Son ya muchos los años que venimos siguiendo a los pamplonicas KOMA allá por donde pasen. Les hemos visto en festivales, en diversos conciertos alrededor de la geografía española y, cómo no, en todas las descargas que han llevado a cabo en tierras catalanas durante los últimos siete años y, sin temor a equivocarnos, podemos decir que KOMA nunca han defraudado.
Texto: Marcel.lí Dreamevil
Fotos: David Aresté

La última vez que tuvimos ocasión de verles fue el verano del 2011 en Vila-seca, cuando ya estaban presentando su último trabajo de estudio “La maldición divina” y ya entonces nos dejaron, como siempre, muy buen sabor de boca.

Poco más de un año después, y tras el anuncio de que Brigi decide abandonar Koma (para montarse en un futuro en otro tren), KOMA se ha embarcado en una serie de conciertos cuyo principal reclamo es la última posibilidad de ver a Brigi Duke, Natxo Zabala, Rafa Redín y Juan Carlos Aizpún juntos encima de un escenario (al menos durante bastante tiempo).

Así, esta serie de últimos conciertos la empezaron hace meses destacando el pasado 13 de octubre en Madrid, continuaron el 26 en L’ Hospitalet del Llobregat (Barcelona) y todavía les quedan citas en Valladolid, Murcia, Valencia, Zaragoza, Bilbao, culminando, como no podía ser otro modo, el 29 de diciembre en Pamplona, su tierra natal.

Hecha esta breve introducción, y a sabiendas de que en Madrid llenaron la Sala Arena hasta la bandera, teníamos la expectativa de que el turno de Barcelona tendría similares características pero lo cierto es que la Sala Salamandra, con capacidad para 850 personas, solamente llegó a congregar, aproximadamente, la mitad de la sala.

Tal vez por eso, en lugar de abrir puertas a las 21h, tal y como rezaba la entrada, esperaron a abrir una hora más tarde. Aún así, y para sorpresa de un servidor, se respiraba muy poco movimiento por los alrededores la cual cosa puede ayudar a entender que tal vez Brigi haya dado por finalizada su etapa en Koma ante el convencimiento de que, por muy buenos discos y directos que sean capaces de hacer, su carrera ha tocado techo (y lo digo con muchos interrogantes y desde un punto de vista claramente subjetivo).

Valoraciones al margen, he de decir que ya desde antes del concierto, aquellos fans que quisieron tuvieron la oportunidad de contactar directamente con la banda puesto que dos horas antes de la apertura de puertas los KOMA al completo estaban juntos cenando en un restaurante ubicado delante de la sala. Del mismo modo, y abiertas ya las puertas, el propio Brigi estuvo un buen rato conversando con unos y con otros antes de entrar en el camerino para aparecer, instantes después, encima del escenario, acompañado por sus veteranos compañeros, para empezar su descarga con “Tío Sam”, uno de los clásicos de su primer disco de 1996.

El segundo tema en caer fue “Los idiotas”, de su último lanzamiento, y ya entonces hubo una división clara del público. La primera mitad optó por descargar toda la adrenalina posible, gritando, saltando y haciendo pogo, mientras que la mitad trasera se mantuvo más bien estática disfrutando del espectáculo.

En cuanto a la actitud de la banda he de decir que siempre y en todo momento mostraron una más que evidente complicidad y buen humor entre ellos, lo cual hace suponer que el abandono de Brigi es algo que sus colegas, y supongo que amigos, han sabido entender perfectamente. No en vano, y fue algo que comentamos después del concierto, llamó la atención que Brigi hizo algún que otro guiño a la posibilidad de vernos nuevamente “en festivales” o al hecho de que tal vez esto de su abandono no sea algo tan definitivo como pueda parecer con frases como “nos vemos, seguro que nos vemos pronto”.

Como comentaba en el parágrafo anterior, lejos de parecer una despedida, este concierto fue KOMA al 100% y la contundencia, carisma, fuerza y locura de Brigi estuvo presente en todo momento y muy especialmente en temas que hacía tiempo que no teníamos ocasión de ver en directo como es el caso de la esperada “El catador de vinagre”, “Pensamientos fúnebres” o “Menos mal”.A medida que avanzaba el concierto la banda se iba creciendo cada vez más, Brigi empapaba su camisa haciendo alarde de un excelente estado de forma física y contagiando al público su entusiasmo ofreciendo su guitarra a las primeras filas, chocando manos, riendo y estableciendo esa buena comunicación que todo buen líder debe saber hacer.

Dos horas de concierto fueron las que ofrecieron los pamplonicas y durante las que sonaron los temas que todos esperábamos oír. “Imagínatelos cagando”, “Vaya carrera que llevas chaval”, “El pobre”, “El muro de Berlín”, “Jack Queen Jack”, “Protestantes” o “Bienvenidos a Degüelto” fueron de lo mejor de la noche y, como digo, el público de las primeras filas no cesó ni un instante de hacer alarde de la misma entrega que estaba dando la banda al completo encima del escenario.

En términos generales el sonido fue correcto aunque en algunos momentos hubo algún problemilla de ecualización que, por suerte, se solucionó rápidamente. Por otra parte tal vez añadiría que, para mi gusto, la guitarra de Brigi, que recordemos lleva gran parte del peso rítmico de la banda, estaba con un volumen demasiado bajo (cosa que pudimos comprobar en algunos riffs en los que solamente tocaba él). De todos modos, tampoco es algo que mermara la potencia de la banda porque para eso ya está su otro compañero de mástil, el bueno de Natxo que, todo sea dicho de paso, disfrutó como el que más en este concierto y no paró de demostrarlo.

En cuanto a la labor vocal de Brigi, algunos apreciaron cierto “desgaste” en cuanto a la ferocidad de sus gruñidos pero, para ser sinceros, creo recordar que él mismo hizo unas declaraciones hace ya algunos años en las que explicaba que uno de los trucos para conservar la voz era, precisamente, no forzarla tanto en los directos (al fin y al cabo, el público suele cantar a menudo las letras). Añadido a esto también cabe añadir que estamos ante una banda que lleva “molestando a los vecinos” desde 1995 y que los años nunca pasan en balde. Eso sí, tomad esta opinión como un matiz porque es indiscutible que la mala leche de Brigi sigue intacta.

KOMA, en sus directos, siempre consigue lo mismo, a saber, que el concierto parezca que dure cinco minutos así que, después de soltar 19 temas “del tirón”, la banda se retiró del escenario ante un público que no tardó ni un instante en reclamar que volvieran con los bises. Ese fue el turno de “Sakeo” seguido del medley “El marqués de Txorrapelada”, “Aquí huele como que han fumao”, “Mi jefe” y “El infarto” para finalizar con “La almohada cervical”, single de su último trabajo.

Después de ese demoledor bis, entonces sí que KOMA se despidió definitivamente y lo hizo “a lo grande”. Primero con una foto desde el escenario en dirección al público como homenaje a los allí presentes y luego lanzándose al público para que los llevaran en volandas por toda la sala (a excepción del tímido Rafa, el bajista, que no se atrevió con tal travesura). Después de toda esta divertida macarrada, Brigi se despidió de todos invitando a los presentes a encontrarse en la barra de la sala para seguir charlando.

Como dato curioso, tal y como reza la biografía oficial de KOMA, “Su primera maqueta, publicada en 1995 se vendió rápidamente, con un total de mil ejemplares, y comienzan a tocar en bares y gaztetxes con Brigi al micrófono, el cual siempre había estado en la batería.” Será, por tanto, que se cumple el dicho aquel de que “la cabra siempre tira al monte” y que Brigi, después de tantos años al frente de KOMA haya preferido retomar su instrumento original y ocupar una posición más moderada en la parte trasera de los escenarios de TXARRENA.

En cualquier caso, pocas decisiones son inamovibles en esta vida y tal vez (y sólo tal vez), el cariño que el público de KOMA está mostrando en esta gira pueda servir, como mínimo, para que el bueno de Duke se replantee ciertas ideas y que empiece a hablar de “descanso” en lugar de “abandono” de KOMA. El tiempo hablará.

Como conclusión, y a pesar del poco público (para lo que podría haber sido), KOMA volvieron a salir más que triunfadores con un concierto “a pelo” (recordemos que no llevan teloneros), de dos impresionantes horas de duración y entregando su alma a sus siempre fieles seguidores.Solamente nos queda esperar a la primavera del 2013 para ver qué son capaces de hacer KOMA en su nuevo trabajo y para descubrir al que deba ser su nuevo vocalista (reto francamente complicado).

AGUR KOMA!

Texto: Marcel.lí Dreamevil
Fotos: David Aresté

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Set list de Koma – 26/10/12 – Sala Salamandra – Hosp. de Llob @Barcelona:

  1. Tío Sam
  2. Los idiotas
  3. Imagínatelos cagando
  4. El catador de vinagre
  5. Jipis
  6. No te lo tomes a mal
  7. Vaya carrera que llevas, chaval
  8. El pobre
  9. Caer
  10. El muro de Berlín
  11. Me vacío
  12. Pensamientos fúnebres
  13. Sé dónde vives
  14. El exorcista
  15. Jack Queen Jack
  16. El sonajero
  17. Protestantes
  18. Bienvenidos a Degüelto
  19. Menos mal
  20. BISES
  21. Sakeo
  22. El marqués de Txorrapelada
  23. Aquí huele como que han fumao
  24. Mi jefe
  25. El infarto
  26. La almohada cervical

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KOMA: La maldición divina // Maldito Records ( Promo Sapiens )