Dry River – 4 de Noviembre 2022 – Sala Mon Live (Madrid)

Triunfar en el rock a nivel nacional es una labor harto complicada. La escena musical nacional en cuanto a apoyo de las grandes discográficas y promociones con el debido soporte financiero es coto para algunos casos puntuales, donde el rock no suele tener mucha presencia.

Texto: Toni Marchante
Fotos: David Aresté

Por ello, muchos grupos, que en primera instancia aman la música y que incluso residiendo lejos de donde se cuecen los negocios, se buscan la vida, disfrutan componiendo, aprendiendo, creciendo a pasos agigantados, mostrando una personalidad que les lleva a conseguir resultados excepcionales.

Y este es el caso de Dry River. Los que hemos tenido el privilegio de disfrutar de su evolución desde su primer disco, hemos sido observadores de su filosofía y su música. En este contexto musical en el que vivimos, nunca han desfallecido y siempre han ido a más. Ni la pandemia ha conseguido mermar esa creatividad musical y ese seguir adelante, siempre evolucionando, sin repetirse y mostrándonos cosas nuevas.

El éxito de Dry River no sólo se transmite por los medios que hablamos de ellos o con ellos, se transmite entre la gente, de boca a boca, por descubrimiento o sabia recomendación. Asistir a uno de sus conciertos garantiza convertirse en fan de ellos, porque un bolo de Dry River transciende lo que es un directo de rock al uso.

Tras la reciente publicación de su último disco “Cuarto Creciente” que reseñamos hace unos días, la banda levantina han cerrado inicialmente cuatro fechas para la presentación de su nuevo trabajo. Murcia fue el estreno y ahora nos tocó Madrid para posteriormente visitar Valencia y Totana.

Ver la Sala Mon abarrotada, es un premio no sólo para la banda, sino para todos aquellos que desde el primer momento hemos creído en ellos, porque compartir la música y transmitirla es como predicar los Evangelios. De verlos hace 7 años en la sala We Rock presentado su “convite nupcial”, pasando por el registro audiovisual “DC” en 2019 y disfrutar de ellos en varios festivales hasta hoy, sólo tiene una gran diferencia: el volumen de público; porque en todos los casos, siempre han ofrecido un magnífico espectáculo.

Ángel Belinchón (voz), durante el concierto, nos comunicó que iban a tocar todas las canciones del nuevo disco, lo que suponía una presentación en toda regla. Pero que no nos preocupáramos porque lo iban a acompañar de sus “Jits”, cosa que empieza ya a ser un bendito problema, con cuatro álbumes a sus espaldas y tantas buenas canciones. Dentro de los “Jits” se quedaron algunos fuera, dado la alta calidad de su discografía, pero la gente salió satisfecha en general con las elecciones.

Ángel Belinchón además de su enorme voz es un frontman excepcional y lo volvió a demostrar esa noche; por su sentido del humor, porque se nota que se lo pasa bien haciendo lo que hace y eso lo sabe transmitir como ninguno. La labor de David Mascaró al bajo es crucial, siempre desde la máxima discreción en la escena, que no en el sonido donde está muy presente. Matías Orero es otro de los pilares originales del combo castellonense, siempre demostrando su gran clase a las seis cuerdas. El nivel de Pedro Corral lo sitúa como uno de los grandes baterías de este país.

Dry River sufrió dos bajas significativas después de su tercer álbum. Martí Bellmunt con su versatilidad y sobre todo Carlos Alvarez, por lo que aportaban a la banda y por su presencia en los directos. Y este es otro de los factores que nos hacía preguntarnos como serían los nuevos Dry River sobre el escenario. Evidentemente Carlos es un grande y siempre se le echará de menos, pero la banda ha sabido reponerse con solvencia a este contratiempo.

Y es que la labor de las nuevas incorporaciones en directo, también cumplen con la nueva dirección tomada por el grupo. Miguel Centelles a los teclados y Guillermo Guerrero a la guitarra sorprenden por el alto grado de integración, mostrándonos una banda muy compacta. Con las dos nuevas incorporaciones, la banda ha reorientado una vez más su concepto y esa noche pudimos comprobar el nivel de su nuevo directo.

A las 21:00 sale al escenario el polifacético Fanfi para presentarnos al mejor grupo del Universo, invadiendo los músicos escenarios para comenzar directamente con el coro de”Culpable”; primer tema que sirvió también para ir ajustando el sonido. La entrega del público fue total desde el principio, demostrando haber hecho los deberes con el aprendizaje de los nuevos temas.

“Segundo intento” vino a continuación, otro de los temas grandes del nuevo disco, con sus teclados ochenteros y sus maravillosos arreglos de guitarra. La voz de Ángel dominó la escena en una grandísima interpretación.

Tras comenzar con dos temas nuevos, intercalaron “Camino” donde ya pudimos testar que, aunque el público se sabía los nuevos temas, esperaba con impaciencia también disfrutar de los temas de siempre.

“La Serpiente” fue seguido con atención acompañado de Fanfi, convertido en monje siniestro que apareció en la escena. Fue quizás el tema de la noche que la gente escuchó con más atención y menos efusividad, empatizando con el espíritu de la canción.

Momento para “Si estás tú” para el relax y levantar las emociones preparando la apoteosis con los dos temas siguientes, grandes clásicos que pusieron patas arriba la sala. Hablamos de “Fundido a Negro” y “Perder el Norte” donde Ángel compartió los estribillos con una participación espectacular de los asistentes.

Sobre todo “Perder el Norte” fue uno de los grandes momentos de la noche, con la gente cantando a viva voz, y los músicos disfrutando de lo lindo sin perder una pizca de concentración y disfrutando intensamente del reconocimiento masivo.

Tras corear el nombre de Matías, los Dirri se pusieron en modo Queen para interpretar “La Libertad”, también muy celebra con un público que coreó el estribillo sin piedad.

Llegó el momento de lucimiento de Guillermo Guerrero, con un solo inicial de guitarra (con algún recuerdo a Star Wars”) que dio paso a “Calles Inundadas”; ese recuerdo y homenaje a la pandemia donde en sus cinco partes, se transmite el dolor y como hemos ido superando la situación, echando la mirada atrás, con proyecciones en la pantalla trasera del escenario y esos versos recitados por Ángel con gran maestría en la parte final de “Ya no llueve…”, tocándonos la fibra sensible a todos, porque todos hemos sufrido y padecido ese periodo y sabíamos de lo que se hablaba.

Y nada mejor para cambiar el tercio, que recuperar una de sus obras maestras, la única interpretación de su disco debut “El circo de la Tierra”. ”Pequeño Animal” comenzó con el simpático detalle de Ángel, dejando en fuera de juego a todo el personal en la primera frase. Poco más que decir de esta grandiosa canción, donde Pedro Corral hizo un mini solo de batería, demostrando su gran nivel a las baquetas, algo que se percibió durante toda la noche.

Que un grupo de Castellón dedique una canción a Juan Carlos Aragón Becerra es algo que ya emociona a un gaditano carnavalero como es mi caso. Si además es un temarral de ese calibre ya son palabras mayores. “Capitán Veneno” se inspira en un pasodoble de la comparsa “Los Millonarios” de título “Para que escuchen tu canto”, donde se trata el paupérrimo contenido letrístico de los éxitos musicales que copan las listas de ventas.

“Capitán Veneno” es uno de los grandes estandartes de este nuevo disco, por su fuerza, su estribillo, su sentido crítico y con una inserción instrumental progresiva, digna de unos Dream Theater, que sonó espectacular poniendo de manifiesto las virtudes de sus músicos, en especial de Guillermo Guerrero a la guitarra.

De nuevo el grupo se dispuso a tirar de los grandes “jits” con dos de sus imprescindibles, “Me va a faltar el aire” donde se cedió al respetable el arranque del estribillo en cada momento, en una entrega total que tuvo continuidad en el siguiente tema.

Para este siguiente invitaron al escenario a Dani, cantante de Lèpoka, quien a dúo compartió el festivo “Traspasa mi piel”, en otro de los momentos cumbres de la noche. No faltaron los teclados con sonidos Hammond y los devaneos Queen-Deep Purple y por supuesto ese estribillo rompedor donde todo el mundo se dejó la voz.

A partir de aquí se retiraron unos breves minutos para volver y acometer lo que sería el bis de esta gran velada. Y lo hicieron comenzando con el simpático “Funeral”, con la banda de nuevo en modo Queen, contando con la colaboración de Fanfi deambulando por el escenario, arrancando las sonrisas del público con sus ocurrencias y sus actos.

También se aprovechó este tema para la presentación de los miembros del grupo, donde Ángel nos pidió que tras la presentación de cada uno se gritara “Es el mejor, no es el peor” al compás de los instrumentos.

Y tampoco podía faltar “Irresistible” quizás el tema más “popero” de su discografía, donde a Ángel le gusta sacar siempre su keytar y Fanfi nos da su exhibición aeróbica con su camiseta de los Monty Python.

Para concluir “Despedida” una canción destinada para cerrar el disco y los conciertos de esta gira, un tema sencillo, sincero y emotivo. Una forma redonda de cerrar un concierto grandioso más, de una banda que no tiene a día de hoy el reconocimiento global que se merece, pero al paso que van, seguirán ascendiendo y haciéndonos disfrutar, porque transmiten positividad, no se esconden en sus letras cuando toca criticar, poseen un cuadro de músicos de alto nivel y una de las mejores voces/frontman de este país.

Primera presentación de “Cuarto Creciente” en Madrid, esperemos que se expanda por toda España y que vuelvan pronto, porque ir a un concierto de Dry River es garantía de diversión asegurada al 100%, en los placeres musicales y de entretenimiento.

Texto: Toni Marchante
Fotos: David Aresté
Set list:

1.Culpable
2.Segundo Intento
3.Camino
4.La Serpiente
5.Si estás tú
6.Fundido a negro
7.Perder el Norte
8.La Libertad
9.Calles inundadas.
10.Pequeño Animal
11.Capitán Veneno
12.Me va a faltar el aire
13.Traspasa mi piel

14.Funeral
15.Irresistible
16.Despedida