Noche lluviosa y otoñal, de atascos interminables en Madrid, de esas oscuras y lúgubres, ideal para que Olvido presentaran en Madrid su nuevo álbum “Luto” y nefasta para que la gente saliera de sus casas a escuchar buen rock prefiriendo quedarse en casa viendo la televisión. Pero peor para ellos, se perdieron una buenísima velada de rock, donde lo progresivo y la elegante oscuridad infectaron la subterránea sala We Rock. Los encargados de poner el espectáculo sobre la mesa fueron los locales Back to R’Lyeh, los catalanes de cantante madrileña Antalgia, para cerrar con Olvido procedentes de Girona.
Texto y Fotos: Toni Marchante

 

La sala abrió sus puertas pasadas las nueve y media, hora en la que estaba programado el evento, pero la cosa no comenzó hasta las 22:30, cuando Back to R’Lyeh abrieron fuego con su metal progresivo de voz extrema. Era la primera vez que escuchaba a esta banda donde combinan una instrumentación bastante trabajada de metal pesado progresivo a cargo de Adrián Hernández y Manuel Novoa a las guitarras, Pedro Pérez al bajo y Ramón Nissén a la batería.

La nota más contundente y agresiva la marcaba su vocalista Hanz Beckert, quien se pasó gran parte del concierto merodeando y cantando entre el público, ya que la pista de la sala registraba poca afluencia. Esa ambición por parte de Hanz de cantar fuera del escenario provocó que en un par de veces se le desconectara el micrófono, con algún problema que otro, que provocó que algunos temas tuviéramos que escucharlos casi en versión instrumental, lo cual no fue tan grave, ya que su música es suficiente como para captar interés . La formación creada en 2011 están a punto de lanzar su nuevo disco “The Awakening/ Last Fight of the Primordial”. Comenzaron con “Basil Abscond” y dieron cuenta de su potencial durante cuarenta minutos.

Los siguientes en salir a escena fueron Antalgia, que se encuentran preparando el que será su segundo larga duración, recalando en Madrid después de las buenas sensaciones que nos dejaron en su última visita, donde telonearon a los suecos Therion en toda su gira europea. Antalgia ha ido creciendo satisfactoriamente de forma muy rápida, con un excepcional álbum debut y una gira internacional que no ha hecho más que consolidarlos encima del escenario. Y ese es el principal aspecto detectado en esta velada. Ante la falta de sorpresas en set list, pues todos los temas pertenecieron a su último disco, nos sorprendió la elegancia, el buen rollo y como siempre la impecable ejecución de sus temas.

Los catalanes comenzaron con “Embrace of death” que sirvió para ir calentando el ambiente en la sala, impregnándola del gelatinoso metal progresivo de dulce sabor que tan bien saben elaborar. En su conclusión Bella (que esta noche jugaba en casa) nos dió la bienvenida y nos introdujo de lleno en “Realm of Pain” que arrancó colosal con un Albert Gasen marcando con contundencia el ritmo y con una Bella en su plenitud, una vez calentada su voz. Tras terminar el tema, ya el grupo se había ganado a los asistentes y Bella pidió que los que estábamos allí nos arrimáramos al escenario para que siguiéramos disfrutando con el siguiente tema “Seed in the storm” que sonó mucho más directo, más rudo debido a la mayor presencia de la guitarra sobre el sonido de los teclados.

Dos grandes temas fueron los siguientes en sonar, los más melódicos “Lines of life” y “Broken wings” momentos ideales para disfrutar de la voz de Bella y de los grandiosos solos de Igna Jover; cambiando después drásticamente a uno de sus mejores “The Unseen Empire” donde entre aceleraciones y desaceleraciones apreciamos la gran calidad compositiva y ejecutiva de este póker progresivo. Como siempre preciosos y espectaculares los solos de Igna Jover, tal y como nos tiene acostumbrados. El final vino de la mano del track que abre su último disco “The invisible mechanism” su tema más comercial pero no por ello carente de una altísima calidad. Con Bella e Igna moviendo sus cabezas de lado a lado durante muchas fases de la canción nos hicieron disfrutar al máximo dejándonos con ganas de más, tras sus 45 minutos de actuación tal y como solicitó el público pidiendo “Otra, otra, otra!!!”.

Buen concierto del cuarteto que aunque en algunos momentos se vieron atacados por algún que otro acople de sonido, la buena labor de los músicos nos hicieron olvidar de inmediato estos pequeños incidentes. Bella disfrutó de forma especial por cantar en su ciudad, Albert estuvo impecable atacando la batería con mucho estilo y solvencia, Igna magistral demostrando ser el alma y el cerebro de esta máquina con su impresionante técnica y si hablamos de técnica, destreza y un trabajo redondo, no podemos olvidarnos del “bajista de las cuerdas coloradas” Carles Falomir que es toda una garantía para que todo esto suene a los niveles de excelencia que los asistentes pudimos percibir en la sala.

Set List:

1. Embrace of death
2.Realm of pain
3. Seed in the Storm
4.Lines of life
5.Broken wings
6.The unseen empire
7.The invisible mechanism

Ya pasada la media noche sólo nos quedaba por ver y escuchar la presentación del nuevo disco de Olvido: “Luto”. Los gerundenses vinieron desde sus tierras para teñir la noche madrileña aún de más oscuridad. Y lo hicieron con la belleza de su estilo romántico, tétrico y emotivo, recubierto por un contundente envoltorio de metal.

Usando como intro “Masked Ball” de la compositora Jocelyn Pook al igual que lo hacen habitualmente los suecos Ghost B.C., los componentes de Olvido fueron invadiendo el escenario para a continuación desplegar toda su artillería con “La Mascarada” un gran corte que nos demuestra la capacidad del sexteto catalán en el dominio del metal oscuro y puramente gótico, con un Néstor que iba adecuando la voz a todos los escenarios interpretativos que exigía la canción. De seguido siguieron con “Padre (Mientras dormía)” perteneciente a su primer álbum “Neurosis del destino” que los que nos encotrábamos allí nos encargamos de corear. Tras esto Néstor dirigió sus primeras palabras al público, pidiendo más volumen en su monitor y ofreciendo a los asistentes su nuevo álbum “Luto”, apostando a “Doble o a nada” que fué el siguiente en sonar, profundo, emotivo, haciéndonos levitar entre ese mar de guitarras que emanaban por los altavoces.

Tras ello nos embarcamos en la veloz “Pulsa Denura” donde pudimos ver la cara más agresiva de los gerundenses. Tras agradecer a los pocos afortunados que estábamos allí nuestra presencia, acometieron dos temas más de su anterior disco, dedicados a nuestros amigos que ya no están con nosotros, que están en el otro lado. Siguiendo al maestro Poe sonó “Más allá del gusano vencedor” y “Mis noches más bellas”. Tras ello, el momento simpático de la noche, donde Nacho comentó que mientras estaba cantando la canción el palo del micro se le estaba bajando, dándole la sensación de estar creciendo…

Lo siguiente en sonar fue “Ultreya” el tema escondido al final en su último disco y que sonó perfecta, para cerrar con la versión del tema de Loquillo, que han metalizado en su último disco para la ocasión. “La mataré” terminó por hacernos cantar a todos los que estuvimos allí. Cuarenta y cinco minutos de un gran metal oscuro que se nos hicieron cortos e insuficientes pero que a seguro compensarán con una nueva visita a Madrid en el futuro.

Gran banda, como podéis comprobar en sus dos discos, que saben llevar muy bien al directo, de hecho para mí suenan mejor en directo, aparte de que nos dieron un buen espectáculo. Mientras en el fondo del escenario Oriol Pujolrás a la batería marcaba la rítmica y Dani Ruíz rellenaba con sus teclados todos los espacios, al frente Ernest Parro, vestido con traje y corbata, todo de negro, con un marcado tupé, al estilo Loquillo, pero aporreando el bajo como el mismísimo Nagash. A las guitarras dos hachas que se complementan y presentan aspectos muy distintos. Mientras Nacho Losada nos muestra un look hard rockero de los 80, Max con un aspecto inicialmente más convencional nos sorprende porque una vez comenzó el concierto se vió poseído por un alma oscura que le hizo retorcerse y entrar en verdadero trance, resultando ser de los elementos más visuales de la banda. Y al frente de todos, su líder espiritual, Nestor; un cantante de voz potente y dramática, con mucha personalidad (como Bumbury en Heroes del Silencio o Eric Clayton en Saviour Machine).

Fue una noche Bella, bellísimamente oscura, lluviosa y con unos niveles altísimos de calidad que no hacen más que demostrar el gran nivel que presentan muchas bandas en nuestro país y lo duro que resulta para ellos salir adelante. Pero ahí están, con un par, con una ilusión inquebrantable, dándolo todo, siendo grandes por todo lo que nos dan, independientemente de que delante del escenario tengan a una persona o a treinta mil .

Texto y Fotos: Toni Marchante

Set List:

1.La Mascarada
2.Padre (Mientras dormía)
3.Doble o nada
4.Pulsa Denura
5.Más allá del gusano vencedor
6.Mis noches más bellas
7.Ultreya
8. La Mataré