Realmente incómoda la distribución horaria de los grupos y casi mareante el
trabajo de tener que ir cuadrando las horas para ver un trozo de un grupo y
un trozo de otro. Esto es lo que estaba pasando en ese momento de la tarde,
instantes antes de que salieran a escena uno de los veteranos del cartel, los
canadienses Anvil.
A las 20:30 acabó de tocar Chris Caffery y después de tener el placer de poder
intercambiar con él algunas palabras y hacernos alguna foto, pudimos volver
corriendo al escenario principal para disfrutar de Ill Niño para, a las 21h,
volver de nuevo al escenario Beta para ver algo de Anvil para luego correr para
llegar a las primeras filas de Whitesnake. Sinceramente, no creo que éste sea
el mejor sistema para organizar un festival ya que te obliga a elegir entre
las bandas y, pese a quien pese, alguien sale perdiendo.

 

A las 21h saltaban a escena, como decía, los canadienses más burros y tachueleros
de la escena metálica de los ochenta. Cabe señalar que Anvil inició su andadura
en 1981 con «Hard’n’ heavy» al que le siguió «Metal on Metal» (1982) y un largo
etcétera hasta completar 16 lanzamientos. Su carrera dio cierto parón en los
inicios de los años 90 pero volvió a reemprender el vuelo en 1996 y así hasta
nuestros días.
El atractivo de ver a Anvil reside en el hecho de que durante toda su trayectoria
han sido considerados como uno de los impulsores del speed metal candiense y
también porque a lo largo de todo este tiempo se han mantenido fieles a su sonido
ignorando las modas y el aspecto comercial convirtiéndose así en una banda de
culto.
No obstante, y a pesar de su larga trayectoria, Anvil nunca han sido excesivamente
conocidos en nuestras tierras y creo que eso se dejó ver en Lorca Rock. Si a
eso le añadimos lo mal colocados que estaban en el cartel (media hora antes
de que finalizara su concierto ya darían comienzo los Whitesnake), pues no se
podía augurar triunfo alguno.
Personalmente sentía cierta curiosidad por ver en directo a los de Ontario a
pesar de que no esperaba sorpresas ya que en 1988, en la portada de su «Pound
for pound» (1988), la banda anunciaba en la portada que volvía a su sonido original,
motivo por el cual podemos intuir que ya en aquellos momentos la banda empezaba
a tirar de su «pasado» para sobrevivir.
Lamento decir que de todas la bandas que pude ver en el Lorca Rock 2006 los
Anvil fueron mi gran decepción. En primer lugar por el pésimo sonido que tuvieron
(aunque eso fue común en la mayoría de conciertos del escenario Beta) y, en
segundo lugar, por la pobre imagen que conserva la banda. Un servidor aún mantenía
en mente alguna de sus fotografías con la estética metalera de antaño y ver
a una leyenda como Lips, presentándose ante la audiencia en bermudas y sin ningún
tipo de elemento escénico que destacara la importancia de la banda pues me dejó
algo frío.
Anvil no puede presumir de ser una banda excesivamente conocida por las nuevas
generaciones y presentar un set-list acompañado de un sonido que dificultaba
poder diferenciar un tema de otro no ayuda a atraer nuevos fans. Su set list,
evidentemente clásico, se centró, fundamentalmente, en sus 3 primeros trabajos,
a saber, «Hard’ n’ heavy» (1981), «Metal on metal» (1982), «Forged in fire»
(1983), aderezados de algunos cortes de su «Pound for Pound» (1988) y algunos
toques de su época más contemporánea como «Green Weed», que estará incluido
en su próximo lanzamiento. Por eso, pudimos comprobar que Anvil son otra de
las muchas bandas que tratan de exprimir al máximo su pasado musical centrándose
en sus primeros años de trabajo pero sin mayor pretensión que esa.

Tal y como era de suponer, en el momento Whitesnake el público desapareció casi
por completo quedando poco más de un centenar de personas, es decir, los auténticos
incondicionales.
Anvil lleva un cuarto de siglo en activo pero nunca ha dejado de ser una banda
de culto, incluso en su época de mayor éxito. Por consiguiente, no resulta difícil
imaginar que el protagonismo que pudo cobrar en este Lorca 2006 fue más bien
escaso.

Texto : Marcel·lí Dreamevil
Fotos: Angi Reyes