Grabado bajo ese período para el olvido como fue el confinamiento, Mägo de Oz , nos presentan su álbum en estudio número 14, si contamos el Finisterra Opera Rock, “Bandera Negra”.

Vicente Ramírez

Ya hace meses presentaron dos de los temas incluidos en el disco, como con “El cervezo” y “tu madre es una cabra”. Dos temas que nada tienen que ver con el resto del disco, pero que, a nivel de marketing, les ha ido genial, al menos para causar expectativa para ver que nos depararía este trabajo.

Empezando el disco encontramos la intro, “La isla de las 7 calaveras”, enlazada con el siguiente tema tras el chillido de Zeta de “al abordajeeee” cual pirata iniciando un ataque. “Al abordaje” me ha recordado mucho a “Satania” del “Finisterra”, con una duración parecida, algo más de 8 minutos de duración, entrando con un sonido de guitarra muy heavy, doble bombo…,y una parte central muy melódica cantada por Patricia Tapia, entrando después Zeta, acompañados únicamente por al piano. Sin dudarlo, es de las mejores del disco y un tema perfecto para iniciar los conciertos. Será unos de los que no podrán faltar. Un tema que de ya, se va a convertir en un clásico de Mägo de Oz.

Mägo de Oz – Bandera Negra

El tercer tema de este “Bandera Negra”, es “Resacosix en Pandemia”, un tema facilón, festivo, bailable, de esos de hacer el gamberro en el concierto, pero con una guitarras muy cañeras.

Nunca te fallaré” es un corte lleno de melodía, sin dejar atrás la distorsión de las guitarras, y con los teclados de Javi Diez y el violín de Moha muy protagonistas durante toda la canción. Un tema de los grandes, que muy bien saben hacer Mägo de Oz.

Mägo de Oz – La Dama del Mar

La Dama del Mar”, con inicio del violín de Moha, sigue la línea de la anterior. Otro de esos temas bien compuestos, con un estribillo que se te mete en la cabeza y que sin querer empiezas a cantar.

Le sigue otro temazo más, “El aplauso herido”. Muy rápido desde el principio, y con una letra que es toda una declaración de intenciones, cantada íntegramente por Patricia. Una canción que habla sobre ser cantante de rock “El miedo a ser yo misma por querer ser metalera, Y yo te juro, que no he dejado de luchar por conseguir poder cantar. He derribado puertas usando mi voz. Estoy poseída por el puto rock’n’roll”. Podemos decir que lo tiene todo: melódia, velocidad, rabia, estribillo pegadizo… ¡de diez!

Mägo de Oz – Tu madre es una cabra

Y ahora es cuando llega el tema controversia del disco, cantado junto a “La pegatina”, “Tu madre es una cabra” . Un corte más ska que nada tiene que ver con Mägo, pero que a la vez es muy Mägo. Personalmente lo veo muy de ir de fiesta. De los que te hacen desinhibirte cuando te lo ponen en el pub de turno, como pasa con “Fiesta Pagana”.

Musicalmente no es de esas canciones trabajadas, con una técnica increíble, y que te erizan los pelos cuando la escuchas, pero tampoco lo es “Despacito” de Fonsi, y sonó hasta en Vietnam. Con esto quiero decir que Mägo de Oz es muy consciente del tema que han hecho, y como lo han hecho, a sabiendas que a los clásicos seguidores de la banda seguramente la odiarían a muerte. Pero es de esas que te dan popularidad y lo que surja.

En el ecuador del álbum encontramos el corte “Guerra y paz”, compuesto por Carlos Escobedo y Txus. En una entrevista leí que Txus le dijo a Carlos que se estrujase el cerebro con el tema, y podemos decir que se lo ha dejado, y bien. Para mi una gran canción, que recuerda mucho a Sôber, pero también a Mägo.

El cervezo”, el otro tema que presentaron hace tiempo, para ir abriendo boca de este “Bandera Negra”. Es un tema que tampoco aporta mucho al disco, pero que tiene un estribillo pegajoso, que engancha que da rabia, mucha, de hecho.

Mägo de Oz – El cervezo

En “Abrazos que curan” cambian de tercio y se van por derroteros más country, rock sureño… un tema que recuerda a “Hoy toca ser feliz”.

Para ir casi acabando llega la balada “Quiero que apagues mi luz”, con una letra sobre la eutanasia. Una canción cantada por Patri y Zeta con acompañamiento de teclados, violín y flauta.

Y en disco que se supone que van de piratas, no podía falta esa canción que muchos habrán cantado en los autobuses escolares cuando iban de excursión “La vida pirata”. Seguidamente llega el tema que da título al disco, “Bandera Negra”. Un corte clásico de Mägo de Oz, rápido, pegadizo y muy trabajado. Con buenos solos de guitarras. Otro más para tocar en directo.

Ya para acabar llega “Después de la tormenta (outro)” a modo de intro para enlazarla con “Que el viento sople a tu favor”, tema regrabado junto a SAUROM, perteneciente a Gaia III.

Mägo de Oz – Al Abordaje

La verdad es que cuando empezaron a presentar los primeros temas de lo que iba a ser el próximo álbum de Mägo de Oz, y decían que era un disco de los de relleno, de puente a otro mucho más trabajado, con orquestación y demás parafernalia, que Mägo suele hacer, me echaba bastante para atrás.

A pesar de tener curiosidad por saber qué habrían hecho, había algo que me mantenía en alerta. Pero una vez escuchado el disco tengo que reconocer que me ha sorprendido gratamente y no me ha defraudado para nada. Es más, creo que Mägo de Oz ha incluido canciones, que sin querer o queriendo, deberán de ser tocadas en directo de forma obligada.

Es un trabajo muy heavy. Creo que desde hace bastante tiempo que no han hecho canciones tan heavies como las de este disco. Naturalmente, heavy estilo Mägo de Oz, no a lo Painkiller de Judas. Pero las guitarras suenan muy contundentes. El trabajo que han hecho Manuel Seoane y Víctor de Andrés es magnífico, haciendo olvidar, para bien o para mal, a Frank y Carlitos.

Un disco que les ha salido mucho mejor de lo que quizá esperaban, y vale mucho la pena darle una oportunidad.

Vicente Ramírez
Temas:

La isla de las 7 Calaveras (Intro)
Al Abordaje
Resacosix en Pandemia
Nunca te fallaré
La Dama del Mar
El aplauso herido
Tu madre es una cabra (con La Pegatina)
Guerra y paz (con Carlos Escobedo)
El Cervezo (El árbol de la birra)
Abrazos que curan
Quiero que apagues mi luz
La Vida Pirata
Bandera Negra
Depués de la tormenta (outro)
Que el viento sople a tu favor (con Saurom)