Era mediodía y tras obtener las pulseras, acampar en un recinto que nos cobijaba del sol y refrescarnos un rato… (algo que era esencial para soportar las temperaturas superiores a 40 grados) nos dirigimos al recinto para disfrutar del primer día de festival con unas ganas tremendas de saborear un cartel de lujo que nada tenía que envidiar a otros festivales internacionales de mucho más renombre. Fuimos 4.000 asistentes dispuestos a ignorar el calor de la tierra murciana con tal de disfrutar de dos intensos días que para muchos de nosotros serán inolvidables.
Comenzaron abriendo los ingleses Akercocke, que empezaron con media hora de retraso. Opino que el horario no les hizo justicia y es que una banda de death metal progresivo a las 5 de la tarde y bajo pleno solazo no ayuda a ponerse en situación. El fuerte contraste entre la sobria estética que define la personalidad de la banda con la agresividad transmitida por Jason Mendoça en directo ayudó bastante a caldear los ánimos entre los pocos valientes que se atrevían a someterse a las duras condiciones climáticas.
No obstante se trata de una banda que no parecía tener muchos adeptos entre el público, puede que porque la mayoría iba más orientada hacia otros estilos, pero eso no quitó que bastantes disfrutaran de una música que destaca por la combinación de elementos ambientales producidos por la utilización de samplers y sintetizadores con el más brutal y desgarrador death metal técnico. Un concierto que dejó muy buen sabor de boca y sirvió como una perfecta carta de presentación para una banda que pese a ser a su larga y reconocida trayectoria musical no goza de mucha popularidad entre el gran público.
Y aunque debieron ser Evile (como ya se ha dicho no pudieron porque el cantante sufrió de infección de garganta), les sucedieron los bien reconocidos Angelus Apatrida, los cuales mantuvieron altos los ánimos sin ningún problema dando caña durante todo el concierto, pese a que su primera intención era ser parte del público como fue expresado por “el Polako”. Tal hecho de tocar con urgencia fue reflejado en que el bajista José Izquierdo tuvo que aparecer en el escenario con un pie vendado, lo que no fue óbice para que desplegasen una agresividad que nada tiene que envidiar a bandas de gran calibre.
Una cosa a destacar del grupo es la actitud que tienen sobre el escenario, mala uva propia del thrash e incitando a que se hicieran circle pits al ritmo de sus temas. El público se mostró muy receptivo ante una banda que les resultaba bastante familiar, algo que se notó a la hora de corear los temas más emblématicos, como “Give ‘Em war” con wall of death incluído, “Never forget”, “Fuck you” o “Versus the world”. Además tuvimos la suerte de escuchar un nuevo tema de su futuro tercer disco. El tema en cuestión, “Of men and tyrants” queabrió el apetito de los fans ante lo nuevo que Angelus va a editar. Cerraron con el mítico “Thrash Attack”.
Los siguientes fueron Pestilence. Uno de los grandes esperados del festival. Aquí el público creció rápidamente, por una parte gracias a un calor menos atroz y por otra y más motivada: las ganas de ver a uno de los grandes del death metal progresivo. Este grupo se caracteriza por tener entre sus filas a una de las joyas del metal, su bajista Tony Choy (ni más ni menos bajista también en Atheist y Cynic, con eso queda todo dicho) el cual nos dejó con la boca abierta tanto por una perfecta y contundente ejecución de los temas como en un solo que se marcó. Pocas veces he visto tanta técnica y feeling a la hora de tocar un bajo.
Su set list fue bastante variado, desde temas de su reciente disco Resurrection Macabre, como temas míticos que provocaron headbanging sin lugar a concesiones. Algunos temas fueron “Devouring Frenzy”, ”Chemotherapy”, “Process of suffocation”, “Horror Detox”, ”Hate Suicide”, “Chronic infection”, “Lost souls”, “Land of tears”, cerrando con “Out of the body”.
Es momento de reseñar que entre actuación y actuación pudimos disfrutar de la presencia de algunos grupos en una zona habilitada como meet and greet para que pudieran firmar a todo aquel que quisiera. Hubo algunos de los que estaban programados (como Meshuggah), que al final no firmaron, pero los que sí lo hicieron fueron Akercocke y Pestilence. Sobre todo con los segundos se formó bastante más cola, como era de esperar.
Llegó el momento de ver a los americanos Biohazard, que eran los más “raros del cartel” frente al resto de estilos. Aún así fue uno de los grupos más animados del festival, incitando a la masa (que aumentó considerablemente respecto al anterior concierto) a realizar circle pits y saltos, muy requeridos por este estilo. El público no olvidó que en este año Biohazard cumple 20 y por unos momentos las tornas se cambiaron y fueron los artistas los que ejercieron de público al escuchar a sus fans entonar un sonoro cumpleaños feliz.
Por desgracia el sonido no se portó nada bien con ellos, e incluso hubo problemas con un micro, pero una de las bandas más veteranas del hardcore no se rinde con tan poco y consiguieron salir adelante sin problemas. Algunos de los temas que cayeron fueron “Urban discipline”, “Down for life”, “Tales from the hard side”, “Loss” y “Shades of grey”.
Meshuggah dejaron un sabor agridulce entre todos los espectadores. Tras casi 20 años sin tocar en España la expectación por verlos era enorme. Es un grupo complejo y su autodenominado “math metal” puede causarte uno de los dos siguientes estados, o dejarte indiferente o volverte loco. Yo soy de las segundas y de hecho todos los allí congregados estábamos ansiosos por verlos y tras media hora de retraso, aparecieron.
El sonido en los primeros temas fue bastante caótico, todas las bandas necesitan un buen sonido, pero en especial la música de Meshuggah requiere absoluta claridad porque su música, ya de por sí disonante pero con una gran complejidad de matices, no puede perderse en batiburrillos de guitarra, como así sucedió en los primeros temas. Por suerte el sonido mejoró a lo largo del concierto.
En el concierto descubrí que todo el grupo, sobre todo Jens Kidman, es la frialdad personificada. Por una parte pega bastante con la música ultra-técnica que practican y personalmente creo que esa personalidad tan nórdica da mucha presencia en el escenario, por otra produce una desconexión con el público bastante desalentadora, que parece que incitaban a evitar cualquier movimiento de head banging que acompañara la música. Algunos de los temas fueron “Bleed”, “Rational Gaze” o “Combustion”.
Como he dicho, el concierto comenzó con 20 minutos de retraso y acabó 10 minutos antes de lo previsto, transcurrió como era de esperar, pero tras unos cuantos temas, el batería Tomas Haake hizo un gesto brusco indicando el fin del concierto, repartió algunas baquetas y el grupo tras agradecer la asistencia del público abandonó dejándonos a algunos a cuadros. Supongo que ése fue el motivo de dejarse algunos de los temas más famosos sin tocar, como “New millenium cyanide Christ”. Digamos que un concierto que estaba yendo perfecto se quedó a medias sin alcanzar el clímax con los temas clave.
A raíz de esto surgió la indignación de unos cuantos que habían ido expresamente por ver al grupo sueco. Otros en cambio sintieron que el concierto se les había hecho corto, pero nada más lejos de la realidad, se suprimió media hora de concierto por la gorra. Ahora Lorca Rock ha hecho un comunicado explicando los motivos e indicando que el batería tenía problemas físicos importantes.
Para cerrar la noche Dark Funeral hicieron acto de presencia, aunque el número de público disminuyó bastante, era tarde y ya estábamos todos hechos polvo, además el retraso continuo de todas las bandas debido a las pruebas de sonido produjo que Dark Funeral tocara muy muy tarde. Emperor Magus Caligula hizo su famoso número de escupir fuego por la boca, pero personalmente consideré el concierto bastante flojo y carente de energía. Soy de las que piensan que Dark Funeral llevan unos años de capa caída y eso no sólo se ha hecho patente en su reciente escasa actividad creativa, sino sobre el escenario.
Como opinión personal he visto a grupos de black metal con bastante más garra que Dark Funeral, aunque por otra parte siempre he reconocido que es un grupo que consigue crear unas atmósferas muy densas y oscuras.
Algunos de los temas que cayeron fueron “The Arrival of Satan’s Empire”, “An apprentice of Satan”, “666 Voices Inside”, “Atrum Regina”, “The Secrets of the Black Arts” , o “Thus I have
spoken”, “Goddes of Sodomy”.
Y tras escuchar a uno de los más viejos del black metal hago balance sobre el día de hoy y he de darle buena nota tanto al público como a las bandas. Ha sido un primer día que nos dejó muy satisfechos salvo por pequeños momentos negativos como la desilusión de Meshuggah y algunos problemas técnicos de menor importancia que al día siguiente se harían mucho más significativos.
Una tienda de campaña sobre el suelo de hormigón se convierte en una de las camas más confortables tras un día así. Tras un momento de indecisión sobre si las luces debían permanecer o no encendidas, prevalecieron las ganas de muchos de seguir con la juerga y la luz artificial nos acompañó toda la noche alimentando las fuerzas de los que querían seguir y dificultando el descanso de los que queríamos reponer fuerzas, pero al fin y al cabo el sueño nos venció y todos contentos, esperando a lo que nos deparaba el día siguiente.
Texto:Esther Villardón
Fotos:M.Ángel Santana
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