El caso del guitarrista vasco Robert Rodrigo presenta su sexto trabajo bajo el nombre de Living for Louder. El caso de Robert en solitario o con su banda Airless es el típico caso de músico o banda que, incomprensiblemente, no tiene el reconocimiento y la repercusión que su labor como músico merece. Este nuevo CD puede y debe ser el impulso definitivo para el talentoso guitarrista vizcaíno.

Belch

Para esta ocasión, Robert ha unido sus esfuerzos a un cantante de altura como es Johnny Gioeli, que muchos recordarán de bandas como Axel Rudi Pell o Hardline. Y la elección no puede ser más acertada. Un músico que defiende los temas a las mil maravillas y al que el estilo le sienta como un guante. Pero no solo las dos estrellas participan en este trabajo. La labor de Miguel Manjón al bajo, Pako Martínez a la batería y Gotxi Ibarra al teclado hammond, crea una base rítmica muy sólida, apoyada en un sonido y una producción realmente buenas.

La crítica en una frase que se puede hacer al disco es que es un discazo de hard rock que, en otra época y en otro país, hubiera dado el pelotazo. Un puñado de buenos temas, compuestos de manera magistral, e interpretados especialmente por Gioeli tan bien como nos tiene acostumbrados que hacen que este disco se ponga entre los mejores del año pasado sin lugar a dudas. Me resulta extremadamente difícil destacar un tema por encima de los demás. El nivel es alto en los 10 temas que componen el disco. Quizás no sea un disco a priori sencillo de entrar. Puede abrumar por la cantidad de arreglos con aires virtuosos que deja Robert. Pero una vez entras en el disco, le das varias escuchas vas descubriendo todo lo bueno, que es mucho, que tiene el trabajo.

Los riffs son muy ingeniosos, saliendo de los clichés habituales, las melodías que al principio pasan desapercibidas, en seguida empiezan a pegarse y a hacer que quieras escuchar el trabajo una y otra vez. También destaca por ser muy variado. No centrándose en hardrock sin más, sino cogiendo la esencia de diferentes bandas y etapas de la historia del rock, pero siempre con una marca de la casa altamente reconocible. Haciendo repaso a los temas, encontramos para comenzar el corte que da título al disco, quizás el más comercial de los 10. Un hit en toda regla del que han grabado el videoclip correspondiente y que es la mejor carta de presentación posible para el trabajo.

Southern Skyes es otro de los grandes pelotazos que tiene Living for Louder, con un riff funky muy divertido e ingenioso pero una estructura y melodías que me recuerdan enormemente a Mr. Big. Pero no es la única que tiene un aire a la banda de Gilbert, Sheehan y Martin. Lifeline es el típico corte melódico que compondrían Mr. Big, con un estribillo tremendo. Anita’s Boogie es algo totalmente distinto al disco, y me atrevería a decir, que a toda la carrera del guitarrista vasco. No porque sea una canción instrumental, que de esas ha hecho muchas y muy buenas en su carrera, sino por la base que une la velocidad de un blues a ritmo de boogie, con la fuerza del hard rock. Break It Out sigue por la vertiente más blusera. Un mediotiempo emocional pero con fuerza, que me ha recordado a Deep Purple en la época de Coverdale a las voces.

Worn Out puede ser la más heavy, en el sentido que la base rítmica destila fuerza, unido a un estribillo que hace que Gioeli aumente su rango vocal a tonos más agudos de lo que nos tiene acostumbrados. Blue cambia por completo con la inercia que llevaba el disco, y nos deja un corte muy similar a los últimos discos publicados por Andy Timmons, ya no solo porque sea una canción instrumental, cargada de feeling y técnica orientada a transmitir, no a demostrar sus dotes, sino los recursos y la forma de tocar es 100% Timmons (y conseguir sonar a ese monstruo y defenderlo con calidad es altamente complicado.) Pese a ser un tema instrumental, es muy agradecido de escuchar incluso por los no amantes de las seis cuerdas.

Sweet Time, por su parte, es el corte más arduo, donde los cambios de ritmos y estructuras, junto con riffs imposibles, no invitan así, a priori a escucharla muchas veces. Es un corte muy para músicos con lo bueno y lo malo que eso conlleva. Para acabar nos deja la grandísima balada instrumental, cargada de emoción y buen toque y High Dose Rate, una locura muy heavy, con muchos guiños incluso a metal extremo, también instrumental.

En resumen, es un disco muy bueno, con un compendio de buenas canciones. Quizás la parte final del disco pida una última canción no instrumental, como cierre a la magnífica colaboración de Johnny Gioeli con Robert. No obstante, el resultado es realmente bueno y demuestra el gran nivel que tenemos en este país.

Belch

Temas:

1.- Living for Louder
2.- Southern Skyes
3.- Lifeline
4.- Anita´s Boogie
5.- Break It Out
6.- Worn Out
7.- Blue
8.- Sweet Time
9.- The Land of the Seven Colours
10.- High Dose Rate

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