Para quien no les conozca, The Soulbreaker Company es una banda nacida en Vitoria con este su tercer disco en el mercado puesto a la venta el Septiembre pasado, y ganadores de diversos concursos musicales como el Villa de Bilbao, siendo considerado el mejor grupo de Euskal Herria.

Definir el estilo de este grupo no resulta fácil, ya que beben de múltiples influencias, rock, pop, psicodelia, blues y como soul, evolucionando musicalmente a lo largo de toda su carrera discográfica.

Centrándonos en concreto en este nuevo disco, podemos encontrar una gran variedad de sonidos, de melodías, con una complejidad instrumental notoria. Los temas no son directos, sino que evolucionan constantemente entremezclando ritmos y melodías. Sin embargo, esto no debe echarnos atrás a la hora de pararnos a saborear este trabajo ya que todas estas melodías están enlazadas con un gusto exquisito, y en ningún momento nos hace olvidarnos de en qué canción estamos, nunca perdiendo un hilo conductor.

Otro aspecto que llama bastante la atención sería la capacidad para crear ambientaciones que te sumergen en mil y una situaciones. Tan pronto puedes pensar que te encuentras en Andalucía en 1970 escuchando a Triana, como en un país latino, como en la Inglaterra con Led Zeppelin triunfando. Y como estas, otras tantas situaciones que a cada uno le puedan recordar. Sin embargo, lo que personalmente considero que le da más “rollo” al disco, es curiosamente los pasajes en los que el saxofón tiene mucha presencia, dando el punto más blues y soul, en contraposición con las líneas vocales tan desgarradas de los estribillos de algunas canciones.

Y es que, pese a toda esta fusión estilística, conviene destacar que sí que hay canciones con estribillos que se nos quedarán en la memoria, que quizás puedan recordar a estribillos vocales de creed o incluso Black Crowes. En concreto, show the roses, del cual han grabado el videoclip, o where mermaids sing loud son temas bastante pegadizos y que cuesta que se vayan de nuestra mente.

El disco contiene 11 cortes, el primero de ellos (It’s Dirt) es de larga duración, con prácticamente 10 minutos de ambientaciones y melodías, la cual considero que es una acertada carta de presentación de lo que nos encontraremos en el disco, permitiendo adentrarse al oyente en él y captar su atención. No obstante, al no empezar de manera directa o pegadiza, sí que puede ocurrir que haya personas que no tengan la paciencia suficiente para saborearlo y se puedan crear expectativas equivocadas sobre él.

Faltaría destacar el sonido y la producción del disco, que en general, es bastante bueno, sonando muy compacto en todo momento, escuchándose perfecto y nítidamente todos los instrumentos sin que nada destaque sobre el resto de la mezcla. Quizás, algo a mejorar en ese sentido sería el sonido de la guitarra solista, sonando algo artificial en comparación con el resto de instrumentos.

En resumen, un interesante trabajo, complejo pero para nada aburrido, el cual demuestra la calidad que tienen muchos grupos en este país y que necesitarían del apoyo mediático o de público para que puedan triunfar.

Blench

Temas:
01. It’s Dirt
02. Oh! Warsaw
03. Sow The Roses
04. Rude Perfume
05. Colours Of The Fire
06. Where Mermaids Sing Loud
07. No Way Back Home
08. Hail While She Leaves
09. Take A Seat On The Moon
10. Saviours
11. Sandstorm