Muchos conocen a los suecos All Ends por ser el proyecto paralelo de Jesper Strömblad y Björn Gelotte. Los guitarristas de In Flames fundaron su grupo alterno en 2003, y actualmente asumen en él el rol de compositores. Sin embargo, poco parecido tenía All Ends entonces con el grupo de death metal y menos lo tiene ahora.

Cuando en 2007 lanzaban su homónimo álbum debut, sorprendían a los oyentes con un sonido contundente, que encajaba en el estilo de metal alternativo, pero con la característica poco común de contar con dos potentes voces femeninas.

Tres años después, el pasado mes de octubre, presentaban su material más reciente, A Road To Depression, manteniendo el concepto con el que iniciaban su discografía pero con algunos cambios importantes. En 2009 abandonaba la formación Emma Gelotte, hermana de Björn.

Para sustituirla, se unió a los de Gotemburgo Jonna Sailon, con una manera de cantar menos agresiva que la de Gelotte, pero aún así de gran potencia. Su voz combinada con la de Tina Karlsdotter crea un sonido que encaja perfectamente con el de las nuevas composiciones, tal vez, aunque esto es cuestión de gustos, mejor de lo que habría hecho la de Emma. Otra novedad a tener en cuenta es la firma de la banda con el sello de Nuclear Blast.

Para aquellos que han escuchado repetidamente su primer trabajo, A Road To Depression puede parecer menos heavy. Efectivamente, el grupo ha abandonado parte de sus influencias metálicas para alcanzar un sonido más rockero, pero sin dejar de poner el énfasis en los riffs cañeros y, sobretodo, en la potencia de las líneas vocales.

El disco se abre con el tema Obvious, un gran comienzo que nos sirve de anticipo de lo que vamos a encontrar a lo largo del CD: alternancia de partes contundentes con otras más melódicas, presencia de guitarras y estribillos efectivos. Le sigue uno de los temas más destacados del trabajo, Generation Disgrace, indiscutible single que ya tiene videoclip. Es un tema que se aleja bastante del metal alternativo y presenta un sonido más hard-rockero y robusto.

El siguiente corte, I Know Who I Am, tiene una estructura similar al primero y es otro de esos que no pueden faltar en un directo. El tema se inicia con una gran potencia que se acentúa en el pre-estribillo, para llegar a un estribillo pegadizo que, aunque está bien logrado, acaba dando la sensación de que se repite excesivas veces.

A continuación escuchamos I’m a Monster, que se inicia lento con unos arpegios limpios de guitarra y una interpretación vocal muy buena. El estribillo rescata el sonido propio de All Ends y nos introduce de lleno en este medio tempo que irá in crescendo. El siguiente tema, Hear Me Now, tiene un carácter similar al corte anterior, aunque menos potente.

En mi opinión, haberlo situado después de I’m A Monster no le hace ningún favor, ya que aunque compositivamente es bueno, en algunos momentos puede parecer que le falta algo. Su duración no es excesiva, algo más de cuatro minutos, pero puede llegar a hacerse demasiado largo. Eso sí, es muy destacable el solo de guitarra, bastante melódico.

Llegamos al ecuador del trabajo con Area 1, un tema rápido, de nuevo muy rockero con gran presencia de las guitarras. Su inconveniente es su corta duración, poco más de dos minutos y medio, ya que es un tema muy bueno que de haber sido alargado habría llamado más la atención de los oyentes.

Le sigue Don’t Be Scared, un tema que comienza lento y que cuenta con una introducción minimalista de más de un minuto. Cuando se inicia el verso escuchamos que el corte incluye algunos elementos sampleados que, aunque ya los hemos oído en tracks anteriores, le dan a este tema un sonido poco propio del grupo. Al llegar al potente estribillo reconocemos el sonido All Ends, aunque estos samples siguen teniendo una gran presencia, tal vez innecesaria, acentuada en el segundo verso.

A continuación llegamos a uno de los grandes momentos del CD: la balada Nobody’s Story. El tema se construye únicamente con un piano y las voces de Karlsdotter y Sailon. Las vocalistas nos demuestran que, si bien su punto fuerte se encuentra en la fuerza de sus voces, también pueden defenderse perfectamente en los temas emotivos.

Contrastando con el tema anterior, un potente riff de guitarra nos anuncia el inicio del siguiente corte, Stupid People, un tema cien por cien All Ends, con sus versos contundentes y su estribillo efectivo, aunque con el mismo ímpetu.

Llegamos ya al penúltimo track del trabajo, Wrecht, con un inicio un poco inquietante y atmosférico. El tema es lento y melódico, y de nuevo los samples están muy presentes, sobretodo hacia el final del corte. Para terminar, Road To Depression cierra el disco. Aunque es la parte que da nombre al todo que es el CD, carece de algún modo de la fuerza característica de la banda, que solo podemos apreciar en el estribillo. Sin embargo, es un buen tema, el más largo del disco, aunque los tres últimos minutos están construidos básicamente a partir de un sencillo punteo de guitarra y algunas intervenciones de las voces, dando una perfecta sensación de cierre.

En definitiva, es un buen trabajo, digno de la banda, y que, aunque presenta variaciones respecto al anterior, mantiene su propuesta inicial. Todavía no han realizado ningún directo ni anunciado ninguna fecha para presentar el nuevo disco, así que habrá que esperar para escuchar cómo suena en vivo el nuevo material.

Marta Coscujuela

Temas:
1. Obvious
2. Generation Disgrace
3. I Know Who I Am
4. I’m a Monster
5. Hear Me Now
6. Area 1
7. Don’t Be Scared
8. Nobody’s Story
9. Stupid People
10. Wrecht
11. Road to Depression