Outreach + Outgravity – Sábado 1 de junio ’19 – Sala Sound Stage, Madrid

Outreach ya venían levantando mucha expectación con todo lo relacionado con su nuevo y flamante “Ephemeral Existence”, así pues, la tarde noche se antojaba de lo más interesante de cara a comprobar que tal funciona en directo.

Alberto López
Fotos: Mario López

La cita era en la sala Sound Stage, cuyos alrededores estaban atestados de hinchas británicos esperando el comienzo de la final de la Champions League. Por lo menos nos “amenizaron” la espera para entrar, y es que estaría bien que dicha sala cumpliera alguna vez con los horarios anunciados. Antes de Outreach le tocaba el turno a Outgravity, una joven banda venida de Vitoria para presentar también su primer larga duración: “Dwarka”. He de decir que no conocía prácticamente nada de ellos y me sorprendieron muy gratamente.

Comenzaron con “Wolf”, la cual ya me llamó la atención inmediatamente por esos juegos armónicos de guitarra que posee. Mucho mejor además en cuanto Ingrid abrió la boca, demostrando carácter y buena voz. Su estilo quizá lo podríamos describir como Metal Alternativo, pero sería simplificar mucho el asunto, ya que mezclan otra buena cantidad de influencias con gran personalidad. El concierto comenzó sin prácticamente luces en el escenario y así se quedó, dejando patente una pobre iluminación por parte de la sala. Algo que también afectó a Outreach más tarde, que aun contando con algo más de colorido, a veces era difícil distinguir lo que ocurría sobre las tablas.

   

Con “Divine” y “Out Of The Crowd” fue entrando más gente y el ambiente fue caldeándose. Buen trabajo de todos los miembros de la banda, quizá algo tímidos, pero sin duda ejecutando los temas realmente bien. “Sun”, tema que no pertenece a “Dwarka”, terminó de levantar a la gente. Tras él, Ingrid se bajó del escenario para dejar protagonismo a la parte instrumental con “Interludio”.“My Game”, primero y “Sofisticated” después pusieron punto y final a una actuación más que digna. Habrá que estar atentos a los siguientes pasos de Outgravity, futuro y calidad tienen.

Como futuro y calidad poseen Outreach más que de sobra. La banda acaba de publicar “Ephemeral Existence”, el cual venían a presentar esa noche y que tocaron íntegramente. Sin duda es una banda bien armada, con dos guitarristas de indudable calidad como Tony Liz y Rafa Howler, dos voces muy bien combinadas como la de Diva Satánica (guturales) y la de Nines Bathory (voces limpias y rasgadas) y una base rítmica contundente, formada por Reuven al bajo y Axel a la batería.

   

Casi sin espacio sobre el escenario dieron comienzo con “The Faithful Groom”. Enseguida Nines y Diva Satánica se hicieron con el control de concierto y de la sala, combinando sus voces a la perfección mientras el resto mantenía el pulso. Si antes me pareció que Outgravity sonaron un pelín pasados de graves en algún momento, aquí me pareció todo lo contrario, demasiada brillantez en el sonido por momentos y en otros poco claro. Nada achacable a la banda, por otra parte. La Sound Stage da para lo que da, y con la diferencia de alturas del techo, la columna en medio y el equipo justo, a veces el sonido no es el mejor posible.

Todo esto era ajeno al escenario, donde enseguida presentaron al primer invitado de la noche: Daniel C. Pérez, de Ravenblood, quien unió su voz a las dos ya existentes de manera más que satisfactoria en “Not An Animal”. “Ariadna’s Lament”, que combina perfectamente las partes más agresivas de la banda con otras más atmosféricas y melódicas fue la siguiente en caer. Muy bien interpretada por ambas cantantes. Para “Insane Mind”, tema que fue single de adelanto, contaron con la colaboración de Sara Benito, cantante de Hiranya, quienes, por cierto, también han sacado un buen pelotazo este año. La colaboración le puso un punto extra de brutalidad al tema, y desde el escenario lo seguían dando todo pese a que el público se mostraba un tanto frío.

   

“Empty Path”, seguramente mi favorita del disco, buen exponente del Melodeath de corte progresivo que practican, y “Delusion”, más pesada, fueron las siguientes. Aquí noté por momentos a Nines algo justa en la voz cuando, después de los rasgados, tenía que acometer las voces limpias. Nada grave, por otra parte. Anunciaron que se acercaba el final antes de encarar “Pepper’s Ghost”, tema que también cierra de manera brillante “Ephemeral Existence”. Se despidieron brevemente para volver sobre el escenario y encarar el único bis de la noche, el “Chandelier” de Sia, con Rafa Howler tocando entre el público como colofón final a una buena actuación.

Una buena sesión de metal con dos bandas de mucho futuro. Eso sí, una sesión excesivamente corta. Y es que sólo eran pasadas las 10 de la noche cuando todo acabó. Soy consciente de que ambos grupos presentaban su primer disco, y que eso da para lo que da en cuanto a temas a tocar se refiere, pero dos horas escasas entre ambos grupos me dejó con ganas de más. Algo bueno, supongo. Eso sí, me encantaría volver a ambos grupos en un lugar con una iluminación y un sonido en condiciones, que resalte sus virtudes y no las minimice.

   

Alberto López
Fotos: Mario López