Nuevo disco en solitario del guitarrista de Airless, uno de los mejores grupos de rock que ha dado este país. El endoser de ibanez nos presenta un disco fresco, con una clara orientación al hard rock y algunos toques de metal, más compacto que sus otros trabajos, en el que hay una mayor profusión de los arreglos, y un sonido más elaborado.

Las composiciones están muy cuidadas, y en cuanto a la técnica de guitarra poco hay que decir; pocos guitarristas atesoran la calidad de este hombre en España, motivo por el cual ha llegado a ser endoser de Ibanez por méritos propios.

A destacar que, si bien el disco está a la venta en la página del propio Robert, también ha sido puesto a disposición del oyente de forma gratuita. El propio Robert invita a que, quienes disfruten de su trabajo, compren el disco, pero les da la oportunidad de escucharlo entero previamente. Y esta descarga es completa, no hablamos de una preview de ciertos temas o de una duración limitada.

Sin embargo, Half finger on the moon tiene un defecto muy propio de los discos instrumentales autoproducidos; la inevitable artificialidad del fondo musical.

Dados los recursos, limitados, de un disco producido por su propio autor, esto no es motivo para hacer sangre, pero los elementos no guitarreros del disco, como la batería o el bajo, pasan a un segundo plano, no sólo en la composición, sino en la calidad de sonido, algo que resulta un tanto problemático a la hora de escuchar un disco que se basa únicamente en los instrumentos.

En cuanto a la composición, priman demasiado los bucles, la repetición constante de un patrón rítmico, que si bien hace que nuestra atención se centre en la guitarra solista, también impide que disfrutemos de los matices de la música, por lo que en ocasiones podemos caer en un cierto aburrimiento. Es un disco completamente basado en la sección solista, en el que se echa de menos una mayor riqueza en matices rítmicos..

Con respecto a las guitarras y la composición, he de decir que el disco es abiertamente hard-rockero. Es evidente que Robert no ha pretendido innovar, sino disfrutar y hacer que el oyente disfrute de unas cuantas piezas de hard-rock con una orientación compositiva muy satrianesca. A pesar de esto el estilo inconfundible de Robert aporta la frescura necesaria, y consigue que el trabajo tenga una identidad propia, con una técnica sobresaliente y un dominio apabullante de las 6 cuerdas.

En este disco encontramos temas con un toque blues-rock muy propio de la música sureña norteamericana, como me vs. me, que me recuerda a los antiguos músicos bluseros de los años 30, con los primeros slides rudimentarios. Es un tema muy conseguido, a tener en cuenta.

También hay canciones que bordean el metal progresivo, como Race in Flames, si bien en general es un corte muy en la onda del rock instrumental de los 80.

Es una de las caracterísiticas principales de este disco: sonido años 80. La década dorada del rock instrumental y el shred ha vuelto, y músicos como Robert, que jamás habían abandonado la senda que creían correcta, se ven beneficiados por este retorno de la pericia técnica, y a la vez el espíritu salvaje del más puro hard-rock.

El corte del cd que más me ha gustado ha sido Brief Love. Tiene una sección de guitarra rítmica buenísima, con un gran juego armónico y progresiones de acordes que hacen las veces de melodía, lo cual me ha recordado al genial músico estadounidense Eric Johnson, quien seguro ha influido a Robert de un modo u otro a la hora de hacer este estupendo tema. Es una senda que espero Robert sepa explotar más, ya que ha sido una de las mayores sorpresas que me ha deparado este disco, especialmente por ese dominio de la armonía y el voicing con los acordes.

En cuanto a las otras canciones que completan el disco, decir que son muy directos, como debe ser todo tema rockero que se preste. Se diferencian de anteriores trabajos de Robert en cuanto a la calidad, si bien siguen el estilo que Robert ha ido desarrollando en Airless y con sus dos trabajos instrumentales anteriores.

Por lo tanto, y como conclusión, Half finger on the moon es un muy buen disco de hard rock, muy cuidado y en el que podemos apreciar el dominio de la música de uno de los grandes del país. Un ejemplo de cómo alguien que lucha por lo que ama puede llegar lejos en un ambiente cultural que no favorece para nada este tipo de música.

Habría ganado mucho con una mejor producción, especialmente en lo referido a las baterías, y en el que se echa de menos un fondo musical más trabajado, así como un mayor dominio de la faceta melódica de Robert, algo que pueden echar de menos los más acérrimos fans de Airless.

Belial Báez

Temas:
1.- Me Vs Me
2.- Fury Of The Universe
3.- Race In Flames
4.- Brief Love
5.- The Shadows Of The Told’s Club
6.- Three Minutes In San Francisco
7.- Golden Tears
8.- Christina
9.- Half Finger On The Moon
10.- Chain Reaction
11.- To Be Continued