Kai Hansen es un tipo que ante cualquier situación ha sabido salir adelante, virar en el momento correcto y tomar decisiones drásticas cuando ha sido necesario. A todos nos sorprendió su salida de Helloween en un momento en que parecía que la banda se iba a comer el mundo. Su gira en los EU como parte del “Headbangers Ball tour” al lado de Anthrax y Exodus , estaban llevando a lugares no imaginados en los inicios de la banda Germana. Sin embargo al término de ésta, Kai decide abandonar la banda, su banda, para dedicarse a sus proyectos. El ámbito musical en el que estaba la mente de Kai ya no congeniaba para nada con los derroteros que quería tomar Helloween, baste checar los álbumes siguientes. Así ante el asombro de toda la comunidad metalera mundial Kai se marcha para fundar: Gamma Ray.

Reclutando a Ralf Scheepers (voz) ; Uwe Wessel (bajo) y Mathias Burchard (batería) , además del propio Kai en la guitarra, queda conformada la primera alineación de Gama Ray en ese mismo 1989. En Febrero de 1990 la banda publica su LP debut : “Heading for Tomorrow”. Otra banda lista para el germen de lo que más tarde sería llamado “Power metal”. Para finales de año publican un EP llamado “Heaven Can Wait”. En 1991 la publicación de su segundo trabajo “Sigh no more” trae consigo los primeros cambios. Sale Mathias y en su lugar se recluta a Uli Kusch y se añade a Dirk Schlachter quien se ocupará de una segunda guitarra. Dos años después la banda publica su tercer disco titulado “Insanity and Genius” pero de nueva cuenta aparecen mas cambios. Sale Uli (quien mas tarde se uniría a Helloween y haría larga carrera) y su lugar es tomado por Thomas Nack y sale también Uwe Wessel siendo su sustituto Jan Rubach. Al término de la gira promocional de este disco sale Ralf quien tenía intención de unirse a Judas Priest y que finalmente paso a formar parte de Primal Fear. Ante esta situación Kai tenía que replantearse el futuro de la banda. Buscar un vocalista era una opción pero hizo la elección que muchos pensarían que sería muy arriesgada pero que a la larga, fue lo mejor que pudo pasar: Kai mismo se ocuparía de las vocales. Y con esta alineación fraguó uno de los discos mas representativos del Power metal: “Land of the free” . Uno de los músicos invitados fue Sascha Paeth en todos los teclados (te suena familiar este nombre con Helloween?)

El disco comienza con “Rebellion in Dreamland” que por cierto es el tema más largo de todo el disco. Es de notarse el trabajo en los teclados de Sascha que vienen a dar un carácter sinfónico al tema. Los coros muestran el sello característico de Kai y su voz recordándonos los primeros tiempos de Helloween. Un tema excelente para abrir el disco. “Man on a mission” es el tema típico del Power metal. Veloz, energético y con una gran melodía en el coro. Va ligada a la cortísima Fairytale que también muestra los elementos del corte anterior. “All of the damned” es un tema de paso medio pero que deja resaltar las habilidades de Jan en el bajo. Es importante recalcar que gran parte del poderío del disco está centrado en el excelente y distintivo trabajo coral a lo largo del disco y en esta pieza obvio no es la excepción. El solo es sumamente explosivo y contiene un fragmento del solo de “Hotel California” de Eagles. La pieza tiene como colofón “Rising of the Damned” con la cual cierran con broche de oro este segmento. El doble bombo de “Gods of Deliverance” anticipa de que va este tema. El bajo de Jan también hace de las suyas justo antes de la estrofa y del solo de guitarra. La parte mas importante viene en el coro que con su enorme poder melódico atrapó en su momento mucho mas audiencia para la banda.

“Farewell” nos muestra un invitado ms en el disco ´como es Hansi Kursch (Blind Guardian) haciendo voces en un tema lento. Su timbre es inconfundible y da un color distinto a la música de la banda, logrando con esta atinada colaboración dar un realce extra al disco. Pero no será el único. El uso de un instrumento de cuerda punteada da también un aire medievalesco al tema. “Salvation´s Calling” es un tema que desde el riff inicial de guitarra te hace anunciar lo que vendrá: adrenalina pura. Excelente manejo de los cambios de tiempo. El trabajo de guitarra y teclado en el centro es sumamente exquisito y da paso a un solo agresivo y preciso. “Land of the Free” es el tema que da título al disco. Sumamente interesante, sobretodo por los cambios de tiempo a lo largo de todo el tema. Además los vocalistas estrella invitados en el tema hacen de este una maravilla del Power metal: Michael Kiske y Hansi Kursch. Pocas veces se reúne tanto talento vocal en un solo tema. Se convirtió en un tema consentido en sus directos. “The Saviour” se presenta como colofón a esta maravilla y al mismo tiempo sirve de unión al siguiente tema “Abyss of the Void” en donde también colabora Hansi con sus coros. El tema tiene una parte central muy al estilo de un Soundtrack pero permite escuchar la versatilidad de la banda. El solo con wah es sumamente agresivo y acorde al tema. En “Time to break free” el vocalista principal es Michael Kiske y si nos ponemos un poco nostálgicos tal vez sea una muestra de cómo hubiera sonado Helloween en ese año del 95. “Afterlife" es otro tema con todas las características del Power metal. Con cambios rítmicos y mucha melodía. Cerrando este magnífico disco tenemos un himno “Heavy Metal Mania” una verdadera declaración de principios. Un tema en la mas pura vena del metal 80s , energía, poder y grandes coros, así como una contundente base rítmica y guitarras sumamente agresivas. Nada mejor para cerrar esta maravilla de disco. En 1995 Kai Hansen marcó nuevas directrices al metal que en los años siguientes serían exploradas por distintas agrupaciones en todo el mundo. El legado de este disco persiste hasta nuestros días y una de las razones es que a 25 años de distancia, sigue sonando tan actual, tan potente y aún tan propositivo.

Francisco Gatica