La banda sueca IN FLAMES, precursores del death metal melódico, o más bien del denominado «sonido Göteborg», cumplen ya 32 años de trayectoria musical y hace poco tiempo que vuelven a ser actualidad tras haber anunciado que dentro de poco van a publicar su catorceavo disco de estudio titulado «Foregone», del cual ya nos han adelantado tres sencillos, a saber, «State of Slow Decay», «The Great Deceiver» y » Foregone Pt.1″ y con los que, según parece, pretender volver a la senda más cruda de sus sonido.
A la espera de confirmar si el resto del nuevo material sigue o no ese camino, hemos creído oportuno el momento de rememorar uno de sus discos más emblemáticos aprovechando que, precisamente, cumple ya un cuarto de siglo.
«Whoracle», su tercer disco, se publicó un 18 de noviembre de 1997 cuando IN FLAMES ya llevaba 7 años de trayectoria y hasta entonces se podría decir que aún no contaba con una formación estable.
Es en ese sentido que hay que recordar que fue Jesper Strömblad el que en 1990 con solo 18 años decidió fundar este proyecto. Así, ya en 1993 debutaron con aquel «Lunar Strain» con Jesper (guitarra, batería y teclado), Glenn Ljungström (guitarra), Johan Larsson (bajo) y Mikael Stanne de DARK TRANQUILLITY como vocalista invitado. Al año siguiente vería la luz el EP «Subterranean», esta vez con los invitados Henke Forss como vocalista y los dos bateristas Anders Jivarp de DARK TRANQUILLITY y Daniel Erlandsson (actualmente en ARCH ENEMY).
Con «Jester Race»(1996), segundo larga duración de la banda, apareció lo que podría llamarse la primera formación estable de IN FLAMES, con Jesper Strömblad y Glenn Ljungström a las guitarras, Johan Larsson al bajo y la incorporación de Björn Gelotte a la batería y Anders Fridén a las voces. Quién les iba a decir a estos dos últimos que con el paso de los años serían los únicos que quedarían de esta misma formación.
Un año más tarde se grabaría, con esa misma formación, el flamante «Whoracle» pero tras la grabación se sucederían nuevos cambios y es que, de forma repentina, Glenn Ljungström y Johan Larsson decidieron abandonar y ese fue el momento de dar la bienvenida a Niklas Engelin (guitarra) y Peter Iwers (bajo). No obstante, esa alineación duró poco. Al finalizar la gira en 1998, Engelin partió así que Gelotte finalmente abandonó su puesto en las baquetas para coger la guitarra y su puesto fue ocupado por el nuevo batería Daniel Svensson, dando lugar, ahora si, a la alienación dorada que daría lugar al «Colony» de 1999.
Pero centrémonos en este «Whoracle». ¿Por qué fue tan significativo? Evidentemente lo primero que nos enganchó a todos fue su sonido. A pesar de estar producido nuevamente por Fredrik Nordström, este disco sonaba claramente distinto al de su predecesor «The Jester Race» y, sobretodo, destacaba por sus líneas melódicas tan innovadoras respecto a lo que hacían otras bandas. Una cosa es lo que hacía Anders con su voz gutural y sus registros death (todavía se mantenía en los cánones más clásicos del género y digamos que no había pulido su registro) y otra cosa muy distinta eran los pasajes melódicos «made in Strömblad» que iban impregnando los temas a lo largo y a lo ancho de pentagramas tan adictivos como «Jotun», «Food for the goods», la semi acústica «Gyroscope» o una de mis favoritas, «The Hive».
Un disco (editado incluso en formato cassette), cargado de melancolía, oscuridad y un ambiente denso y oscuro. No en vano, se trata de un trabajo conceptual en el que se describe el pasado, presente e hipotético futuro de un planeta Tierra en el que nuestra sociedad acaba siendo destruida por culpa de un desastre apocalíptico. Observando con detalle la portada se puede entender perfectamente de qué estamos hablando.
Brilla especialmente el gusto de Strömblad por esas instrumentales como es el caso de «Dialogue with the Stars» o «Whoracle». Del mismo modo también llamó la atención la particular versión del tema «Everything Counts» de DEPECHE MODE. Sencillamente un sorprendente regalo para los oídos.
«Whoracle», cuyo título se dice que es un acrónimo de las palabras inglesas «whore» y «oracle», marcó, sin duda, el inicio de otra etapa en el sonido IN FLAMES, aparte de nuevo logo, que vino mejorado por el consagrado «Colony»(1999) y coronado por el grandioso «Clayman»(2000), disco que la propia banda ha llegado a homenajear 20 años más tarde regrabándolo en parte y remasterizando el resto. Lo que está claro es que, pese a quien pese, «Whoracle» representó un momento clave en la carrera de los suecos y en la historia del death melódico en general.
Como apuntaba al principio, han pasado veinticinco años desde que esa extraña medusa presidiera la portada ilustrada por el mítico Andreas Marschall de ese mundo devastado bajo el nombre de «Whoracle» y a punto estamos de dar la bienvenida a la nueva creación de Fridén y Gelotte, esta vez acompañados por Chris Broderick (guitarra desde 2020), Tanner Wayne (batería desde 2018) y Bryce Paul Newman (bajo desde 2017).
Hoy poco queda de aquella formación dorada pero no por ello obviaremos la oportunidad de ver su poderoso directo ahora que parece que vuelven a orientar el timón. No deja de ser curioso, y no se si esto va a ser una pista o no, que en su última visita a España en 2017 vinieran de la mano de FIVE FINGER DEATH PUNCH al Wizink Center de Madrid y al Sant Jordi Club de Barcelona y que ahora, cinco años más tarde, lo hagan acompañados de bandas de metal sueco y a recintos más pequeños.
El próximo mes de noviembre las ciudades afortunadas para ver a IN FLAMES en compañía de AT THE GATES, IMMINENCE y ORBIT CULTURE serán Bilbao (25 de noviembre – Santana 27), Madrid (26 de noviembre – Sala Riviera) y Barcelona (27 de noviembre – Razzmatazz 1). Faltará ver si recuperan o no algún tema de este «Whoracle» que tantos años lleva apartado de sus set-lists.
Marcel·lí Dreamevil
In Flames – Clad In Shadows & Episode 666
(Live Jester Race Tour, 1996)
Guitarras: Jesper Strömblad y Glenn Ljungström
Bajo: Johan Larsson
Batería: Björn Gelotte
Voz: Anders Fridén
In Flames – Jotun.
Guitarras: Jesper Strömblad y Niklas Engelin
Bajo: Peter Iwers
Batería: Björn Gelotte
Voz: Anders Fridén
In Flames – Food For The Gods.
Guitarras: Jesper Strömblad y Niklas Engelin
Bajo: Peter Iwers
Batería: Björn Gelotte
Voz: Anders Fridén
In Flames – Behind Space / Gyroscope.
(Whoracle Tour, Kawasaki, Japan. Feb 21, 1998).
Guitarras: Jesper Strömblad y Niklas Engelin
Bajo: Peter Iwers
Batería: Björn Gelotte
Voz: Anders Fridén
In Flames – Episode 666 live.
Guitarras: Jesper Strömblad y Björn Gelotte
Bajo: Peter Iwers
Batería: Daniel Svensson
Voz: Anders Fridén
