Vuelven Bloodbound. Los suecos que protagonizaran uno de los mejores debuts que pidiésemos presenciar en 2005 regresan a la escena musical después de haberse tomado un holgado periodo de tres años y con muchas novedades bajo el brazo. Veamos como afrontan esta nueva etapa que se les avecina que viene respaldada una vez más por el sello alemán Metal Heaven. “Book of the Dead”, que así se llama su segundo disco de estudio, ya se encuentra en nuestras tiendas de discos habituales.

En primer lugar, y a modo de recapitulación de sucesos, decir que de de la formación que conquistara a la crítica con “Nosferatu”, tan solo quedan los miembros fundadores de la banda, es decir, Tomas Olsson y Fredrik Bergh (ambos ex Street Talk). En sustitución del gran vocalista Urban Breed (Tad Marose), la banda seleccionó en primer término a Kristian Andrén, quien tan solo durara en Bloodbound unos conciertos antes de ser sustituido finalmente por Michael Bormann (ex Jaded Heart, Bonfire, J.R. Blackmore, Rain), quien ya si grabó las voces en “Book of the Dead”. El reemplazo para Markus Albertson a la guitarra rítmica lo tenían en casa, puesto que el escogido para tales labores fue Henrik Olsson, hermano pequeño de Tomas. Finalmente, el batería Jörgen Andersson fue reemplazado el pasado año por Pelle Akerlind, también en Morgana Lefay.

Reestructurada así la formación de la banda tras el éxodo del pasado año, los de Tomas y Fredrik ya estaban listos para emprender su segunda aventura discográfica y afrontar el reto no solo ya de superar su primer disco, algo siempre complicadísimo, sino también de probar a la nueva formación y superar el reto que supone grabar con gente nueva y ver, como si estuvieran empezando, la aceptación que estos tendrán de cara al público que ya tenían ganado, con reemplazos tan importantes como el de puesto de vocalista, siempre uno de los más notorios.

Los nuevos temas suenan más potentes si cabe que los de “Nosferatu”. La producción supera un puntito a la del anterior y eso les hace adquirir un plus en fiereza, rapidez y agresividad, que sumado a otros factores que ahora analizaremos hace que el conjunto suene quizá algo menos melódico que lo anterior con Urban a las voces y cía.

No obstante, ambos trabajos concuerdan en muchos puntos, ya que lo realmente esencial de la marca que Bloodbound generó con “Nosferatu” permanece presente. Heavy metal / power con alternancia de temas con bases más rápidas, otras más contundentes y con mayor fuerza en la pegada, temas más pausados, incluso alguna balada es lo que nos proponen Bloodbound. Todo ello con elementos típicamente heavies e influenciados también en gran medida por gente como Hammerfall, Gamaray, Helloween u otros, refiriéndonos a coros, sing-alongs creados para el directo, estribillos sencillos y muy pegadizos etc.

Sobre el cambio de vocalista decir que ambos son muy distintos. Si Urban Breed poseía un registro muy melódico y versátil, capaz de grandes agudos, Michael Bormann posee otras cualidades, tales como la mayor crudeza y agresividad de su tono, más cercano al hard rock / heavy (no en vano sus anteriores bandas lo eran), siendo Urban más afín con los temas más puramente power metaleros. En cualquier caso es cuestión de gustos, servidor se queda con la gran voz del ex Ted Marose, pero valora en gran medida la nueva dimensión que adquieren los temas con Michael a las voces, quien también es un excelente vocalista que por cierto gana en los directos.

Rescatamos algún tema en particular como por ejemplo “The Tempter”, con unas guitarras muy heavies y unas atmósferas muy happies, el que da nombre al disco “The Bood of the Dead” o “Bless the Unholy”, un corte típicamente Hammerfall con un estribillo que nos recuerda mucho a temas como “Stone Cold”, muy apto para el directo. “Into Eternity” es una de mis preferidas del disco, una de las más rápidas y con aires casi de himno, muy en la línea de la que viene en décimo lugar, “Turn to Stone”. “Black Heart” es el medio tiempo del disco, una canción con unos aullidos guitarreros tristes y desgarradores que encajan perfectamente con la voz semi rota de Michael, buenísima.

Si te enamoraste de “Nosferatu” o simplemente te pareció un gran disco quizá tengas que pegarle varios repasos a este “Book of the Dead” para coger la onda que la banda sigue con los numerosos cambios en la formación, pero cuando eso suceda, descubriréis un buen disco de heavy / power que lejos de sonar monótono y “remascado” tiene aires de frescura y entretenimiento que harán que no nos cansemos de escucharlo en un tiempo. Bloodbound han demostrado tener calidad y mucha fuerza a la hora de afrontar los infortunios que les han maltratado en el último año y aún así siguen dando muestras de completa entereza. Continuaremos siguiéndoles de cerca.

Raúl del Amo

Temas: 01. Sign of the Devil, 02. The Tempter, 03. Book of the Dead, 04. Bless the Unholy, 05. Lord of Battle, 06. Flames of Purgatory, 07. Into Eternity, 08. Black Heart, 09. Black Shadows, 10. Turn to Stone, 11. Seven Angels.