Los catalanes CRIM están de vuelta con un nuevo disco. Tras “10 Anys Per Veure una Bona Merda”, donde la banda repasaba sus canciones favoritas dentro de su repertorio pero esta vez en inglés (y con una edición del álbum donde invitaban a grandes amigos de bandas como Kvelertak, The Baboon Show o Angelus Apatrida entre otros, “Cançons de Mort” es su nuevo disco.

Este es su segundo avance (después de Patrimoni Mundial, incluido en el sampler de los 20 años de HFMNCREW) del nuevo disco que llevará el mismo nombre y que saldrá durante el próximo mes de marzo del 2023.

Nuevo single que canta sobre el inevitable fin de la existencia, que cada vez parece más real y que está cada vez más cerca. Y es que a pesar de lo que marque tu reloj, estamos a 100 segundos de que se acabe todo. Un final escrito para una sociedad enferma que se autodestruye día a día.

«Hay placeres en la vida que por suerte, no valen dinero. La música es uno de ellos. Y si existe un grupo que me ha hecho disfrutar estos últimos 11 años ha sido CRIM. Hacía tiempo que esperaba recibir su cuarto LP y por fin ya ha llegado. «Cançons de Mort» es un pedazo de disco de principio a fin, que sigue la línea del mejor punk rock criminesco. Y es que estos tíos han logrado crear una marca, sólo tienes que escuchar la primera nota para saber de qué grupo se trata. No hay engaños.

Son ellos. Canciones redondas, intensas, luminosas, vitales, con energía y contundencia, letras afiladas y a veces venenosas, metralla lírica, con melodías que silban como balas, para corearlas a pleno pulmón y que te cautivarán porque van directos al tuétano. Fuerza centrífuga sin medida ni límites. El bloque de «Sense tu estic molt bé», «La veritat és perillosa» y «Estiu de merda» te pondrá la piel de gallina y los pezones erectos. Placer adulto. Sí, placer que no cuesta dinero, pero yo te recomiendo que no seas rata y te gastes cuatro euros en este LP.

Tu colección de discos lo agradecerá. Lo agradecerá mucho, porque ellos han vuelto a hacerlo. Y es que no puedo parar de escucharlo. Orgullo de comarcas.»

Jordi Sabatés