Rockingham festival – 21-23 de Octubre’16 – Trent University (Nottingham)

Hace ya unos cuantos años que finales de octubre lo tenemos marcado en la agenda como fijo para recrearnos en nuestra dosis de hard rock melódico o Aor. Siempre en la ciudad inglesa de Nottingham y hasta el pasado año con un lugar muy adecuado para el disfrute absoluto de un festival de estas características. Y es que el “Rock city” se había convertido en algo muy especial en muchos aspectos. Nueva edición en 2016 y aunque en 2015 hubo el cambio de promotores no afectó en demasía a lo que viene siendo el festival, este año si se ha notado mucho la modificación.

Texto y fotos: Joaquim Valls

Siguen siendo tres días, pero el cambio de emplazamiento no ha beneficiado uno de los hechos importantes en este festival, y es que el sonido esta vez ha sido el mayor perjudicado. Por tanto los conciertos buenos, o muy buenos se han visto mermados por este gran inconveniente. Por otro lado no vamos a negar que la falta de público ha sido un hecho real para el cambio de lugar, si el pasado año pudimos estar anchos esta vez al reducirse drásticamente el lugar, no había duda que hemos dado un paso atrás.

Lo más importante son las bandas, no negaré el gran interés por alguna de ellas, pero seamos claros, el festival hasta este año era conocido por ofrecer bandas bastante “underground” dentro del estilo. Pero es que este año 2016 hemos sido incluso más “underground” que los predecesores, ello no quita que los “talibanes del Aor” (dicho con mucho respeto) se dieran cita en Nottingham. Tres días, 18 bandas, de las que pude ver 17 y momentos muy interesantes a nivel de disfrute, pero que me entran dudas de cómo se puede mantener un evento así con esa serie de bandas americanas o que simplemente se reúnen para este evento. De todas formas un aplauso bien grande a quien se atreve a hacer algo así. El sitio era un lugar adecuado dentro de la Universidad de Trent, el lugar donde cabía sobre 500 personas se llenó y creo que casi en todo momento los que estábamos éramos siempre los mismos.

VIERNES

Para empezar el festival tuvimos a unos chavalines suecos, Art Nation. A priori y una vez escuchados un par de temas ya me pude hacer la idea de que sonaban totalmente a sus compatriotas, H.e.a.t, y es que estos Art Nation son como unos aprendices de educación primaria de los anteriores. No negaré que están bien, pero cansa tanta y tanta repetición, a mi sin ninguna duda una banda como ellos me aburre, prefiero lo original.

El viernes este año era realmente una toma de contacto, pero de entrada muy interesante, de hecho un par de bandas que quería ver estaban este día, les siguieron unos que repiten del pasado año, Valentine con Robby Valentine al frente, creo que me pierdo un poco, porque el año pasado fueron de las peores bandas que tocaron y por petición repiten, no entiendo nada. Su concierto para mí fue incluso un poco peor que el pasado año, con eso está dicho todo, lo que me sorprende también es que un tipo que liderara unos interesantes Zinatra en los ochenta ahora se haya convertido en un tipo gótico e industrial que toca en festivales melódicos.

Bueno hasta ahora simplemente nos habíamos familiarizado con la sala, pero tocaba el turno de una de las fuertes atracciones del festival, la presencia de Lee Aaron era deseada, todos sabíamos que últimamente había flirteado con el blues. A mí me encantó la vez que la vi, pero esta vez ya se preveía diferente. En efecto Lee Aaron no hará metal, como la canción en cuestión que todos esperan, pero ahora mismo tiene una consistente banda de hard rock. Tiene la base de blues pero lo retoca con esas incursiones duras y tener unos compañeros que saben que los que estábamos allí necesitábamos guitarras afiladas y disfrutar de los antiguos clásicos de la canadiense, simplemente nos encandiló y pudimos disfrutar de grandes interpretaciones de “Lady of the hardest night”, más otros como “Holding on”, “Whatcha do to my body” o “powerline” junto a ese gran final con “Metal queen”. Sin duda uno de los conciertos del festival ,y muy grande ver en este perfecto estado físico y musical a nuestra querida Lee Aaron.

Los cabezas de cartel de la primera jornada eran ni más ni menos que los americanos Trixter, en una de las pocas apariciones que han tenido en este continente, uno de los grupos por las que muchos tenían la razón de su presencia en Rockingham 2016. Sin ninguna duda merece la pena ver y disfrutar de estos clásicos del hard rock ochentero. El paso de los años no ha mermado la efectividad del directo de esta banda y ofrecen grandes conciertos, por eso no es extraño que Brown fuera sustituto de Vivian Campbell en una de sus últimas giras.

Lo peor de todo fue que el sonido no les hizo suficiente justicia, todos nos dábamos cuenta que escuchar las guitarras de Steve Brown era una locura. El tipo se sale y contagia con su demoledor directo, pero en si toda la banda lo disfruta y nosotros que estamos debajo también. Para mi fue todo un pasote escuchar temas tan clásicos como “Give to me good”, “Surrender”, más nuevos como el “rocking to the edge of the night” o el emocionante “One in a million” por una banda que muchos se han burlado en el pasado pero que sin duda tiene un directo eficaz, un gran final de la primera jornada que si no hubiera sido por un sonido no del todo acertado ya hubiese valido la pena el viaje.

SÁBADO

La segunda jornada y llena ya de conciertos empezamos con los también jovencitos, Stone Broken. Una banda similar a lo que puedan hacer unos Black Stone Cherry pero a diferencia de los debutantes del día anterior, estos si tienen canciones con personalidad propia, bien por ellos y un buen inicio de jornada, aunque muy diferente de lo que se vio en general en el festival. Les siguieron unos veteranos en esto del Aor, gente mayor tocando esta música bajo el nombre de Blood Red Saints.

Parece ser que en Inglaterra en este tipo de música son respetados, pero con todos mis respetos por ellos, me parecieron exageradamente planos. Vaya que una banda más sin aportar nada que les distinga de la multitud, eso sí gustaron, pero ni la presencia en uno de sus temas como invitado a Paul Laine supuso un cambio en la estructura de un concierto plano. Otro de los nombres atractivos del festival de 2016 era la reunión de Lionheart con el exMaiden Dennis Stratton a las guitarras. El concierto que hicieron estuvo bastante bien, sobre todo por tener a un vocalista que iba de sobrado y ejecutaba los temas de forma más que destacable, sin ser un gran concierto Lionheart nos hicieron pasar un buen rato. A continuación, por temas logísticos me perdía Crazy Lixx, me dijeron que en su línea y supieron levantar los ánimos sin grandes alabanzas.

Los que si pude ver fueron otra vez a los suecos, The Poodles. Seguro que sus fans les gusta como es la banda en directo, pero para empezar para mí su gran error empieza por sus propios temas. Cuestión de gustos al fin y al cabo, pero otro de los atractivos del festival era poder ver de nuevo al que fuera ex bajista de The Plasmatics y líder de Crown Of Thorns o Voodoo X, Jean Beauvoir y su banda. La verdad es que esta vez el tipo se esforzó pero su concierto no acabó de funcionar, y es extraño porque para mí el setlist si estaba bien elegido. Puede que demasiados temas en los que en su momento intervino y pocos propios íntegramente, de todas formas todos le agradecimos su versión que coescribió junto a Kiss, el “Uh all night” que raramente tocan para quienes fue compuesto, pero algo falló para que el concierto no acabara por ser recordado, una lástima.

Y ya llegamos al final de la segunda jornada con la presencia exclusiva de los Hard rockeros americanos, Steelheart. Pues bien, fue bajar el telón y todos, absolutamente todos sucumbimos ante la furia extrema de su vocalista, un tipo llamado Mijenko Matjevic que nos conmovió como era necesario. La banda que le acompañaba no eran mancos precisamente, su hard rock blues con garra era lo que todos necesitábamos, uno de los atractivos del festival y uno de los grandes vencedores, incluso en ese momento el sonido pudo casi ser cristalino, impresionante ver a unos Steelheart que ya había visto antes, pero sinceramente no me esperaba esto. Nos dejaron anonadados con un concierto brutal en todos los aspectos, no dejaron títere con cabeza, brutales “everybody loves Eileen”, el clásico “stand up” con toda la sala a sus pies, aunque puede que el tema de hacer un par de versiones de Zeppelin les fuera en su contra pero supieron lidiar con mucho orgullo con ello. Un gran final para una segunda jornada en la que Mijenko era el motivo de charla de todos los que estábamos allí.

DOMINGO

Tercera jornada, la del domingo que empezamos con la sueca, Martina Edoff, teniendo como compañeros a gran parte de H.e.a.t como músicos de directo. Su concierto estuvo bien, pero para mí lo mejor fue ver a Eric Rivers de nuevo en los escenarios, ya se había anunciado su vuelta a los suecos y visto lo visto todo un acierto. Les siguieron otro de esos grupos ingleses que tanto quieren los que aman esta música, Angels Or Kings y al igual que el día anterior con Blood Red Saints, planos en todos los aspectos. Dado esto lo mejor era esperar a ver que nos deparaba la tarde, la verdad es que el señor del Vecchio es muy conocido en este y el festival anterior, sus intervenciones han sido muchas a lo largo de los años, pero lo que no me esperaba es que hiciese un concierto tan bueno.

Esta vez como The Alessandro Del Vecchio Band y dejando un poco de lado los teclados y centrándose en ser un líder/vocalista con gran personalidad, su concierto se basó en un puro repaso a sus aportaciones al hard rock, incluso se atrevió a tocar el “Turn back time” de Revolution Saints, que no sonó tan perfecto pero fue muy digno, una sorpresa ver a este señor haciendo lo que hizo en Rockingham 2016. Llegado este momento una de las bandas que se reunieron exclusivamente para este evento, Fortune, procedentes de Los Angeles y con tan solo un disco editado en 1985, en pleno 2016 y en exclusiva del festival inglés. La verdad es que eran muy esperados por todos esos hardcore fans del Aor; creo que todos nos dimos cuenta que siguen teniendo un directo muy respetable y entiendo que muchos puedan disfrutar de una banda como Fortune hoy día pero eso no quita que se note una falta de tablas absoluta, disfrutables y un caramelo que muchos aprovecharon para disfrutar, sonaron casi todos los temas de su único disco, tanto “Home free”, “Dearborn station” o “Thrill of it all”.

Otros también aclamados en esto de las reuniones exclusivas de este festival son los también norteamericanos, From The Fire, que ya tocaron en un pasado Firefest, ahora volvieron y para mi esta vez no llegaron a ser tan interesantes como en su pasado concierto. El show fue de más a menos y ni ese añadido de chica vocalista ni la ausencia de John Mcoy al bajo, suplida de forma efectiva por un músico de calidad pero sin esa personalidad que si nos mostraba Mcoy. Tocaba el turno al nuevo Proyecto que han confeccionado tres ex-Danger Danger, bajo el nombre de The Defiants y presentando su disco debut. Tanto Paul Laine como Bruno o Rob Marcelo saben muy bien lo que se llevan entre manos y su directo resplandece de forma mucho más eficaz que en estudio.

The Defiants salieron a triunfar y así lo hicieron, “Beat the bullet” o “Going going gone” nos hicieron saltar, y todos nos dimos cuenta que ellos se merecían ser los cabezas de cartel de la jornada, no faltaron “Dorianna” de la carrera en solitario de Paul, y “Waiting on a heartbreak” de este nuevo proyecto, sin duda lo tuvieron todo de su parte. Y es que estos músicos saben muy bien lo que se llevan entre manos y nos hicieron disfrutar de lo lindo con sus propios temas o con esos temas que fueron rescatados de forma más que correcta del paso de Laine por Danger Danger. Rockingham 2016 sucumbió el domingo ante la banda americana.

Y para postre una de las exclusivas más preciadas por los amantes del rock melódico, ver a un personaje como Kevin Chalfant en esta parte del globo terráqueo es muy difícil, ya lo es en su propia tierra, el que un día fuera vocalista de grandes grupos del “underground” Aor, ya sean, The Storm, 707 o incluso su participación como miembro en Journey eran grandes datos a tener en cuenta. Por supuesto que no tiene una banda fija, aquí se hizo acompañar del conocido instrumentista inglés, Bayley al bajo y voz. Kevin nos deleitó con su música, ya sean grandes revisiones de Journey, Survivor o temas propios, como la gran “Loving, touching, squeezing” de Journey, “We will last”, “Running with the wind”. Un buen final pero que hubiese podido ser un poquitín mejor si lo hubieran cerrado la banda de Paul y sus compañeros de Danger Danger.

Como reflexión decir que sin duda finalmente ha valido la pena el esfuerzo en desplazarnos, eso no quita que el festival se haya reducido a un nivel de dudosa continuidad, si siguen realmente tendríamos que alabarles por su esfuerzo y perseverancia, se nota que quienes llevan esto son simples fans, y nosotros desde su mismo nivel se lo agradecemos al máximo, ¡gracias por esos conciertos para recordar!

Texto y fotos: Joaquim Valls