Después del Hard Rock Americano de Tesla, era el momento de recibir a la ex cantante de Nightwish, Tarja Turunen. Había muchísima expectación por ver a Tarja en solitario, y sobre todo por saber que banda le acompañaría en directo. Una batería situada a la derecha del escenario y encabezada por el monstruoso Mike Terrana, fué la encargada de levantar varias ovaciones del público durante el show de Tarja. Las guitarras se encontraban presididas por Kilo Loureiro de Angra y la sección de bajo por Doug Wimbish ex Living Colour. En el apartado más armónico y melódico estaba Max Lija al Cello y María Ilmoniemi al teclado, la cual tuvo diversos problemas de sonido, que hicieron restar dinamismo a la actuación.
Cerca de 8000 espectadores se dieron cita ante Tarja Turunen, disfrutando de “I Walk Alone”, el single del su nuevo álbum en solitario, la cual fue coreadísima por el público al igual que “Wishmaster”, tema estrella de su anterior banda, Nightwish. Tarja también quiso dar cancha a clásicos del Rock como el mítico “Poison” de Alice Cooper, que quedó bastante simplón y pobre, ya que este temazo es muy difícil de plasmar y sobre todo si se trata de una cantante de un género musical un tanto alejado al Hard Rock clásico de Cooper. Como he comentado en un principio, los problemas de teclado de María Ilmoniemi hicieron recortar el set list, y llegar a “Nemo”, uno de los cortes que más ovación obtuvo.
A diferencia de la versión de Alice Cooper, “Over The Hills And far away” de Gary Moore, si que se amoldó mucho mejor a la versión original del genio de las seis cuerdas.
Tarja mostró durante todo el show, una actitud muchísima más Rockera que en otras ocasiones , mostrándose muy cercana con el público y recordando a todos los asistentes que volverá por nuestro país en el mes de septiembre.
Otras de las bandas asociadas a MetalWay Festival es Apocalyptica, una banda curiosa como mínimo donde Eicca y Perttu no pararon en todo momento de hacer headbanging , interpretando un “Refuse/ Resist” y “Seek And Destroy” realmente impresionantes. Una de las versiones que para nada me esperaba fue “Whatever I May Roam” la cual fue una auténtica gozada el poder volver a rememorar semejante clásico de Metallica. Lo más destacado de la actuación de Apocalyptica fue sin lugar a dudas la aparición por primera vez en España , del vocalista Tip Johnson, interpretando temas bárbaros como “I Don’t Care” de Three Days Grace. Es obvio que Adam Gontier le daba un toque mucho más sentimental a este corte, que Johnson apenas llegó a igualar.
No podía faltar en un concierto de Apocalyptica, el “Hall Of The Mountain King” el cual sirvió para despedirse, dejándonos los Fineses un muy buen sabor de boca y que gustó muchísimo, observándose durante todo el show , en las primeras filas una auténtica avalancha de seguidores.
Sobre las 21:00 horas llegaba la decepción más grande del viernes 26 fue sin duda la actuación de Queensrÿche, los cuales sonaron de una manera muy mediocre y totalmente alejada de la calidad de los Americanos. Geoff Tate salió ataviado con sombrero de mafioso para comenzar con varios temas pertenecientes a “Rage For Order”, realizando un “Walk In The Shadows” bastante soso, y donde pudimos comprobar como Tate lamentablemente se encuentra en su mejor forma vocal. Inmediatamente después de “Walk In The Shadows”, sonó “Jet City Boy” y la intro de “Best I Can” , pero misteriosamente no tocaron este corte, quedándose de forma exclusiva como introducción.
De pocos clásicos pudimos disfrutar ya que evidentemente, se dio mucho más cancha a su última obra de estudio “American Soldier” , un trabajo que se encuentra muy por debajo con respecto a anteriores álbumes. Como nota positiva, me gustaría destacar la gran labor de Michael Wilton, creando un ambiente de antaño. Pero en líneas generales, Queensrÿche estuvieron durante toda la actuación, muy incómodos sobre las tablas, les faltaba garra y potencia. Y si a todo esto le añadimos que el set previsto para 1 hora fue recortado a 40 minutos escasos, el resultado es un show mediocre y con poco interés.
Sorprendentemente, Queensrÿche quisieron dar rienda suelta a su primer EP, pero no a “Take Hold Of The Flame”, un corte impresionante que sin duda alguna, hubiera causado furor entre sus seguidores. Geoff Tate prefirió interpretar “Men Down!” y la insoportable “A Dead Man Word’s”. El show de Queensrÿche finalizó como si se tratará de un equipo de segunda, creando muchísima desilusión entre el público. La verdad es que alternar temas por ejemplo de “Operation Mindcrime” con su nuevo álbum de estudio “American Soldier” hubiera sido todo un puntazo, pero por otro lado obviamente difícil de llevar a cabo, debido a la disparidad temática.
Posteriormente tras la decepción de Queensrÿche, se produjo un cambio totalmente radical en la actuación de Twisted Sister, los cuales venían a MetalWay Festival con motivo del 25 º Aniversario de su obra “Stay Hungry”. Difícilmente Twisted Sister pueden defraudar sobre las tablas. Una de las bandas más influyentes del Hard Rock Americano salió a escena, con un impresionante cartel de fondo en honor a su aclamado álbum. Sin ninguna duda, para Twisted Sister era un día especial y debían sacar el mayor provecho posible.
Dee Snider nada más salir, nos anunció que iban a tocar de manera integra “Stay Hungry” y así fue, produciéndose un descontrol total por parte del público durante la interpretación de “We’re Gonna Take It”, la cual se alternó con la ya mítica broma de “Huevos Con Aceite”. Twisted Sister a pesar de la edad de cada uno de sus miembros, hay que reconocer que siguen manteniendo una presencia increíble sobre las tablas, con un Eddie Ojeda muy comunicativo y un JJ. French que hacía de traductor en determinadas ocasiones.
De repente, el escenario se tiño de rojo, y la cara de Snider emulaba al mismísimo demonio, era el momento perfecto para “Burn In Hell”, un corte lleno de misterio que consiguió envolver por completo al público. A partir de “Burn In Hell” el concierto cogió un cariz de menos calidad durante “Captain Howdy”, pero volvió a retomar el nivel apropiado con “Street Justice”, el cual creo recordar que jamás han llegado a tocar en directo. En este mismo instante, Dee Snider y sus huestes ya tenían a todo el público en el bolsillo y solo faltaba “I Wanna Rock” para terminar de reventar el show, donde Snider interactúo con el respetable preguntando “I Wanna What?” y por supuesto respondiendo de forma abrumadora.
Era impresionante poder ver alrededor de 5000 personas coreando semejante himno. A continuación Dee Snider preguntó al público si se sabía el orden de “Stay Hungry”, de repente empezaron a sonar los primeros acordes de “The Price”, uno de los mejores temas lentos de “The Idol” de Wasp, produciendo sentimiento a raudales en cada una de las palabras de Snider. Tras esta sorpresa, “Stay Hungry” siguió su curso, terminando con “Don’t Let Me Down” – un corte bastante desconocido para la inmensa mayoría pero muy bien recibido por la gente – y “The Beast” el cual quedó un tanto pobre, quizás por el cansancio que experimentaba Dee en ese instante.
Pero Twisted Sister todavía tenían más ases en la manga, esto no podía quedar de esta manera, era el momento idóneo de descargar “SMF” el himno por excelencia de la banda, que describe perfectamente la macarrería propia de Twisted Fucking Sister, una banda que a pesar de los años, sigue transmitiendo perfectamente sus ideales. Quizás se pudo hacer un poco corto, ya que se echaron de menos grandes clásicos como “Love Is For Suckers”, “The Kids Are Back” o el “Come Out And Play”, pero a pesar de esto los 45 minutos que estuvieron Twisted Sister fueron apoteósicos.
Quedaba ya poco para finalizar esta jornada, pero antes de esto, debía aparecer una de las leyendas de la NWOBHM, estamos hablando evidentemente de Lemmy Kilmister y su banda Motorhead la cual salió con una potencia sonora realmente desorbitante. Lemmy nada más aparecer dijó: "Good night, we are Mötorhead and we make rock n´roll", y ya con tan solo esa frase, puso al respetable patas arriba, comenzando el show con “Iron Fist”, un corte con el que raramente empiezan por lo que fue una grata sorpresa para todos. Desde “Iron Fist” se alcanzó una euforia tremenda que se mantuvo constante en “Stay Clean”, mostrando a un Lemmy imponente con esa pose impecable y con sus legendarias camperas blancas.
Phil Campbell como es costumbre , también estuvo impresionante en todo momento, demostrando sobre las tablas, la auténtica energía de Motorhead. Phil se armó con una Explorer naranja, la cual no paró de ser desgarrada durante todo el show, acompañándose de la fuerte pegada de Mickey Dee (es asombroso la caña que mete este hombre, parecía que se iba a cargar la batería en cualquier momento). El escenario se encontraba adornado con un impresionante telón que correspondía a la portada del último álbum de estudio. Motorhead son Rock ‘ N ‘ Roll en estado puro, Rock con chulería y prepotencia, un ejemplo bien claro fue “Metropolis” tema donde la gente no paró de corear y alabar a la banda, y no es para menos porque “Metropolis” posee en directo una fuerza tremenda.
Motorhead también quisieron desgranar algún corte más orientado hacia el Hard Rock Clásico con “Another Perfect Day” para retomar su Heavy Metal pesado de “Over The Top” e incluso adentrarse en trabajos más modernos como “In The Name Of Tragedy” o la poderosa “One Night Stand” la cual no fue tan bien recibida como los clásicos anteriores. Pero la máquina Motorhead volvió a dar cera en “Going To Brazil” siguiendo con la inmensa “Killed By Death” convirtiéndose en el momento más especial de MetalWay Festival, ya que salió a compartir tema nada más y nada menos que Dee Snider , produciéndo una auténtica regresión a los 80, algo realmente emocionante difícil de olvidar.
Tras este mágico momento, era la hora de llegar a los bises, pero antes como no, no podía faltar “Ace Of Spades”, un tema que en disco no dice demasiado, pero que en directo se convierte en una bomba de relojería nunca mejor dicho. Como es ya costumbre, Lemmy presentó a los miembros de la banda, recibiendo Campbell una gran ovación, por parte del público. Inmediatamente después de las presentaciones, Kilmister presentó “Overkill” tema que sirvió para despedirse y para corroborar la grandeza de una banda que todavía sigue viva, You’re Motorhead!!
La traca final del viernes fue protagonizada por una de las actuaciones más esperadas del festival, la reunión de los legendarios Warlock al frente de la incombustible y eternamente joven Doro Pesch. Warlock en líneas generales ofrecieron un show apasionante y entrañable, donde pudimos observar a un Peter Szigeti y Nico Arvantidis muy dinámicos y manteniendo aún buenas tablas. También pudimos ver la maestría de la pegada de Michael Eurico, constituyendo de esta manera la formación clásica de “True As Steel” su álbum menos conocido, pero que sin embargo aquella noche más sonó.
Lamentablemente, el concierto a grandes rasgos he de reconocer que fue un concierto más de Doro, pero con otros músicos, quedándonos la sensación de haber visto todo ya antes. También en un principio se había prometido unos teloneros especiales, y al final no hubo nada de nada, este aspecto fue un punto en contra al que se sumó la escasez de pirotecnia, factores que ennegrecieron en parte el show. Por otro lado, si bien es cierto, que se podía observar a una Doro Pesch muy emocionada, existiendo una gran interacción entre la cantante y el público. El concierto comenzó con una tremenda energía descargando “Earthsaker Rock” y “I Rule The Ruins” para continuar con la genial “Sign Of Satan”, “Kiss Of Death” y la sentimental balada “Love Song”.
Los momentos realmente gloriosos fueron sin duda durante la interpretación de “Burning The Witches” siendo coreado hasta la saciedad así como “True As Steel”, un corte que con el paso del tiempo ha ganado muchos enteros. Como no, también la emotividad se apoderó en "Für Immer", tema donde Doro Pesch nos explicó que fue compuesto para España tras la gira realizada en el 86 junto a Judas Priest. Tampoco podía faltar el emblemático “All We Are”, un tema escuchado en directo hasta la eternidad, dándonos la sensación como he dicho en un principio, de estar viendo nada nuevo.
Otra de las notas discordantes del show de Warlock, fue la versión del “Breaking The Law”, un corte que no debería haberse incluido en el repertorio siendo que estábamos presenciando la reunión de Warlock, quedando de esta manera, fuera de lugar totalmente.
Fue un buen concierto, pero posiblemente los seguidores de Warlock esperaban algo mucho más de la formación clásica y no prácticamente los mismos temas que suele interpretar Doro Pesch en solitario. Esperemos que la próxima vez que vengan por nuestro país confeccionen un set list mucho más acorde a las circunstancias. Y de esta manera, con un sabor de boca un tanto agridulce se puso punto y final a esta jornada la cual tendría su continuidad en el último día de MetalWay Festival.
Texto: Luis Ignacio Orós
Fotos: Luis Ignacio Orós/ MetalWay Festival
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