En cuanto al público, algunos íbamos con algunas dudas de la edad o del tipo de público que se iba a presentar en la Heineken pero, para mi orgullo y satisfacción pude encontrarme todo tipo de público, desde chicos y chicas jóvenes (y muchos jóvenes que por la ley no pudieron asistir) hasta viejos rockeros y todos salieron encantados del show vivido.

Y es que no podía ser de otra manera. Leo ya anunció que iban a haber sorpresas durante el concierto, que no iba a ser simplemente una interpretación de los temas, sino que iba a ser algo más. De primeras nos encontramos dos telones a los laterales del escenario con imágenes sugerentes de chicas y encima de los telones calaveras rojas que sujetaban dichas fotos; la pantalla que está detrás del escenario reprodujo animaciones acordes con cada tema, se montaron tarimas y pasarelas “lowcost” para que los músicos pudiesen subir y brincar a su antojo. En definitiva, demostraron que con poco presupuesto y con ganas se puede hacer de una sala no muy agraciada para conciertos de rock, un escenario divertido. A todo ello hay que añadir que en el solo del señor Valieri, del que luego haré referencia, salieron chicas a bailar con él, la banda repartió cerveza al público, en fin, muchos pequeños detalles que si los hace una banda extranjera estaríamos todos alabándolos y resulta que los tenemos aquí en Madrid. En definitiva, una puesta en escena de las que ya se echaban de menos por estos lares.

La actitud de los músicos fue de entrega total, de satisfacción y locura de lo que estaban viendo ya que esperaban una buena acogida pero realmente es que la gente se volvió loca y la banda simplemente "flipaba". Por otro lado, derrocharon macarrería, luciendo cambio de vestuarios, sudaron, bailaron, brincaron con un toque macarra, (mención aparte al atuendo a lo Axl Rose del señor Valieri), sin parar quietos un segundo, sudando rock and roll. Entre tanta locura incluso acabaron regalando una guitarra (anécdota que la lanzaron primeramente al público y la gente pensando que era broma y en muestra de la honradez de la gente del rock la devolvió a la banda y al final Ix decidió regalarla a alguno de los asistentes).

A todo esto, no hay que olvidarse de que esto también es música, que venían para presentar en directo “Los fuertes Sobreviven”, disco que está teniendo una muy buena acogida para los tiempos que corren, y del que dieron buena cuenta. A la batería tenían una nueva, a la par que muy interesante, incorporación. Un chico de apenas 22 años llamado Matt que se coronó tanto por lo bien que toca para su edad y la posibilidad como es normal de progresión que tiene, como por el desparpajo y las ganas de agradar y de ser uno más de 037, interaccionando mucho con el público. Por otro lado está Sergio conocido ya por Ankhara, Mago y Mr. Rock que si bien está plenamente asentado a nivel musical, se le vio el más cortado, cosa hasta cierto punto normal porque cada cual tiene su forma de vivir el rock. No  obstante no paró de sonreír en ningún momento.

De Leo poco se puede decir. Además del prodigio vocal que tenemos en este país, en 037 se le ve especialmente cómodo, pudiendo macarrear con su explorer al más puro estilo Hetfield, subiéndose a todo lo que pillaba y cantando como pocos pueden hacer. Vendrá gente a criticar su banda, o criticar cualquier cosa que haga, pero después de lo visto el pasado sábado (además de toda su trayectoria) solo se le puede agradecer que siempre intente innovar y que siga dándole al rock.

Por último, hablar de Ix que si bien en actitud lo bordó y musicalmente tocó bien, el sonido de su guitarra a veces se hacía incluso doloroso pero eso son cosas que conlleva el directo, pero que no pueden hacer desmerecer todo lo que demostró. Buen guitarrista que con una mejora en el sonido, dará que hablar sin duda. No obstante, bagaje musical con los Ángeles e Infernoise tiene de sobra.

Saltaron a escena (literalmente cada uno desde una tarima o desde donde pillaron) con Tantas Vidas que sonó bastante más roquera que lo que demuestra el disco, para pasar a Condenado, tema cañón que nos dejó bien claro por donde iban los tiros del show. Aquí no habría ni canciones acústicas, ni versiones, solo dos horas de rock sin concesiones. Decir que los dos primeros temas sonaron de aquella manera (es una pena que casi siempre se oigan mal los primeros temas en esa sala). “En tu habitación” consiguió enganchar a la gente y puso la sala patas arriba junto con “La danza de Hyde”. “Ellas” que tanto me gustó en disco en directo gana quilates, con un Leo inconmensurable o “Bebe de él”, de los mejores cortes del primer trabajo y que me convenció de que esta banda se estaba saliendo. Gran interpretación, cañera y dura de ese tema.

Tras Cuenta conmigo (baladón ochentero) Ix se queda solo para hacer un solo no muy inspirado pero que cuenta con la ayuda de dos chicas, y mucha cerveza. La locura empieza a desatarse en la Heineken. Vuelven los músicos y nos encontramos con “Volar” en una versión más hardrockera y menos modernosa y que personalmente me convenció más que la de estudio.Me gustaría que la grabasen porque fue un gran acierto. Otro de los temas que mejor les quedó fue “Si tú te vas” ya que es una banda que las baladas rollo Skid Row o Guns and Roses las bordan y este tema sonó perfecto.
A continuación “Héroes” con dedicatoria muy acertada de Leo a los verdaderos héroes del día a día, “Hablar de Amor” donde eché de menos el contrapunto de Huecco a la voz pero que me sigue pareciendo un temazo de los que perdurarán en su set list o “Buitres” canción pesadísima donde más de uno se dejó el cuello. Aquí creo que Leo la cantó mejor, menos chillona que la versión grabada en Títere con cabeza.

Uno de los momentos esperados sería escuchar “Bella Julietta” en eléctrico y no en acústico como acostumbraban a tocar en muchos conciertos y la gente se dejó la voz literalmente y no hizo ni falta que Leo nos pidiese que cantásemos con él.

Para finalizar cayeron “Los fuertes sobreviven” (con la portada del disco en la pantalla trasera) y “Desde el Ataud” en un fin de fiesta perfecto con momentos para presentar a la banda y que cada uno se marcase un solo (muy interesante el de Mat, divertido y con fundamento)

Acabó el concierto y todos satisfechos, la banda agradeciendo una vez más (y fueron muchas a lo largo de la noche) el apoyo de la gente. Tanto es así que acabaron los cuatro lanzándose al público que no quería irse de la sala y querían seguir disfrutando de más dosis de rock and roll.

Texto:Belch
Fotos: Michelle Alexandra

ENLACES RELACIONADOS:

Leo-037: Los Fuertes Sobreviven // Warner Music