Hace pocas semanas pudimos hablar sobre Unisonic y las tres nuevas canciones que habían publicado en forma de EP y como anticipo de este Unisonic. Como dijimos, estos tres cortes se quedaban escasos y dejaban ciertas dudas del nivel y lo que nos podrían ofrecer en este Unisonic. Si bien, la unión de Kai Hansen con Kiske ofrece ilusión y unas garantías, las canciones se quedaban en un notable, echando de menos ese algo, ese toque maestro que caracterizó a Helloween.
Nota:7,5/10  

Tras escuchar el disco completo, las sensaciones son parecidas. Es un lujo que estos dos grandes músicos se unan, es algo que muchos llevamos esperando mucho tiempo, y más viendo que los últimos años Kiske volvía a reconciliarse con el rock. Como digo, un lujo, pero que le falta un punto más, para llegar a cotas más altas y, por otro lado esperables. Encontramos un puñado de buenos temas, agradables de escuchar, que entran fácilmente a la primera escucha, con ese toque dulzón en la voz de Kiske, pero sin entrar en ninguna complejidad y sin llegar a aportar nada o casi nada a la escena. Eso sí, estribillos tarareables y divertidos los hay a puñados, y es que Kai siempre ha sabido componer de tal manera que explote a las mil maravillas las enormes posibilidades vocales del señor Kiske.

Para mí lo principal, y el gran acierto de este trabajo, es que han abandonado el power metal al uso, ya fuera de toda moda y escuchado hasta la extenuación durante casi 20 años, para dar paso a canciones más hard rockeras y modernosas, un rock más noventero.

¿El gran fallo? Quizás el exceso de estribillos facilongos, que acaban cansando y que suenan a lo mismo de siempre. Igual que entra fácil, no engancha tanto como podría, siendo un disco que de escucha agradable pero no de los que se quedan indefinidamente en el reproductor del coche. Esto es debido, en parte, a la nula complejidad instrumental, canciones de cuatro acordes, muy estándar y predecibles, que suenan bien, pero simplonas, con ritmos muy marcados y muy usados tanto en Helloween, Gamma Ray, etc. De hecho recuerda casi más a discos como el Pink Bubbles Go Ape o como una versión actualizada de Pink Cream 69, con aires comerciales por los cuatro costados que a la banda de metal que todos esperábamos y deseábamos.

Y ya metiéndonos en materia de los temas que nos vamos a encontrar, destacar My Sanctuary, que pudimos disfrutarlo en el EP y que es un corte de carretera y coche a toda velocidad, rockero y macarra (teniendo en cuenta que las canciones cantadas por Michael nunca pueden sonar rockeras y con mala leche, desluciéndola ligeramente), Never Too Late con un riff inicial con el sello 100% Gamma Ray y una melodía radiable al máximo o Never Change Me que recuerda sobre manera a la forma de componer (especialmente el riff) del I Want Out aunque con un tempo algo más lento.

Unisonic sirve como carta de presentación y de intenciones de la banda. Ya casi todos hemos tenido la posibilidad de escuchar este tema (ya sea en youtube viendo el videoclip, bastante austero por cierto, o en algún bar), tema directo a la yugular, rápido y sin concesiones, que sirve para hacerse una idea exacta de lo que es y lo que no es esta banda. No hay virtuosismos, solo rock y melodías, y sobre todo buen rollo y diversión.

Star Rider o I’ve Tried no es que sean una maravilla, pero con sus aires a hardrock noventero, al estilo Gotthard, o incluso recordando por momentos a Place Vendome pueden llamar la atención a más de uno o Souls Alive que también vino en el Ignition (EP), quizás el más powermetalero al uso, con riffs y ritmos más galopantes.

Por otro lado, también encontramos un par de temas lentos donde Kiske el vocalista alemán saca todo su potencial. Destacar Over The Rainbow, un baladón donde Kiske sí consigue hacer lucir y mejorar el tema. Sin duda de lo mejor que nos podemos encontrar en este Unisonic, especialmente por el trabajo de Kiske y Meyer (exAsia) dándole aires sesenteros y mostrando que el legado de Hendrix está presente hasta en el metal. También No One Ever Sees Me suena muy bien, además que está acertadamente colocada como último tema, en una balada de inicio acústico y sobre todo bastante orquestal y sinfónico, con el apoyo de unos teclados que le dan la melancolía y tristeza que la canción necesita.

En cuanto al sonido, como era de esperar, la producción es perfecta, nítida, donde la voz dulzona resuena como nunca, fuerte y redonda y las guitarras suenan literalmente perfectas, con el punto justo de distorsión para sonar cañeros pero sin pasarse ni crear esa bola típica de muchas producciones que hace que las canciones suenen todas iguales. En este punto, merecen un 10, y demuestra que no hacen falta kilos de distorsión para sonar rockeros, ni mucho menos. Si bien digo esto, resaltar la horrible portada, austera e insulsa, con una U en fuego y el nombre de la banda sobre un fondo negro, una idea que ni representa lo que aparece en este trabajo, ni resulta atrayente.

En resumen, dejando un poco de lado la melancolía de cualquier tiempo pasado fue mejor y las ansias de ver juntos a Kai y Kiske, se puede decir que si bien la banda suena y nos podíamos esperar un poco esto, a este disco le falta algo (bastante a mi entender) para volver a estar en la boca de todos. Nadie espera un Keepers, que eso son palabras mayores, pero sí un disco que se quedase una buena temporada en el coche y con ese Unisonic, a mi entender no lo han conseguido. Gustará a mucha gente, es un disco que para ponértelo de fondo o para pasar un buen rato ya digo que está muy bien, pero poco más. No obstante, hay tiempo para que la banda se consolide y hagan trabajos aún más interesantes.

Lista de temas:

1. Unisonic
2. Souls Alive
3. Never Too Late
4. I’ve Tried
5. Star Rider
6. Never Change Me
7. Over The Rainbow (Limited-Edition Bonus Track)

8. Renegade
9. My Sanctuary
10. King For A Day
11. We Rise
12. No One Ever Sees Me

https://www.unisonic.de/

[youtube]http://youtu.be/2XR65ATnBWI[/youtube]