Sin enterarnos ya estamos terminando Junio y con este mes llegó de nuevo uno de los momentos más esperados tras el largo invierno… inaugurar nuestra temporada festivalera veraniega con el más hardroquero por excelencia y el de más altas latitudes en su especie de toda Europa… el SWEDEN ROCK FESTIVAL da el pistoletazo de salida a un verano que no puede venir más cargadito…
Texto: Susana Manzanares.
Fotos: Edko Fuzz/Susana González/Susana Manzanares.

 

Más de 20 años, miles de personas edición tras edición no pueden estar equivocados, y los otros tantos incautos que volvemos cada año tampoco… Algo tendrá que tener este festival para que cada cual al volver a casa cada año, y no falla, no piense en otra cosa que volver al siguiente sin siquiera haber sacado todavía un pie del avión…

El SWEDEN ROCK FESTIVAL tiene ese poder, ese ser algo más que un festival para convertirse en una auténtica experiencia personal y musical, y me atrevería a decir incluso que en ese mismo orden. El único, que yo sepa, que es capaz de hacer adeptos, fans, incondicionales o cómo lo quieras llamar, que compren su entrada el primer día que salen a la venta tener ni idea siquiera del cartel, ni de una mínima parte de él…

Por qué pasa esto? Pues porque te ofrecen garantías. La garantía de este festival es que no falla nada, es la calidad en todos los sentidos y la calidad es una premisa que nunca ha dejado de cumplirse en cada una de las ediciones de este festival, en el cual la organización –al margen de lo no musical- siempre ha encontrado la fórmula de confeccionar un cartel exquisito, original y selecto de manera que en mayor o menor medida, quien más quien menos hemos dejado escapar un ‘ohh’ de asombro al ver alguna que otra incorporación…

Aun así, todo en esta vida es susceptible de imprevistos y alteraciones y el Sweden, como lo llamamos en confianza, no iba a ser menos. En una edición marcada por un ligero descenso en el nivel musical del cartel –según la percepción u opinión general- la huelga de trenes de última hora, e incluso la grave avería en el suministro de agua que sufrió la zona el segundo día de festival, no eclipsó para nada la magia de un evento que muchos de nosotros llevábamos todo el año esperando.

Este era el año de Alice Cooper, de Black Sabbath, de figuras emblemáticas como Billy Idol, Joe Bonamassa o UDO… Figuras exquisitas y sublimes como Neal Morse y compañía con su Transatlántic… irreverentes y espectaculares como Rob Zombie… hard rockeras de toda la vida como Danger Danger, Tesla o TNT… o golosinas, ay las golosinas… esas cosas raras que no ves en ningún otro sitio como Q5 o Madam X o enormes clásicos como Y&T, Magnum o Uriah Heep, pasando por los auténticos fenómenos de nueva hornada como Alter Bridge o Volbeat

Más, muchos más… Este año el Sweden tenía cartel variado y para todos los gustos, aunque si he de ser sincera, a nivel personal he echado en falta algo más de presencia sureña… claro, si nos acostumbran a unos Lynyrd Skynyrd por aquí, o unos Molly Hatchet por allá de otros años… pero eso es cosa mía y lo que viene al caso es lo que por allí ha pasado, no lo que ha dejado de estar.Os contaremos al detalle todas las bandas que hemos visto, profundizaremos lo que podamos en diseccionar todos los aspectos musicales y no musicales de este festival y si nos dejáis, intentaremos convenceros de que aunque sea una vez en la vida, os paséis por este festival… y que conste, que no nos pagan nada! Pronto mucho más así que… ‘håll ögonen öppna!’ o lo que es lo mismo, estad atentos!

Texto: Susana Manzanares.
Fotos: Edko Fuzz/Susana González/Susana Manzanares