El teclista de Marillion se lanza en la edición de un disco en solitario asumiendo el mando. Ya queda atrás, su incursión fuera de su banda principal, en el disco de DeeExpus hace ocho años, en la que se hacía cargo de los teclados, si bien hablamos de una banda donde el peso compositivo no recaía en él, más bien participó como músico y poco más.

Toni Marchante

En este disco Mark se ha encargado de las composiciones musicales, mientras que las letras han corrido a cargo de Guy Vickers. Los músicos que le han acompañado en esta aventura han sido Oliver Smith a la voz, Pete Wood y John Cordy a las guitarras, Henry Rogers (DeeExpus, Touchstone y Edison’s Children) a la batería y Conal Kelly (sobrino de Mark) quien se ha encargado del bajo. También ha contado con su compañero en Marillion, Steve Rothery, para el tema “Puppets”.

No es de extrañar que la estructura del disco, con canciones que suponen partes que se agrupan en un único título, se asemeje a patrones muy usuales en Marillion y en concreto al de su último álbum de estudio. Pero podemos afirmar que el contenido tiene matices más pop que su banda matriz, aunque no podemos negar que hay momentos en los que el parecido es evidente. La música se desarrolla en escenarios agradables, con momentos lentos, otros más pop, algún insert instrumental, pero siempre de forma muy melódica. La temática del disco se basa en un concepto central basado en el vuelo, los viajes espaciales y la exploración utilizándola como una alegoría del colapso de la comunicación humana.

El primer tema “Amelia” nos cuenta la historia de la piloto Amelia Earhart y se divide en tres partes, consta de una introducción “Shoreline” que da lugar a “Whistling at the sea” una parte de tintes pop que conserva alguna aura de Marillion y donde en lo musical evidentemente el protagonismo lo tienen la voz y los teclados. La tercera parte “13 bones”, es quizás la más comercial con un estribillo más que reconocible y en la línea de pop prog británico reconocible que nos puede recordar a bandas como Kino. La voz de Oliver Smith tiene un perfil muy neoprogresivo, a veces cercana a la de Ray Wilson. “When I Fell” es un tema pausado, tranquilo, con buenas voces, no excesivamente comercial ya que para eso está “This time” el corte que ha supuesto la carta de presentación de este proyecto, un tema básicamente pop.

“Puppets” es otro tema lento pero cargado de melodías, toda una delicia que además se ve completada por la guitarra de Steve Rothery. A partir de aquí viene la suite “Twenty Fifty One”, donde se nos relata una historia de ciencia ficción sobre el colapso tecnológico en el espacio y se subdivide en cuatro partes. Las partes se van desarrollando en una exploración tanto letrística como musical. La suite comienza con “Search” una intro de teclados de connotaciones espaciales para desembocar en “Arribal” donde la voz de Oliver es la protagonista dentro de una cobertura musical notable. En “Trial of tears” lo instrumental adquiere mayor protagonismo para finalizar con “Brief History” otra de las piezas más accesibles del disco con buenas capas de teclado, buenos solos de guitarra y la voz de Oliver que redondea el corte dejándonos un buen final.

Este trabajo lo componen un conjunto de canciones donde cada canción tiene una intensidad diferente, por lo que necesita de varias escuchas para encontrarle el máximo atractivo. Hablamos de un disco que puede ser engañoso, en el sentido de que puede dar la impresión de que discurre por momentos más transeúntes pero que tras escucharlo varias veces resulta ser encantador. Este álbum tiene muchos buenos momentos, y en general, gustará tanto a los fans de Marillion como a los aficionados al progresivo más cercano al pop.

Toni Marchante

Temas:

1. Amelia

i) Shoreline
ii) Whistling at the Sea
iii) 13 Bones
2. When I Fell
3. This Time
4. Puppets
5. Twenty Fifty One:
i) Search
ii) Arrival
iii) Trail of Tears
iv) Brief History

Página web: https://marathonsounds.com