Con una semana de antelación con respecto a la edición del pasado año y justamente
un año después de la que se celebrara en 2005, llegaba un año más la edición
del festival de música alternativa más destacado de la zona centro peninsular…llegaba
el Festimad Sur. Tras un año, el anterior, en el que las circunstancias y los
violentos sucesos del año anterior (con actos de violencia desmedida y mucha
tensión a causa de escandalosos retrasos) condicionaron mucho su celebración,
llevándose a cabo pero reduciendo el número de días a uno y viendose obligados
a celebrarlo en un recinto cerrado como fue la Cubierta de Leganés, este año
y por primera vez en unos cuantos el evento repetía localidad, no así emplazamiento,
ya que en esta ocasión la oferta volvía a ser de las magnitudes que nos tienen
acostumbrados con dos días repletos de buenos y consagrados grupos, lo que conllevaba
la necesidad de un recinto amplio como el Estadio de Butarque, que fue al final
el elegido y acertadamente a nuestro juicio, aunque quizá viniera un poco grande…

Dos días de música, grafittis, performances y un largo etcétera de actos de
todo tipo que como cada año reúnen a miles de personas y vienen a reivindicar
la cultura alternativa como un movimiento destacado dentro del amplio elenco
de culturas urbanas que se dan en nuestra sociedad hoy en día. Como destacados
del primer día encontrábamos a Slayer como cabezas de cartel, unos Slayer que
nos presentarían su reciente «Christ Illusion» y nos darían buenas pistas de
qué es lo que podemos esperar de su descarga el sábado 23 en el Monsters of
Rock zaragozano. Además, las actuaciones de los americanos Devil Driver y la
exquisitez de los ingleses Anathema venían a completar el grosso de las propuestas
musicales para el viernes metalero que se preparaba, completándose con actuaciones
como la de los locales Migraine, Enemy of Myself, Tao Te Kin o La Suite F.

Llegamos al recinto al filo de las 6:45 para recoger las correspondientes
acreditaciones, lo que suponía que nos sería imposible atender a las descargas
de tantas bandas como tocaran antes que Anathema, y es que ya se sabe la vida
del estudiante tiene sus restricciones…una pena. No obstante el ligero retraso
con el que iban las actuaciones hizo que no nos perdiéramos el inicio de Anathema
como nos temíamos, que en principio se programaba para las 18:45 pero que finalmente
dio comienzo en torno a las 7 de la tarde. A esas alturas de la jornada poca
gente todavía en el recinto, muchos en los alrededores que iban entrando poco
a poco a lo largo de la tarde aunque estaba claro que la cosa no adquiriría
unas dimensiones serias hasta entrada ya la noche cuando llegara el turno de
los americanos Slayer. Benditas nubes que tapaban el sol y hacían así más agradable
la estancia en la zona de conciertos, perfectamente habilitada en un emplazamiento
muy apto para este tipo de celebraciones, bien organizado y con algunos detalles
pioneros más que interesantes que al final comentaremos.

Poca gente como decíamos para atender al inicio de la actuación de la banda
a la que confieso venía a ver primordialmente. Anathema volvían a España después
de dos años de ausencia y sin mucha novedad en el frente como después pudimos
comprobar. Poco público como decimos pero fiel, más pendiente de disfrutar de
cada movimiento, nota y paso de los hermanos Cavanagh que de desmelenarse y
entregarse por completo.

Sobre las 19:00 horas, algo después, se retiraban los técnicos para dejar el
paso libre a la banda, que como viene siendo habitual abrió la tarde con «Fragile
Dreams». Sobre el gran escenario que la organización había preparado para el
evento poca parafernalia. Ni siquiera un telón con la portada del que aún es
su último disco, «A Natural Disaster» del 2003 (a la espera de que salga «Everything»,
lo nuevo). Sobriedad absoluta y relativa frialdad, mucha concentración la que
siempre muestran Anathema en sus directos que exceptuando ocasiones especiales
de acústicos o conciertos especiales con orquestación, suelen ser muy similares,
producto de la gran cantidad de temas «intocables» que poseen (muchos de ellos
pertenecientes a «Alternative 4»). De manera que continuarían con «Closer»,
tema ya consagrado de su último disco para el que el bueno de Vincent tiró de
teclado y distorsión vocal para deleitarnos con un temazo solo para disfrutar.
Como apunte decir que no me gustó el hecho de que dicho teclado estuviese orientado
hacia la derecha, de manera que de cara a los espectadores Vincent quedaba de
lado. Cosas de escenario…

Hay que decir que durante «Fragile Dreams» y aún hasta «Closer» la banda andaba
un poco preocupada por ciertos problemas de sonido que al parecer estaban causándoles
algunos problemas. Gestos raros e incomodo se reflejaban en las caras contrariadas
de unos Anathema que por suerte no vieron prolongada su mala suerte por mucho
más tiempo, puesto que las cosas irían mejorando poco a poco a medida que se
sucedían los temas.

El concierto entraría después en una fase algo más fría con «Deep», tras la
cual los ingleses nos presentarían un tema del que como decíamos será su nuevo
disco del que se sabe que se llamará «Everything». Buen tema alejado un tanto
del estilo de «A Natural Disaster» y con una parte final en ascenso bastante
buena. El peso de la actuación siempre recayendo sobre Vincent y Daniel, este
último menos activo pero con la capacidad de meterse al público en el bolsillo
intacta. Un tanto al margen Jamie al bajo y John a las cajas, eso si con una
calidad incuestionable.

El concierto volvería a «Alternative 4» con «Empty», uno de sus himnos que
más hizo disfrutar al público haciéndoles siempre partícipes de sus partes coreables.
Tras esta y un breve descanso sin más tiempo que perder, puesto que dispondrían
de una hora de actuación al igual que en el Gods of Metal algunos días antes,
nos presentaban «One Last Goodbye», otra de las que nunca pueden faltar en su
directo. Presentándonos el tema como una canción de esperanza llegaría una de
las clásicas de «Eternity» y de su discografía como es «Hope», que propagó las
sonrisas entre los presentes.

El momento más especial de la actuación fue probablemente cuando nos presentaban
sobre el escenario a Lee Douglas, hermana del batería John quien saldría a cantar
la preciosa «A Natural Disaster», contenida en el homónimo disco. Una auténtica
delicia para nuestros oídos escuchar tan sublime tema cantado por la soberana
voz que Lee posee. Lo que no sabemos es si tras la gira volverán a contar con
ella para futuros lanzamientos. Por el bien de los fans de la banda que así
sea…Para poner los pelos de punta a cualquiera. La cosa iba llegando a su fín,
y tras esta llegaba el ya clásico medley entre «Judgement» y «Panic» que tanto
gusta, sobre todo en el momento del enlace y cuando «Panic» adquiere esa velocidad
que hace que el cuello se te vaya solo. «Flying» fue otra de las que triunfaron
y con ella se vislumbraba el final antes de lo que a muchos nos hubiese gustado.

Tras anunciarnos Vincent con un español casi perfecto «No tenemos más tiempo»,
el concierto llegaba a su fin con el «Comfortable Numb» con el que vienen cerrando
sus conciertos últimamente siempre que tienen restricciones horarias , con la
que ponían punto y final a un sobrio concierto dotado de la magia y clase con
la que acostumbra a rebosar en sus descargas. Poco tiempo y un sonido algo deficiente
no empañaron en gran medida una buena actuación de los de Liverpool a los que
ya esperamos con set list renovado
(temas como «Angelica», «Sleepless», «Lost Control» o «A Dying Wish» siempre
son de agradecer…) y temas nuevos por nuestras tierras en un corto periodo de
tiempo.

Setlist Anathema:
Fragile Dreams
Closer
Deep
Nuevo Tema
Empty
One Last Goodbye
Hope
A Natural Disaster
Judgement/Panic
Flying
Comfortably Numb

Tras unos minutos de descanso y de debate musical con algunos compañeros que
por allí se hallaban, nos acercábamos de nuevo al escenario del Festimad para
contemplar la actuación de otro de los importantes del día: DevilDriver, con
su única fecha en España. En esta ocasión si colgaron telón con la portada de
en este caso «The Last Kind Words», último trabajo de la banda del que por cierto
podéis leer una extensa crítica en esta misma web. Bastante más gente había
ya en el Estadio de Butarque que en la anterior descarga, y es que el hecho
de que fuese viernes y de que la mayoría adquiriese su entrada para ver a los
cabezas de cartel se notaba mucho. No obstante ya para mediados y finales de
su actuación el estadio presentaba su mayor afluencia en todo el día.

Con el tema de la ambientación más logrado, artificialmente (telón) y naturalmente
(la noche caía poco a poco sobre Leganés), DevilDriver salían a escena como
una apisonadora para estamparnos su «End of the Line» en las narices. IMPRESIONANTE
la fuerza y la mala leche que estos chicos irradian en directo, como ya unos
cuantos (no muchos) pudieron comprobar en la pasada edición del Lorca Rock Festival.
Sonido 100% americano, pintas divididas entre alternativas y thrashers para
una banda liderada por el gran Dex Fafara, que realmente como frontman no tiene
precio. No paró un solo instante de moverse de un lado a otro del escenario,
incitar a dar saltos, a formar mosh-pits…Merece la pena verle. El resto igualmente
entregados a la causa intercambiando posiciones continuamente, posando unos
con otros e imprimiéndole una caña desmesurada a los temas. Cualquiera que les
haya escuchado en estudio antes sabrá que en directo se muestran más fieros
aún si cabe que en el estudio.

DevilDriver gozaron de un sonido un poco mejor que Anathema pero que hizo levantar
algunas quejas no obstante, más cuando en medio de «Clouds Over California»
el micrófono de Fafara dijo «hasta aquí hemos llegado» y dejó de sonar, para
cabreo monumental del respetable. Suerte que no había ningún coche cerca…Finalmente
el sonido se reestableció y la banda tuvo ocasión de cerrar el concierto como
la ocasión merecía.

De los temas poco que decir, un repertorio que en mayor o menos medida no sorprendió
a muchos, del que se interpretaron tan solo dos temas del «The Last Kind Words»
que se supone que venían a presentarnos, como fueron «Not All Who Wander Are
Lost» y la ya mencionada «Clouds Over California». Temas que provocaron en la
gente el mismo efecto que con los demás: golpes, saltos, headbanging y locura
sin control. Y es que así se resumen los conciertos de DevilDriver, sin distinciones
en cuanto a temas, puesto que todos están curados con la misma medicina.

A destacar también el momento en el que Fafara nos indicó que nos dividiésemos
en dos (como Moisés cuando abrió las aguas del mar Rojo xD) y nos estampásemos
unos con otros al comienzo del siguiente tema, que no fue otro que «Before the
Hangman’s Noose», tema que ponía fin a su descarga. Al final la cosa salió más
mal que bien pero bueno, terminó por formarse el pogo que caracterizó a todos
y cada uno de los temas del concierto.

A buen seguro que DevilDriver salieron de Leganés más contentos que de su última
visita a España, donde apenas poco más de 100 personas se congregaron en su
escenario de Lorca para verles. Gran concierto donde el sonido mejoró notablemente
a un gran volumen e imprimiendo a la música un plus de agresividad y potencia.
Volverán.

Setlist DevilDriver:
Intro
End Of The Line
Nothing’s Wrong
Cry For Me Sky
Ripped Appart
Swinging The Dead
Not All Who Wander Are Lost
Grin Fucked
Hold Back The Day
Before The Hangmans’s Noose

 

Texto y fotos: Raúl del Amo

ENLACES RELACIONADOS:

DevilDriver:
The Last Kind Words // Roadrunner Records (Background Noise)