Dark Moor + Pequerockers – 4 de Marzo’17 – Sala Arena (Madrid)

Es muy típico eso de ‘estuvimos ahí para contarlo’, pero el pasado fin de semana estuvimos presentes en uno de esos momentos con el concierto aniversario que ofrecieron Dark Moor en Madrid para celebrar sus 20 años en activo.

Texto: Susana Mazanares
Fotos: David Aresté

Si hace muy pocos meses vivíamos otras noches para recordar con la consolidación (a efectos prácticos) de la carrera meteórica que están llevando los albaceteños Angelus Apatrida en sus sendos conciertos de Barcelona y Madrid quedando inmortalizados en vídeo, este fin de semana fue el turno para Dark Moor, otra de nuestras grandes bandas que cumplían 20 años sobre los escenarios y que reunieron a toda su gente para obsequiarles con lo que mejor saben hacer, un gran concierto con un importante repaso a su discografía e invitados especiales para la ocasión, dando como resultado otra noche para el recuerdo.

Tal y como se anunció en su día, el concierto también iba a tener un importante componente social, ya que parte de la recaudación iría destinada a la ONG Save the Children, que trabaja para la defensa y protección de los derechos de la infancia y que lucha por un mundo más justo para todos los niños y niñas. Además, en el concierto también pudimos ver un stand con merchandising solidario para todo aquel que quisiera colaborar y apoyar a dicha causa, así que… razones teníamos de sobra para no perdérnoslo.

Siguiendo en esta línea, ¿qué mejor telonero que los Pequerockers? una ‘pequeña’ gran formación integrada por niños y niñas pertenecientes a la Yamaha Music School y que interpretan versiones de los grandes clásicos del rock. Una fresca y entrañable forma de apoyar y dar una oportunidad a las nuevas generaciones que vienen pisando fuerte y quieren dejarse oír implicados desde chiquitines con este estilo de música que tanto nos apasiona.

Tras un rato estupendo de disfrutar del desparpajo y de cómo se desenvuelve de bien nuestra próxima generación de músicos, era el momento de cambiar de equipo para dar paso a Dark Moor. Tras las últimas fechas por México el año pasado y sin haber presentado aún su último Project X por España, la banda se plantaba nuevamente en Madrid dos años después de su última visita.

Equipo listo, luces apagadas y en la penumbra la intro ‘Fallen Leaves Waltz’ de su Autumnal acompañó la salida a todos los miembros de la banda, Berenice Musa (Tears of Martyr) a los coros, Pablo Sancha a los teclados, Roberto Cappa a la batería, Dani Fernández al bajo, Enrik García a la guitarra y por último Alfred Romero que enlazó a su salida con ‘The Chariot’, el primer tema de la noche. De lo más nuevo a lo más antiguo, la banda repasó temas de todos sus discos hasta llegar a un total de 22 y alcanzando casi las dos horas y cuarto de show.

Beyond The Star’, ‘Before The Duel’, ‘Love From The Stone’ le siguieron y fueron los que nos dejaban ver a una banda en un estado de forma increíble con un más increíble todavía Alfred Romero. Exultante, interpretativo, sentido y que cantaba con fuerza desgarradora cada una de las notas. Hacía muchos meses que no me conmovía tanto una voz, como yo suelo decir, que no me ‘estrujaba las tripas’… esa noche redescubrí a una banda que tenía olvidada desde aquél The Gates of Oblivion con el que yo los conocí haciendo algo que por entonces sólo los de fuera lo hacían así de bien…

Había muchas ganas del grupo esa noche, ya que son más bien pocas las veces que los tenemos por aquí, y aunque nos enorgullece y nos alegramos de su éxito fuera de nuestras fronteras, eso también en cierta forma nos los aleja… Esa noche sonaron para nosotros solitos y espléndidas ‘This Is My Way’, ‘Together As Ever’ y ‘The Existence’ por decir sólo algunas… Aunque bien es cierto que la banda se mueve como pez en el agua con las más sinfónicas como ‘El Último Rey’ o ‘A Music In My Soul’ apoyadas en unos sólidos teclados creando un bloque de sonido más compacto, elegante y atronador ideal para que Alfred lo tuviera aún más fácil para dejarnos boquiabiertos, temas menos sinfónicos, más hardrockeros como ‘Lovers’ o ‘Love From The Stone’ también eran muy disfrutables pero en mi opinión con algo menos de impacto, pues me faltaba un poquito más de garra, echaba de menos una guitarra más que hubiera enriquecido la melodía y esos grandes estribillos hasta llegar a ser tan señores como los temas más que ya habían sonado. La "Marcha turca" de Mozart ponía el punto curioso a la noche confirmando la técnica de todos los instrumentistas de la banda con Enrik como director de orquesta acompañándose con el público haciendo la melodía de la pieza.

La noche prometía invitados y Pablo y Berenice en vez de invitados ya salieron como miembros de la banda, al menos en el caso de Pablo ya que Enrik lo presentó oficialmente como el nuevo teclista. Pero faltaban más, y con el primero de ellos se me confirmó lo de que con otra guitarra ciertos temas de la banda suenan a otra cosa… el primero fue con Jose Garrido de Arwen para ‘The Bane of Daninsky’ que sonó potente, afilado y con el que José aportó el lado técnico y solos de altura a su participación.

Aunque a la hora de hablar de invitados, quizá los más esperados de la noche eran los que vendrían a continuación, pues ha llovido mucho (cuentan las crónicas que desde aquél lejano Nit de Reis en Barcelona) desde que no se veía juntos sobre un escenario a Albert Maroto, Elisa Martín y Enrik García. Salieron para tocar ‘Maid of Orleans’ del primer disco de la banda, y el homenaje a Poe ‘Nevermore’, ambos con toda la sala desgañitándose a pleno pulmón acompañando a la emocionada y entregada Elisa viviendo el bonito reencuentro deshaciéndose en halagos para con sus compañeros en un momento también para el recuerdo cuando Alfred salió a cantar junto a ella ese segundo tema (regrabado también para la edición del Project X).

Si pensamos que era una ocasión que no se volverá a repetir (o quizá sí, quien sabe..) Elisa podría haber estado en algún tema más, pero supongo que había que ceñirse a unos tiempos y un setlist y no hubo tiempo para más, que se hubiera agradecido para que Albert Maroto se resarciera de los problemas técnicos que sufrió su guitarra, ya que buena parte de la canción y los solos no se oyeron del todo con lo que su participación se nos quedó como a medias y agridulce. Encararon la recta final con un tema nuevo, melódico y ochentero tal como lo clasificó Alfred mientras nos invitaba a cantar su pegadizo estribillo.

Faltaban temas y la gente lo sabía y tenían ganas de más así que aclamaron a la banda a que salieran, y Alfred, como hizo antes también durante la noche, salió con su acústica para volver con ‘The Road Again’ el single de Ars Musica y que cantó todo el mundo construyendo entre todos el gran fin de fiesta de una noche llena de solemnidad y elegancia y en la que acabaron, como no podría ser de otra forma, con ‘La Canción Del Pirata’ con todo el mundo cantando con Alfred homenajeando a Espronceda como ni él mismo hubiera imaginado.

Noche donde el ‘Leónidas de Cádiz’ Alfred Romero se erigió como una de las mejores voces de la escena -si no lo era ya- haciendo retumbar los cimientos de una sala Arena llena hasta arriba para hacer historia de sus 20 años de Dark Moor. Pero además del capitán del barco, no hay que olvidar al resto de tripulación, los gamberros progresivos Pablo Sancha y Roberto Cappa que se compenetran a la perfección por compartir filas en Delyrïum y conforman una base rítmica para que Dani Fernández aporte su trabajo y que todo suene compacto y unido y Enrik le ponga su firma a esas 6 cuerdas que son parte del sello característico del grupo (aunque sigo pensando que con una guitarra más ya sería perfecto).

Noche en la que un grupo con tal estado de forma se tenía que merecer mucho más, más público, más aforo… que ya estamos en lo de siempre, si esto viene de Alemania, EEUU o Inglaterra por ejemplo y se llaman ‘X’ vamos todos a verlos y agotamos entradas. No son profetas en su tierra, a la vista está, la última vez que Dark Moor tocó aquí fue hace dos años y en una única fecha pero bueno, esperemos que eso cambie o al menos que sigan haciendo música con la misma calidad y nos sigan regalando su arte por otros 20 años más, Felicidades.

Texto: Susana Mazanares
Fotos: David Aresté