Con este menú y sabiendo semanas antes que las entradas estaban agotadas, la noche presagiaba ser grande y casi lo fue. Y lo digo principalmente por Atlas, no porque no hicieran un buen concierto, que lo hicieron, pero yo creo que no pegaban mucho con el estilo que hace el trío británico. El público estuvo bastante frio a lo largo de la actuación de los madrileños, que lejos de amilanarse se crecieron por momentos, pero que no llegaron a encandilar al público numeroso que a esa hora ya estaba dentro, una media entrada larga para verlos.

A diferencia de sus anteriores actuaciones con grupos de la talla de Europe, Gotthard o el reciente de Alice Cooper, les iban bastante mejor a su estilo y al público que gusta de este hard rock de siempre. Uno tampoco se puede negar a telonear a Motörhead por el hecho de que toque un estilo bastante distinto al que ellos practican y ante un público deseoso de bastante más ruido y menos melodía.

El concierto fue un repaso a sus dos discos en castellano, ya que recientemente han sacado una versión en inglés de su último disco “Contra viento y Marea” 2010, titulado “Against all Odds”, del que esperaba algún guiño, pero no era la ocasión para ello y prefirieron tirar de los temas en castellano. Un repaso que les llevó a interpretarnos de primeras algunos de los temas de su primer trabajo “Atlas” 2008, como las joyitas “Unidos” y la reivindicativa “Nosotros somos la Revolución” con Ignacio haciéndose cargo de la segunda guitarra, que usó en tres o cuatro temas, aparte de la voz.

Como comentaba al principio estaba nuevamente José Martos a la batería, ya recuperado de sus lesión de espalda, que lo ha tenido apartado de los escenarios varios meses y que de nuevo cumplió con creces su cometido. Ángel Arias estuvo más dinámico que en otras ocasiones ejerciendo de forma notable sus labores en el bajo, lo contrario que su hermano Manolo Arias, que no estuvo como en otras ocasiones, menos sonriente y bastante más estático, pero como siempre efectivo y espectacular en sus solos.

El concierto continuó con “Parte de mi, parte de Ti” que pasó bastante desapercibida para el público, que no se movía ni hacía muchos aspavientos. Aunque lo que sí hizo es escuchar atentamente y no quitar ojo de lo que pasaba en escena, lo que es un gran logro, ya que como dije no era su público y no se respeta muchas veces al grupo que abre como se respetó la actuación de Atlas. Viviendo a su anterior trabajo nos tocaron la que quizá fue uno de los temas en los que logró Ignacio sacar algo de la gente, unos mínimos coros con “El imperio de la Ley” en el que Manolo hizo el solo de la noche que fue aplaudido por el público, que  reconocieron su buena labor a la guitarra.

Seguían con “Contra viento y Marea” tema que da título a su segundo trabajo y que dio paso a los instantes finales de su actuación con una maravillosa “No necesito a Nadie”. Con Ignacio nuevamente con la guitarra colgada al hombro, con la que se ve que disfruta mucho y no para de mover la melena al viento, claro está aparte de cantar como sólo él sabe hacerlo. Para finalizar su actuación eligieron la potente “2040” con la que también lograron que la gente se implicara por poco que fuera, lástima que sus cuarenta y cinco minutos de actuación llegaran a su fin. Alguno como yo sí estaba disfrutando de su hard rock clásico, pero habrá más oportunidades para seguir disfrutando de los madrileños, ya que se aproximan más conciertos con los que reinician su gira.

Tras el desalojo del escenario y con la sala llena por completo, no tardaron mucho en salir los británicos Motörhead, que lo hicieron con tranquilidad y parsimonia, hasta que nos saludó el imponente Lemmy y acto seguido soltarnos la frase que da comienzo a sus trepidantes conciertos “We are Motörhead and we play Rock and Roll”… y acto seguido empezó la locura con “We are Motörhead” que como toma de contacto y locura inicial no la hay mejor. Para continuar sin bajar el ritmo “Stay Clean” de su segundo trabajo “Overkill” 1979 para deleite de los veteranos seguidores que poblaban las primeras filas.

Como venían con disco “The words is Yours” editado hace unas semanas, nos interpretaron en primer lugar “Get back in Line” uno de los cortes potentes y con buenos arreglos y riffs por parte de un activo Campbell. Bajó un poco el ritmo con otro de los temas de su segundo disco, en esta ocasión “Metropolis”. Y tras el primer respiro vuelta a la locura de la mano de “Over the Top” que fue saltada y sudada por todos a la que vez cantada.

Con “One night Stand” nos dejaron otro pequeño respiro, pero sin bajar la intensidad, solamente el ritmo endiablado que imponen a sus shows a pesar de los años que les contemplan. Eso nos duró, el tiempo en el que el doble bombo y la velocidad se apoderaron de nuevo del escenario de la mano de “Rock Out”. Una vez tranquilizado todo el mundo fue el turno de un solo, para mi gusto lento y aburrido por parte de Phil Campbell, pero que por lo menos sirvió para darnos ese descanso merecido.

Otra que nos hizo mover a ritmo más lentos pero igual de efectivos fue “The thousand names of God “que al igual que la anterior pertenecientes a su anterior trabajo “Motorizer” 2008. Continuaron con “I got Mine” que fue de las que más desapercibida pasó de toda la noche, salvo los dos solazos que nos tocó Phil Campbell, sin duda de lo mejorcito de la noche. El segundo tema nuevo y último fue un trepidante “I know how to Die”. Con palmas y luces encendidas empezamos al ritmo de “The chase is better than the Catch” otro de los clásicos de Lemmy y compañía, este perteneciente a “Ace of Spades” 1980, del que se disfrutó y se nos hizo colaborar a lo largo del tema, en forma de palmas y gritos varios.

Seguíamos cabeceando al ritmo de una galopante “In the name of Tragedy”, en la que aprovecharon a mitad del tema para meter un gran solo, este sí, de Mikkey Dee, un pegador contundente. Gran habilidad detrás de su gran kit de batería en el que se esconde, tras su demostración entran de nuevo Lemmy y Phil para rematar el tema y continuar con “Just ‘cos you got the Power “ que fue el último descanso, si se le puede llamar así, que nos dieron en lo que restaba de concierto.

Empezaba el fin de fiesta con el rock and roll puro y duro que nos decía al inicio Lemmy de la mano de “Going to Brazil” donde nos hicieron mover el esqueleto a todos y cada uno de los que abarrotábamos la sala. Lo que es casi seguro es que con la maravillosa “Killed by Death” es con la que más nos hicieron saltar y cantar, fue la locura de la noche. Ya sé que es mucho decir, pero fue una verdadera descarga de adrenalina a base de gritos del estribillo de tal calibre que no me queda otra que rendirme al resultado de esa noche.

Como no podía ser de otra manera para no bajar ni un ápice la marcha del concierto, como tema final antes de la despedida nos tocaron “Ace of Spades” todo un clásico de la bandas. Las cabezas funcionaron al 100% y puños al alto para cantar el título del tema con el que nos dieron un “descanso” para pedir a grito pelado otro tema y como es normal gritos de Motörhead,  Motörhead.

El trío no tardó demasiado en salir, para volver a la carga nuevamente con un ritmo infernal con otra bien festejada como “Born to raise Hell” otro de los temas más cantados de la noche, con un Lemmy serio y bastante recto, como nos tiene acostumbrados, con su voz, que a sus 65 castañas sigue como siempre y que da gusto escucharla cada año una o dos veces. Sin descanso empezaron con el último tema de la noche que fue un interminable “Overkill” con la que se desató nuevamente la locura en las primeras filas. Dio rienda suelta a cánticos y saltos, hasta los tres engaños que nos hicieron de final para seguir con el tema para disfrute de los que aguantaban el tirón, con el doble bombo de Mikke a destrozo en uno de los arranques.

Sin duda nos dieron una gran noche de rock and roll Motörhead como decían en un principio, no se le puede poner pero a la hora y tres cuartos de un concierto frenético, llevado a las mil maravillas por el trío de ases del que disfrutamos. Sin duda uno de los grupos que nunca fallan, sabes a lo que vas y sabes que lo te darán, lo que pasa que muchas veces te dan más de lo que esperas, todos unos clásicos que jamás pasaran de moda, con un Lemmy que sigue forjando su leyenda de manera sobria y sabia, ¿alguien nota la diferencia?

Texto y Fotos: Manu Cabaleiro

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Set list Motörhead – Diciembre ´10 – Sala La Riviera @ Madrid

We are Motörhead
Stay Clean
Get back in Line
Metropolis
Over the Top
One night Stand
Rock Out (Phil Campbell Solo)
The thousand names of God
I got Mine
I know how to Die
The chase is better than the Catch
In the name of Tragedy (Mikkey Dee Solo)
Just ‘cos you got the Power
Going to Brazil
Killed by Death
Ace of Spades
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Born to raise Hell
Overkill