su música y sus altas temperaturas que ¡han llegado hasta los 45 grados! De todas formas este año Lorca Rock ofrecía un cartel de metal extremo envidiable y a las 4.000 personas que acudimos allí no nos importó ese pequeño sacrificio.
Al llegar por la mañana nos encontramos con la primera sorpresa del día: un cartel sobre las taquillas que anunciaba la cancelación del concierto de Evile por problemas de garganta del cantante y su sustitución por los albaceteños Angelus Apatrida. Fue un fastidio perderse a Evile pero el cambio para muchos no fue negativo en absoluto, ya que Angelus Apatrida es una de las bandas nacionales más respetada y seguida.

El tema de la organización estuvo bastante bien, ya tienen tablas con respecto a otros años… quizá un poco lentos en las taquillas (a los que teníamos pase de prensa nos tocó hacer cola hasta 3 veces para averiguar si tenían ya los nombres y pulseras…) y aunque no se llegó a formar una gran cola, tampoco es normal tener que aguardar una cola de media hora bajo el sol murciano sólo por tener 15 personas delante… hace falta más eficacia.

Un pabellón ejercía de zona de acampada, algo de agradecer porque como ya he dicho, bajo esa bola de fuego acampar habría sido insufrible. Hubo falta de espacio, provocando así colapso en la zona y obligando a tener que sortear las tiendas de campaña cada vez que querías entrar o salir (aquello parecía un expositorio de tiendas Quechua, porque recuerdo que allí las de piquetas no sirven).

Se agradeció la posibilidad de obtener bebidas y hielo constantemente junto a la zona de acampada, aunque esto no exime el hecho de la poca previsión del festival con respecto a las altas temperaturas. La ausencia de sombras y fuentes en la zona de conciertos supuso que el querer ver a los grupos en pleno mediodía fuera una odisea. Sí que es cierto que en un lateral del foso alguien de vez en cuando sacaba una manguera para refrescar a quien quisiera acercarse y que había una sombra junto a la barra, pero no es suficiente.

Otro punto negativo se lo doy a los baños y duchas. Cuatro hilos finos de agua no sirven de ducha, así como el que los baños junto a la zona de acampada tuvieran el agua cortada y quedaran prácticamente inutilizables. Por suerte había otros más decentes en el recinto que predecía a la zona de acampada.

Además tuvimos la suerte de que algunos de los grupos nos firmaran
junto al stand de Guitar Hero, como fue el caso de Ackercocke, Tyr,
Pestilence, Municipal Waste, Voivod, Sepultura y Marduk (que éstos
tuvieron la novedad de tener que firmar una compresa y es que algunos
fans saben cómo conseguir que no se les olvide cuanto admiran a sus ídolos)

En la zona de conciertos pudimos visitar un par de puestos con merchandising oficial, puestos variados y del de Earache (que como era de esperar, tuvo bastante éxito), un stand del Guitar Hero donde los más jóvenes practicaban su habilidad a la guitarra y batería, y algunos puestos de comida con precio “de festival”… aunque no tan abusivos como en otros festivales a los que he acudido, los litros a 6 € y hamburguesas a 4 €.

Tenían una zona habilitada para la prensa con unos árboles que daban sombra y posibilidad de obtener agua que hizo más liviano el golpe de calor, aunque creo que esto no debería ser un lujo de unos pocos sino que todos los asistentes deberían haber tenido eso, sombra y agua.

Había bastante personal de la Cruz Roja pendientes de los presentes y tanto los miembros de seguridad como de organización se portaron bastante bien con nosotros, aunque es necesario señalar un incidente en Arch Enemy. No sé quién tuvo la ingeniosa idea de que ya en el último concierto decidieran echar del foso a todo aquel que no tuviera cámara réflex, exigiendo sólo a profesionales… así que para la próxima vez todos los que tengan pase de prensa si llevan una cámara digital que se preparen para que les echen del foso cuando a alguno le dé la gana.

El sonido de los conciertos fue bastante aceptable, hubo algún problema de directo, como en Obituary, que en 10 minutos se solventó, pero por lo general todo fue bien. Lo malo es que casi todos los grupos empezaban con unos 20-30 minutos de retraso y en el caso de Meshuggah terminaron antes de tiempo, quedando el concierto reducido a la mitad, lo que provocó la indignación de aquellos que fueron al festival especialmente por ellos.

Tras las primeras impresiones emprendo mi viaje a Wacken para traeros lo mejor del festival alemán, así que a la vuelta os ofreceremos las crónicas detalladas de todos los grupos de este Lorca Rock y de la nueva edición del W.O.A. ¡Estad atentos!

Texto:Esther Villardón
Fotos:M.Ángel Santana