El lunes 2 de abril por la madrileña sala Cats, pasaba la gira de Rhapsody of Fire, acompañados de otros dos grupos de su país, los jovencísimos From the Depth, y los progresivos Odd Dimension. Por desgracia la afluencia de público no fue muy numerosa, unas trescientas personas, debido a que no era una buena fecha, a la acumulación de concierto todos los meses y por el precio de la entrada, 28 euros por concierto es caro, y más teniendo en cuenta que el público que mueve esta banda es mayoritariamente muy joven.
Texto y Fotos: Alfonso Dávila

Sobre las 20:00 se abrían las puertas, y apenas quince minutos después ya estaban descargando el primer grupo de la noche, From the Depth. Son un jovencísimo grupo italiano, que hacen power metal de corte europeo. Su actuación fue bien recibida por la gente, entre los que había algún fan. Tocaron seis temas de su primer disco, “Back to Life”. Personalmente no es que me gustaran demasiado, especialmente en lo que se refiere a movilidad sobre el escenario, debido a que permanecieron muy estáticos.

Tras el cambio de equipo, les llegó el turno al otro grupo invitado de la gira, Odd Dimension. Es otro grupo italiano, en este caso practican metal progresivo. Aunque técnicamente eran muy buenos, aburrieron un poco al personal, el público en su mayoría muy joven cuyo gusto musical no sale de los grupos que hablan de dragones y espadas, hasta había uno vestido con una cota de malla. Apenas tocaron treinta minutos, en los que solamente interpretaron cuatro canciones de su disco “Symmetrical”. Es de destacar la calidad vocal de Manuel Candiatto, que alcanza unos agudos muy buenos.

Como veis, no pongo el nombre de los temas de los dos grupos invitados, debido a que no llevaban setlist y después del concierto no me lo quisieron dar. Un fallo muy gordo, debido a que por aquí no son conocidos.

A las 22:00 exactas, salían a escena Rhapsody of Fire. Abrieron su actuación con la intro “Dark Mystic Vision”, para proseguir con “Ad Infinitum” y “From the Chaos to Eternity”, ambos temas pertenecientes al disco que están presentando en esta gira, “From the Chaos to Eternity”. Lo primero que me sorprendió, fue lo bien que se han acoplado los nuevos miembros al grupo. Fabio Lione, hablando en castellano durante todo el concierto, nos da la bienvenida y nos presenta la siguiente canción, “Triumph of Agony”.

Tras “I Belong the Stars”, comenzó a sonar la intro “The Dark Secret”, para inmediatamente tocar “Unholy Warcry”. Momento de locura entre el público, que no paró de saltar y de cantarla. Continuaron con otro de sus clásicos, en este caso perteneciente a su disco “Legendary Tales”, interpretando “Land of Immortals”, y no dejando ni un momento de descanso. Vuelta al nuevo disco con “Aeons of Raging Raining”. Una nueva intro, “Dark Reing of Fire”, daba paso al solo de batería de Alex Holzwarth, que dio un ligero respiro tanto al grupo como al público.

Otro clásico volvió a poner aquello patas arriba. “The March of the Swordmaster”, nos mostró, a demás de los buenos músicos que son, lo bien que se lo estaban pasando sobre las tablas, especialmente Roberto de Micheli, que no paró de sonreír ni un solo momento. Si hasta ahora el concierto había estado animado, en “Dawn of Victory sin duda fue el momento álgido del concierto, con un Fabio Lione cantando fenomenal, con Alex Starapoli alucinando con el público, y el resto del grupo no parando de moverse y de sonreírse los unos a los otros.

El final épico de la canción, dio paso al solo de bajo de Oliver Holzwarth, en el que demostró lo buen músico que es, interpretando “Tocata y Fuga en Re menor” de Bach. Vuelven a salir al escenario, y arrancan con “The Village of Dwarves”. Tras ella, presentaron la siguiente canción, que según comentó Fabio, en esta gira era la primera vez que la tocaban en directo, se trataba de “The Magic of the Wizard Drem”. Además durante la presentación del tema, Fabio comentó el enorme honor que había sido para ellos la participación del actor Christopher Lee. Llegaba el turno a la última canción antes de los bises. La elegida fue “Holy Thunderforce”.

Para abrir los bises eligieron “Reing of Terror”, para seguir con “Knightrider of Doom”. El tiempo se les echó encima, y aunque tenían preparadas tres canciones más solamente tuvieron tiempo para interpretar una. El broche final lo puso la siempre celebrada “Emerald Sword”. Punto y final para un gran concierto, que hubiera sido mucho si hubieran tenido un mejor sonido y unas mejores luces.

Es digno de mencionar, que automáticamente después de terminar su actuación, se dirigieron al puesto del merchan a firmar y a hacerse fotos con los fans. Este tipo de detalles son los que hacen a una banda respetable.

Texto y Fotos: Alfonso Dávila