Como se veía venir ya desde hace unos años, los legendarios Rush han puesto fin a su carrera. Ya en las últimas giras e incluso en el último disco costó tirar de Neal Peart quien después de pasar por diversas tragedias personales aquejado también de problemas físicos no encontraba en la banda el aliciente suficiente para continuar, además de que hablamos de tres sexagenarios que ya han contribuido sobradamente al mundo de la música.
Eran evidentes los rumores, Neal Peart colgaba las baquetas, aunque un halo de esperanza aún persistía al no haber ninguna confirmación oficial, pero las declaraciones de Alex Lifeson (guitarra) al noticiario canadiense “The Globe and mail” han sido definitorias, afirmando que tras dos años después del último concierto no tienen planes para hacer nada más en conjunto, confirmándose así el retiro.
Rush se fundó en 1968 aunque su primer homónimo disco se lanzó al mercado en 1974 y ha escrito una página muy importante en la historia del rock. Su último álbum de estudio fue “Clockwork Angels” en 2012 tras el que le siguió su última gira mundial. Una banda que tuvo unos inicios hardrockeros y que fueron mutando hacia un estilo de rock progresivo muy original y particular, que supieron dar un giro más comercial en los ochenta para volver a reorientar su sonido hacia un progresivo con más protagonismo en el rock. Grandes obras maestras capitaneadas por “2112” (1976), sin poder dejar de mencionar “Hemispheres” (1978), “Moving Pictures”(1981), “Power Windows”(1985), “Roll the Bones”(1991) o “Snakes and Arrows” (2007); sería de justicia nombrar toda su discografía porque todos tienen su encanto. En Rush no era importante sólo la música, las letras y los conceptos fueron creativos y fascinantes , “2112” y “Clockwork Angels” son dos claros ejemplos.
Alex Lifeson sigue trabajando en varios proyectos y Geddy Lee imaginamos que también seguirá, independientemente de que la edad pase factura, algo que ya podíamos notar en su voz en las últimas giras de Rush. Sus directos siempre han sido impresionantes, con grandes producciones en la segunda mitad de su carrera, llenando estadios en Estados Unidos y en Canadá. Habría sido bonito haber cerrado su historia con una gira 50 aniversario este año y habría sido la guinda que hubieran visitado nuestro país, algo que no ha ocurrido nunca aunque parezca mentira, triste pero cierto. Otra leyenda que termina su andadura. Solo nos queda agradecerles su música.
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