Conforme pasan las primaveras uno va viendo como las bandas que a uno le han ido acompañando a lo largo de los años van organizado giras conmemorativas y una de ellas es la de estos siempre fuertotes MANOWAR que, precisamente, se hallan embarcados en su “Crushing The Enemies Of Metal Anniversary Tour ’22/‘23” con motivo de los 40 años de la banda (aunque en realidad ya van por los 43) y que les traerá el próximo 30 de junio al BARCELONA ROCK FEST como única fecha española (noticia que ya avanzaba la organización hace un año y que tuvo que posponerse por culpa de la pandemia)
Total, que no se me ha ocurrido mejor momento que este para homenajear el que para mi fue el disco que catapultó a la fama a MANOWAR hace justamente la friolera de 35 años. Hablamos del emblemático “Fighting the world” y es que creo que pocos discos han sabido aprovechar 34 minutos y 52 segundos de esta manera.
Bien es cierto que el año 1987 fue uno de esos años gloriosos para el género. No en vano vieron la luz discazos como el “Among the Living” de ANTHRAX, el “Apetite for Destruction” de GUNS N’ROSES, el “Raise Your Fist and Yell” de ALICE COOPER, el “Keeper of the Seven Keys: Part I” de HELLOWEEN, el “Abigail” de KING DIAMOND, el “The Legacy” de TESTAMENT o el “Animal House” de U.D.O pero el “Fighting the World” de los MANOWAR no se le escapó a nadie por alto. No hay nadie cercano al género que no conozca el “Carry On” y quien diga lo contrario miente.
MANOWAR, fundados años atrás (1979), por aquel entonces ya llevaban algún que otro disco publicado, a saber, “Battley Hyms”(1982), “Into Glory Ride”(1983), “Hail to England” (1983) y el reconocido “Sign of the Hammer”(1984) pero lo cierto es que el cambio de discográfica les supuso un cambio de producción, sonido y giro compositivo cuyo objetivo era llegar a un mayor público y, desde luego, lo consiguieron.
Así, con la formación dorada al completo compuesta por Joey Demaio al bajo, Eric Adams a la voz, Ross The Boss a la guitarra y el ya tristemente fallecido Scott Columbus a la batería presentaron un total de nueve composiciones de muy fácil digestión y muy adictivas.
El primer corte, “Fighting the world” ya empieza a golpear duro, como una clarísima declaración de intenciones…”Manowar’s made of Steel not clay!” ¿Queda claro no? Desde luego, lo que hoy podría interpretarse como una de las portadas más horteras de la historia, para un chaval de 13 años que justo acababa de cerrar el cajón de los muñecos de He-Man y Skeletor para acabarse el último capítulo del cómic de Thor, aquello era una auténtica “flipada” de disco. Y ya no os digo nada si continuaba con la escucha del segundo tema, “Blow Your Speakers” mientras se leía lo que rezaba la contraportada del vinilo:
“He who refuses to take part in modern mediocrity will forever stand alone, an outcast. He is bringer of change, changes that instill fear in all who go with fashion’s flow. Their power comes from others, not from within. They are false! Woe unto them for the bringers of change have banded together. The time is now! We cannot stopped! We are riding up, riding hard on the will of the people. The battle rages – Choose your side. DEATH TO FALSE METAL! Forever Fighting The World!”
A estas alturas, uno ya estaba plenamente sumergido en la fantasía del martillo y la espada y de repente suena uno de los mejores sencillos de la historia de MANOWAR. La voz limpia de Adams nos sirve de intro de los coros de “Carry On” y los timbales de Columbus son la antesala de la explosión del tema más pegadizo del plástico.
Y ahí andábamos todos los de secundaria cantando y cantando sin parar el mismo estribillo como si no hubiera un mañana. Y así en cada uno de los rincones de este planeta. ¿Empezamos a entender donde está el secreto de la banda?
“Violence and Bloodshed” sirve para cerrar la cara A del vinilo. Personalmente un tema que tampoco aporta mucho al conjunto de la obra y a juzgar por lo que se le ha recuperado en directo a posteriori diría que la propia banda ha acabado por opinar más o menos lo mismo.
Entrando ya en la cara B, pese a estar dividida en 5 títulos, casi podríamos estar hablando de una única pieza porque, a diferencia de los temas de la primera cara, aquí todas las canciones están enlazadas.
Empezamos con una de las joyas llamada “Defender”, relatada, nada más y nada menos que por el mismísimo Orson Welles y épica donde las haya. Le sigue un pasaje de percusión titulado “Drums of Doom” que da paso a la tremenda y acelerada “Holy War” en la que Columbus ya se arranca con el doble bombo plenamente coordinado con la contundente base rítmica del bajo de Demaio (con castañuelas incluidas).
Acabada esa primera batalla, “Master of Revenge” nos ofrece un breve interludio para dar paso a otra de las favoritas, que sigue siendo otra de las que se mantiene hoy día en los directos de la banda. Hablamos de la feroz “Black Wind, Fire and Steel”. Tema estrella del disco con el que recuerdo volvernos locos practicando la doble pedalera en el patio del instituto y practicar a ver si éramos capaces de aguantar los 30 segundos del grito final que se marcaba Eric Adams al final de la canción (debidamente cronometrado con nuestros fantásticos relojes Casio, no se vayan ustedes a pensar).
Lo cierto es que en esa época la media de edad de los componentes de MANOWAR era de treinta y pocos años (no eran púberes precisamente) y se puede decir que en cuanto a estética y letras se estaban dirigiendo a un público más bien adolescente. Su mérito tiene haber conquistado a una legión de chavales que aún, hoy en día, seguimos con ganas de calzarnos la camiseta del martillo y la espada para levantar los puños y cantar con ellos sus letras de machotes.
Después de este “Fighting The World” aún llegaron cosas buenas. Dicen algunos que incluso llegaron a mejorar marca con aquel “Kings of Metal”(1988) y que aún pudieron mantener el tono con “The Triumph Of Steel”(1992) y “Louder Than Hell”(1996) pero son cosas de las que, tal vez, hablaremos en otro momento.
Por ahora, como apuntábamos al principio, los miembros originales de MANOWAR que son, Demaio, Adams, vendrán acompañados del guitarrista E.V.Martel y el batería Dave Chedrick y visitaran, por segunda vez, desde el 2014, el escenario del BARCELONA ROCK FEST. Espero que recuperen algunos de los clásicos contenidos en este gran disco.
“No synths, no pedals, no wimps. Just Power, Metal and Might”.
