punto, o como dicen por allí, 7 o’clock (‘hora de la fiesta’, que estos  Quireboys saben mucho…). Esa noche esta estrella de la Bay Area brillaba sola sobre Londres y no compartía firmamento con nadie más. El hecho de no tener teloneros nos hizo pensar (erróneamente) que empezaríamos enseguida a disfrutar de los grandes temas de los americanos y que la hora y media que transcurría entre la de la apertura de puertas y la del show sería un error tipográfico de los carteles, pero no… Ciertamente esa hora y media -que se convirtió en casi dos- era la correcta y el concierto no empezó hasta bien entradas las 21:30… lo que por desgracia supuso un pequeño recorte en el setlist. Aquí seré ‘polite’ y no entraré a cuestionar si fue cosa de la puntualidad inglesa o de la americana…

No tardamos mucho en darnos cuenta que los pases VIP y Meet&Greet pudieron ser una de las razones de esta extraña disposición de horario, porque otra explicación no encuentro… todo parecía perfectamente montado y preparado en el escenario así que… yo me decanto por esa idea, pues ya en la espera justo antes del comienzo y segundos antes de apagarse las luces, un buen número de fans con su pase VIP colgadito al cuello, atravesaban el foso para  cruzar de un extremo a otro de la sala. No me pareció muy operativo, pero no seré yo quien vaya a quejarse, así que… ni mú y a lo mío.

Las luces se apagaron por fin y allí los teníamos, Jack Blades rubísimo y exultante salta literalmente al escenario bajo en mano y sonrisa de oreja a oreja encantado de la vida y de sus Rangers… No es extraño, yo también lo estaría si además de estar al frente de una banda como esta y con la gran acogida de su último trabajo High Road, por si fuera poco las cosas no pueden ir mejor a juzgar por el éxito que está cosechando con sus Revolutions…

Con ‘Touch Of Madness’ del segundo trabajo de la banda, empieza el espectáculo. Un gran tema de un gran disco, un clásico alegre, fiestero y más que apropiado para abrir una noche que desde ya prometía ser muy sustanciosa. Todos esos temas traídos directamente de los laqueados ochenta hicieron aumentar el nostálgico fervor de la audiencia de una sala que así a ojo diría yo que guardaría esa noche cerca de las 400/500 almas entusiasmadas, una de ellas la de servidora…

Desde sus inicios, Night Ranger ha sido una banda que sin destacar por reventar estadios, sí que ha mantenido una elegante línea de constancia en su sonido y en general permanecido siempre fiel a su estilo. En las dos horas de concierto la banda nos paseó por sus más de 32 años de carrera a través de temas como ‘Seven Wishes’, ‘Sing Me Away’ o ‘Sentimental Street’ con la que se erizaron los primeros vellos…
Hay mucho si, pero no todo es azúcar en el repertorio de la banda, a pesar de ese tema y de otros tantos igual de melositos, Night Ranger sabe también como levantar al público, de buena parte de ello ya se encarga Brad Gillis, esa fiera de las 6 cuerdas que es capaz de contagiarte su arrasador entusiasmo en lo que dura pisar de una cuerda a otra… Espectacular lo de este hombre…

Al otro lado del escenario y también a la guitarra teníamos a Keri Kelli, la nueva incorporación a la banda en sustitución del recién nacido ‘snake’ Joel Hoekstra. Kelli ha entrado por la puerta grande y se complementó a la perfección con Gillis durante todo el concierto y por ellos dos vinieron sendos guiños a sus anteriores respectivas bandas, de manera que también hubo un huequito esa noche para que nos ofrecieran ‘School’s Out’ de Alice Cooper y ‘Crazy Train’ de Ozzy.

Todo va en gustos y a mí si me preguntan hubiera preferido más temas propios de Night Ranger que para eso era su noche pero bueno, tampoco pasa nada, se canturreó y se enriqueció si cabe más el show. Y digo enriquecido porque si aparte de versiones y sus clásicos de siempre interpretados de lujo, además le sumamos la dosis apropiada de temas de su último disco High Road como la propia que da título o el precioso medio tiempo ‘Don’t Live Here Anymore‘ y, cómo no, los esperadísimos ‘Coming of Age’ y ‘High Enough’ de Damn Yankees que de ninguna manera podían faltar… con todo ello, el concierto va alcanzando la categoría de excelente.

Peros hay en todos los conciertos, en España o fuera de ella, eso es universal y para mí por ejemplo hay uno muy concreto: el exceso de charla entre tema y tema me sobra, es algo con lo que no me llevo nada bien y ahí el amigo Blades le dio a conciencia pero bueno… en lo musical estábamos viendo un show increíble así que por eso y por el buen ambiente que se hizo notar toda la noche, con un público receptivo al máximo y la entrega y buen humor de la banda, haciendo un poco la vista gorda, se les perdona.

Un buen humor bien visible que prevaleció incluso a pesar de algún que otro inconveniente técnico que se solventó rápidamente entre bromas, risas y chascarrillos relativos a Ted Nugent y Ozzy… siempre desde el cariño como se suele decir… O no?… Corramos un tupido velo…
Al concierto no podemos por menos que darle sobresaliente, así como al estupendo frontman que es Jack Blades y a esos dos increíbles guitarristas que tiene a cada lado, porque gracias a ellos mereció un poquito más la pena el habernos trasladado hasta allí.

Y ya que estamos con las flores es justo echar unas pocas a Eric Levy y su buen hacer a los teclados, cruciales en una banda como Night Ranger, y por supuesto a Kelly Keagy, siempre solvente tras los bombos y al quite en los coros cuando por momentos parecía que Jack evidenciaba atisbos de flaquear, resultando ahí un complemento perfecto a las voces… mención aparte para ‘When You Close Your Eyes’, donde se lució a base de bien.

La verdad es que todos se lucieron bien de principio a fin, un fin totalmente previsible pero perfecto, con sus dos temas más conocidos, ‘Sister Christian’ y ‘(You Can Still) Rock in America’. Con éste, cerrando el círculo y terminando el concierto con el mismo disco con el que empezamos, nos dicen adiós y se despiden de Inglaterra deshaciéndose en agradecimientos y promesas de volver… Volveremos nosotros también?… Quien sabe…

Texto y Fotos: Susana Manzanares

SETLIST
Touch of Madness
Seven Wishes
Growin’ Up in California
Sing Me Away
Can’t Find Me a Thrill
School’s Out (Alice Cooper cover)
Four in the Morning
Coming of Age (Damn Yankees)
St. Bartholomew
Sentimental Street
Night Ranger
Crazy Train(Ozzy Osbourne cover)
High Road
Don’t Live Here Anymore
Eddie’s Comin’ Out Tonight
High Enough (Damn Yankees)
The Boys of Summer (Don Henley cover)
Goodbye
When You Close Your Eyes
Don’t Tell Me You Love Me
Sister Christian
(You Can Still) Rock in America