Wacken Open Air 2007: Primeras impresiones

Aproximadamente unas 75.000 personas se estima que este año han abarrotado el recinto del festival y poblado el pequeño pueblecito cercano a Hamburgo. Pese a eso, los agobios no eran muchos y podían verse los conciertos con relativa tranquilidad incluso desde la parte delantera, produciéndose los momentos de mayor masificación a última hora del sábado coincidiendo con las descargas de In Flames e Immortal que suponían prácticamente el fin de fiesta del evento. Mucha gente pero muy buen ambiente como cada año.

Quizá los peores momentos en ese sentido se produjeran a la entrada al festival durante el martes, miércoles y jueves, produciéndose caravanas a la entrada del pueblo de hasta 7 horas en las que en un alarde de paciencia y civismo los metaleros subían el volumen de sus equipos, desplegaban mesas y sillas por la carretera y se doblaban sus buenas cervezas, lejos de increpar o actuar violentamente. Muchos en este país deberían tomar nota…

Desgraciadamente una semana antes del festival la zona recibió fuertes lluvias, lo que afectó mucho al suelo arcilloso que no retuvo bien el agua y formó zonas de muchísimo barro pastoso que prácticamente se tragaba hasta los calzados. El segundo día los organizadores trataron de paliar el problema cubriendo el suelo de toda la zona de conciertos con paja, gran idea que mejoró mucho las cosas pero que también originó algún que otro incidente cuando una zona próxima al True Metal Stagese incendió aunque la cosa no pasó a mayores.

Inclemencias del tiempo aparte, que durante el festival nos respetó en todo momento con sol y nubes y un clima perfecto quitando que por las noches refrescaba bastante, este año ha habido ligeros cambios en cuanto a la disposición de escenarios en el festival con respecto a la pasada edición. Los escenarios principales, han cambiado sus posiciones situándose el True Metal Stage donde el año pasado se ubicó el Black Stage y viceversa, algo que originó como es lógico el traslado también del Party Metal Stage al lado opuesto, quedando el W.E.T Stage (o la carpa, como es más conocido) en el mismo sitio.

Hablando de la carpa este año ha tenido más ajetreo que nunca. Grandes conciertos de grupos importantes se han dado cita ahí y han propiciado masificaciones de gente impresionantes que querían presenciar los conciertos. Así, fue misión imposible disfrutar del directo de All That Remains, Tyr o Turisas por poner tres ejemplos, quedándose el recinto (que no es tan pequeño como muchos podrían pensar) ridículamente pequeño. Una pena, pero es lo que ocurre cuando intentas meter más de 60 bandas de primera línea en un mismo festival en solo 3 días.

Ninguna caída de última hora del cartel excepto la de la banda encargada de cerrar el festival en la carpa, Vital Remains, que no pudieron estar finalmente por culpa de enfermedad de última hora de uno de sus integrantes y al margen de pequeños desajustes horarios inevitables en eventos de estas magnitudes (pese al cumplimiento escrupuloso de los horarios establecidos con cortes de sonido incluidos), todo con total normalidad y sobre lo previsto salvo el pequeño desajuste del viernes a causa del pequeño incendio pero que fue solventado con total normalidad, naturalidad y profesionalidad.

Organización que roza la perfección con numerosos controles a la entrada del recinto, mantenimiento constante de aseos, recogida de basura, atención a cada momento y oficina de información abierta las 24 horas del día. Un 10 nuevamente para el mejor ejemplo de organización metalera que podemos encontrar actualmente, mejorado cada año.

En cuanto a las bandas hubo de todo. En líneas generales quizá haya que decir que la acústica, siempre envidiable eso que quede claro, no fue tan buena como la del año pasado y algunas bandas no sonaron todo lo potentes que debieran sonar. Fue el caso de Immortal por ejemplo, que sonaron un poco bajos. Por lo demás Saxon cumplieron sin asumir demasiados riesgos en el concierto destacado del viernes detrás de unos Sodom con colaboraciones de ex miembros, gran concierto también el de los alemanes. Decepcionante el debut de Thomas Vikstrom como vocalista de Therion, grandes descargas de thrash metal a cargo de clásicos como los ingleses Sabbat o Possessed, bestiales Dimmu Borgir, conciertazo, geniales Iced Earth que parecen haber vuelto por sus fueros, sosos Blind Guardian (no es novedad)…

Del último día a destacar la gran descarga de thrash metal de los reunidos Sacred Reich, correcta descarga de Stratovarius que además nos presentó un tema nuevo y a la vez esperanzador y la parte más caliente del festival que coincidió con las descargas de Immortal y especialmente la de In Flames, que a mi juicio dieron el mejor concierto de todo el festival con una traca final para volverse loco con pirotécnia y fuegos artificiales incluidos. Absolutamente espectacular el concierto de los suecos que se metieron al público en el bolsillo desde el primer tema.

En los próximos días podréis leer aquí una extensa y detallada crónica de lo que aconteció en Wacken durante los días 2, 3 y 4 de Agosto con crónicas individuales y estupendas fotos. Hasta entonces permaneced atentos.

Texto: Raúl del Amo
Fotos: Wacken Open Air

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