La noche en que Backyard Babies volvían a Barcelona en su gira de reunión tras cinco años de separación se vio empañada por los ataques en Paris que habían acontecido menos de 24 horas antes. Sin embargo, a pesar de un ambiente algo enrarecido, los Babies no se amedrentaron y decidieron continuar con su tour saltando al escenario de una Sala Bikini que si bien no se llenó, si presentó una buena entrada.

Texto y Fotos: Edko Fuzz

El triple cartel de la noche estaba formado por tres bandas suecas de distinta índole pero con un común denominador clarísimo: el Rock en mayúsculas. Así, el trio Junkstars fueron los primeros en asaltar las tablas con su punk vieja escuela a lo The Clash y Rancid. "Kill the Ravens" fue la encargada del abrir el corto set en el que la banda se mostró totalmente entregada, especialmente el cantante y guitarrista Max Diesel, que también quiso tener un recuerdo para las víctimas de Paris con 50 segundos de silencio que el público respetó.

   

La banda se encuentra en plena gira de presentación de su último disco, "This Means War", del que también interpretaron "Snakebites", "Romace of Death" o el propio tema título, mientras que también hubo tiempo para temas un poco más antiguos como la celebrada "First Time I Heard The Clash", que nos metió de lleno en un concierto de Rancid de mitad de los noventa. La cosa no dio para mucho más, pero Junkstars se fueron por donde habían venido dejando un buen sabor de boca al personal.

La siguiente banda, Heavy Tiger, también venían presentando nuevo disco, "Saigon Kiss". No hay duda que el referente tanto visual como musical de este trio son The Runaways, como atestiguan los monos rojos con-logo-de-lentejuelas-incluído que visten, muy reminiscentes de finales de los setenta, o el corte de pelo o la Gibson Melody Maker de la guitarrista y cantante Maja Lynn. Tampoco difrutaron las jóvenes suecas de mucho tiempo sobre el escenario, pero fue más que suficiente para obsequiarnos con temas como "Superstar", "Chinatown" o "Saigon Kiss".

   

Heavy Tiger parte de la inagotable cantera de bandas suecas que han crecido con el rock por bandera y se saben todas las poses y trucos del catálogo para mantener la atención del público. Aparte, todas se muestran comunicativas y simpáticas mientras intercalan fragmentos de temas de AC/DC, levantan los mástiles de sus instrumentos al unísono o se suben a la batería y van pegando botes por el escenario. Además se turnan a las voces y la risueña Astrid Carsbring se lo pasa de muerte cantando las melodías de su infeccioso rock popero desde detrás de la batería. Otra media hora que se pasa en un suspiro y que deja el terreno perfectamente allanado para las estrellas de la noche.

Y finalmente, Backyard Babies volvían al mismo escenario barcelonés en el que habían actuado en su gira de despedida el año 2010. La sala no estaba tan llena como aquella vez, posiblemente porque el disco que viene presentando la banda "Four by Four" no está teniendo la repercusión deseada, pero había gente de todas las edades; desde veteranos como el que suscribe que seguimos a la banda desde que vinieron por primera vez, hasta auténticos jovenzuelos que probablemente estaban disfrutando de la experiencia Backyard Babies por vez primera.

   

Tras una intro por la PA de la sala a todo volumen con "Welcome to the Jungle" de Guns N’ Roses, arrancó el set con el tema que abre el álbum que vienen presentando, "Th1rt3en or Nothing". El público respondió desde el primer momento y esa tónica se mantuvo ya durante el resto del show. Es innegable que los temas que mejor reacción arrancan de la gente son los que conformaban aquél ya lejano "Total 13", y una vez tras otra el público explota suene "Highlights", "Made me Madman" o "U.F.O. Romeo", que el entrañable Dregen sigue presentando con el consabido "You got a pRRRRRRRoblem?!?" que ya usaba en la gira de 1998. Imposible no amar a este tío.

El setlist es un repaso muy equilibrado a todas sus obras, exceptuando el debut "Diesel & Power", e incluye temas potentes como "Brand New Hate", "Dysfunctional Professional" o "Star War" pero también hay momentos para la calma con "Bloody Tears" o "Roads", que viene precedido por un pequeño fragmento de la fantástica "Painkiller", un tema que llevaba muchos años en el cajón de los olvidos. Pero da igual la canción que esté sonando que la entrega y profesionalidad de la banda es intachable.

    

De hecho, ya hace unos años que Backyard Babies se han convertido en los Def Leppard del punk: sonido perfecto, metrónomo, shows calculados y cada uno desempeñando un papel muy marcado. Peder y sus coletas mandan desde atrás en la batería, Johan está siempre un falso segundo plano con bajos en los que hay grabada la palabra "DUFF" a cuchillo, Dregen está más dibujo animado que nunca y, por supuesto, Nicke lleva la voz cantante con una actitud mezcla entre Zen y Mike Ness. El sonido de la sala acompaña, por supuesto, y tanto "Abandon", como "The Clash" o "Minus Celsius" suenan de muerte mientras el público, que se las sabe todas, acompaña en coro constante.

Un comunicativo Nicke no se cansó de elogiar a Barcelona y sus gentes, agradecer a las otras bandas su trabajo sobre el escenario o, también, recordar a las víctimas de los ataques en Paris, ciudad donde los Babies grabaron un disco en directo, para los que tuvimos otro minuto de silencio. Sin picotear demasiado en el último disco, el set principal llegó a su final con un coreado "Nomadic", que dio paso a un encore que, por fin, no culmina con "Minus Celsius" (como venía siendo norma desde hace incontables giras), si no que la banda vuelve a optar, con acierto, por "Look at You", su tema fiestero por antonomasia que desata la locura en las primeras filas y que nos manda a todos a la larga noche barcelonesa con una sonrisa en la cara.

   

Es cierto que Backyard Babies ya no son ni la sombra de lo que solían ser en el estudio, pero hay que reconocer que en directo siguen siendo una máquina de matar. Dicen que la energía solo puede transformarse, y eso es lo que ha hecho el cuarteto: su desenfrenada actividad que desembocaba en un torbellino punk sobre el escenario, se ha ido tornando en autocontrol y profesionalidad fuera de toda duda combinada con mayor pegada y contundencia. Sobre el escenario Backyard Babies lo siguen teniendo, y así será hasta que ellos lo deseen. Fantástica noche.

Texto y Fotos: Edko Fuzz

Setlist Backyard Babies

Th1rte3n or Nothing
Highlights
The Clash
Made Me Madman
UFO Romeo
Brand New Hate
Dysfunctional Professional
Bloody Tears
Heaven 2.9
A Song for the Outcast
Star War
Painkiller / Roads
Wasted Years
Nomadic
—-
Abandon
Minus Celsius
Look at You