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CRIM regalan una gran noche de Punk y furia a la Salamandra

CRIM regalan una gran noche de Punk y furia a la Salamandra

CRIM + Arkada Social + Sewer Brigade – 3 de Noviembre 2023 – Sala Salamandra (Hospitalet De Llobregat – BCN)

‘Cançons de mort’ es uno de los discos del año y CRIM un referente dentro del Punk Rock, no ya catalán sino estatal. Esta gira está pasando por muchas ciudades y se están dando a conocer en nuevos lugares mientras la banda no para de crecer. Este era el último concierto de la banda en el área metropolitana de Barcelona en unos meses y quisimos estar allí para comprobar nuevamente lo punzantes que suenan en directo.

A las 20h00, muy puntuales, saltaron al escenario Sewer Brigade. La banda de Sant Andreu venía a presentar su más reciente larga duración, ‘Fins que tot sigui cendra’, de 2021. Enérgicos y con la motivación de jugar en casa, fueron sinceros cuando su vocalista, Jose, dijo que no estaban acostumbrados a tocar en recintos tan grandes. La sala fue llenándose de gente poco a poco mientras avanzaba el concierto. “Nuevo orden”, “Esperanza” o “Barcelona” calaron en un público en el que se encontraba un fan de la banda con su hija, de unos 8 o 9 años, y que estaban dándolo todo a ritmo de Punk Rock.

Media hora para demostrar la calidad que atesoran y en la que sonaron muy bien pese a ser la banda de apertura del cartel.

Los míticos Arkada Social, con más de 25 años de carrera, volvían a presentarse en suelo catalán. El quinteto arrasó con 45 minutos de StreetPunk que contó con el apoyo incondicional del público que a esa hora ya llenaba Salamandra. Alternando canciones en euskera y en castellano tuvieron momentos álgidos cono “Seguiremos juntos”, “Hil orduko bizi” o “Rómpelos”. Hodei a las voces tiene un gran carisma y el público cae a sus pies a las primeras de cambio. Los de Mondragón repasaron todos sus discos y, claro, cuando recuperan temas de su primer trabajo, ‘Sin sufrimiento no hay gloria’, como “Esos del barrio” la concurrencia se engorila, igual que con la versión del “Odio mi patria” de R.I.P. Si una canción tiene Arkada Social que revoluciona al personal, esa es “Miles de cadáveres” con gritos de “puta policía” y que, al terminar, se mantienen al unísono.

Grandes momentos de un concierto intenso que nos dejó con ganas de más.

Y llegaba el turno de CRIM con un Adrià que no paraba de repetir que tenían ganas de volver a las salas, a ver las caras de la gente, incluso reconoció a varios de ellos. El concierto no solo no defraudó, sino que superó cualquier expectativa con un setlist muy extenso y que tuvo varias sorpresas, un sonido nítido y potente y una comunión entre banda y público que hacen que nada pueda salir mal. Y por si fuera poco empezaron con “Benvingut enemic”, uno de sus grandes himnos que generó, ya de buenas a primeras, la locura colectiva.

Venían presentando el ‘Cançons de mort’ pero sorprendió que los tres primeros temas del concierto fueran de discos anteriores. Nadie se quejaba por ello y “Maneres de viure” y “I ara et sents trist” fueron himnos que pusieron por las nubes la excitación del concierto. Con un ritmo trepidante llegó el momento de desgranar el nuevo disco y “Patrimoni mundial”, el primer single que salió, puso aquello patas arriba mientras llegaban también “Cançons de mort” y “Vam riure tant”.

La banda en estado de gracia, disfrutando y haciéndonos disfrutar como si se acabara el mundo. Crim no tienen nada que demostrar, su bagaje es intachable y su discografía y sus directos hablan por sí solos, pero, claro, en la parte central del concierto, se empeñaron en sacar músculo con “No em fas falta” y “L’mp3 em va arruinar la vida” de su debut. Mucho cambio en el repertorio y eso es algo que les engrandece en un momento en que las bandas acostumbran a girar con un setlist cerrado.

Otro tramo de nuevos temas con “Sense tú estic molt bé”, “La part preferida I” i “Estiu de merda” para dar pie a un tramo final de vértigo. Que “Hivern etern” es ya uno de los grandes clásicos de la banda está claro al ver la reacción de la gente, que no cesa en su empeño por generar un pogo permanente y por cantar hasta la afonía su letra, pero la colección de himnos que cierran el concierto no le va a la zaga como es el caso de “Vaixells de paper”, “Cavalls morts” o un revitalizante “Verí caducat”.

Las gotas de sudor eran palpables arriba y abajo del escenario, las sonrisas y el éxtasis también. Y por fin llegó “Una cançó i una promesa” que trajo el delirio junto a “Castells de sorra” y la ya hímnica “Pare nostre que esteu a l’infern”.Crim no hacen dos conciertos iguales, no repiten setlist y aunque ya sabíamos que siguen teniendo muy presentes sus primeros trabajos, en esta ocasión volvieron a demostrarlo ¡y de qué manera! Y nosotros lo agradecimos.

Un concierto de CRIM siempre sabe a poco pero después de haberlos visto en festivales con un repertorio reducido, volver a verlos en sala, y sentirlos tan de cerca, supo a gloria. Contando los días para el siguiente.

Texto y fotos: Marc Gutiérrez
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