Sin duda Serenity es una de las pocas bandas ha sobrevivido al constante cambio de integrantes, manteniendo aunque sea a su vocalista principal en todos los discos.

La mayoría de las bandas de metal sinfónico del 2000 como están han ido escogiendo diferentes caminos o se han acabado del todo, en este caso el power metal es sin duda un terreno que ha Serenity ha tenido presente desde sus inicios y nunca ha olvidado, un factor que los ha mantenido siempre vigentes de alguna u otra forma.
Este 2020 vuelven recargados, un disco basado en historias antiguas, guerras, victorias y sangre, son lo que nos tienen en esta ocasión.

El disco se inicia con una intro que le da nombre al álbum “The Last Knight”, junto a una épica orquestación de altas proporciones, que nos va adentrando en vida del emperador romano Maximilian I, quien es la inspiración de este álbum. Casi sin darnos cuenta se entrelaza la intro con “Invictus”, el siguiente tema. Una melodía bastante envolvente, acompañada de riffs sobresalientes que van creando un ambiente de victoria y heroísmo. Los coros realizados a lo grande, para corearlos a todo pulmón, una muy buena técnica para enganchar a los oyentes desde el primer segundo. La siguiente canción es “Set The World on Fire”, otra canción a lo grande. La capacidad de Serenity de crear varios soundscapes en la misma canción es súper rescatable y es un puntazo que en canciones relativamente cortas puedan mostrarnos tantos matices diferentes, que también la orquestación ayuda mucho a crear toda la magia detrás cada tema. Esta canción cuenta con la colaboración de Herbie Langhans (Avantasia, Voodoo Circle, Rhapsody), quien le agrega al tema el impulso necesario para ser uno de los imperdibles de este disco. Siguiendo con la misma energía llega “Keeper of the Knights”, otra canción siguiendo la misma fórmula ganadora. Un power metal elegante, por muy rápido que vaya se puede apreciar a la perfección cada arreglo y la potente voz de Georg Neuhauser.

El siguiente tema “Souls and Sins”, es un poco más lento que todo lo que hemos escuchado anteriormente, además uno de mis favoritos del álbum. Una de las cosas que me gusta de Serenity que siempre han mantenido las raíces de la banda y podrás tener un poco del pasado en el presente pero de una forma renovada y fresca, como en este tema. La interpretación de Georg en este tema es sublime, muy emotiva, que sensibilizaría a cualquiera que la escuchase.

“My Kingdom Come”, que me recuerda muchísimo a “Veil of Elysium” de Kamelot, por el alcance del sonido y la melodía del tema, pero pasando por alto este factor, es una de las canciones también a destacar, no por nada ha sido uno de los singles del álbum. Los guturales en este tema le dan un valor agregado a la canción, además del solo de guitarra que le da un rollo oscuro más oscuro. Dentro de la misma temática suena “Queen of Avalon”, riffs con bastante energía, que se van complementando con la melodía y la orquestación, nada que no hallamos oído de estos austriacos anteriormente. Y llega el turno de la infaltable balada rock a cargo de “My Farewell”, un tema típico acompañado de un piano y una leve orquestación, que va incorporando los instrumentos poco a poco, como la batería y hasta un solo de guitarra. Una interpretación conmovedora, pero a mí parecer se pierde por la sobrecarga de elementos con los que han querido jugar. A veces menos es más dicen por ahí. Para romper el hielo llega “Down to Hell” y “Wings of Pride”, temas más agresivos pero conservando los altos y bajos de las melodías, sumadas a los potentes coros que acompañan a la voz.

Ya llegando a la recta final del disco llega “Wings of Pride”, probando a toda costa de lo que están hechos y dejando uno de los mejores temas para el final. Con unos riffs poderosos, que acompañan a una batería a mil por hora y la orquestación dando el color necesario para que este sea uno de los tracks que más recordaremos del disco, quizás si podríamos resumir este disco con una sola canción seria esta, ya que integra todos los elementos que nos han envuelto hasta este momento. Y para despedirnos a lo grande con “Call To Arms”, junto a unos coros de gran magnitud.

Me ha dejado una muy buena sensación el disco en general. Han sabido jugar con los elementos sinfónicos a la perfección como soporte, en ningún momento extrañe la voz femenina como era mi miedo y ha sido un factor extra siempre para darle soporte a las canciones de la banda. Definitivamente la pausa que se tomó Serenity para componer este disco estudiaron mucho el concepto de lo que querían logran y sin duda que les ha resultado muy bien.

Karina Báez

Temas:

1 The Last Knight
2 Invictus
3 Set The World On Fire
4 Keeper of The Knights
5 Souls and Sins
6 My Kingdom Comes
7 Queen of Avalon
8 My Farewell
9 Down To Hell
10 Wings of Pride
11 Call To Arms