El nuevo grupo de la escena metal tuvo ayer una fiesta en el Hiro Ballroom, de esa manera Adrenaline Mob repitió su debut veraniego y tocaron en completo su nuevo álbum Omertá para un público exuberante y amplio.
Texto y Fotos: Examiner.Com
Traducción: Maika Gutiérrez

El líder del grupo Russell Allen estuvo en el pueblo solo dos noches antes, el líder de Symphony X en el the Best Buy Theater, y muchas caras conocidas estuvieron otra vez entre el publico ( incluyendo su compañero de gira Jon Schaffer líder de Ice Earth).The Hiro, es un local de estilo japonés desconocido para los metalheads excepto aquellos de nosotros que estuvimos allí el junio pasado para ver la primera actuación de Adrenaline Mob. Tenía una planta atestada de gente y una sección VIP, donde los amigos y familiares de la banda pudieron reunirse para ver el espectáculo de la segunda presentación del grupo. Camisetas y CDs fueron vendidos muy bien y un aire general de excitación era palpable a un nivel raramente visto en las actuaciones del club.

Alrededor de las nueve menos cuarto, ráfagas de humo salieron por encima del escenario y los cuatro miembros de Adrenaline Mob se apresuraron a salir, tocando el primer tema del disco Undaunted. Aunque el album fue lanzado a la venta esa mañana, entre todos los conciertos, su EP, información de Internet, los admiradores allí presentes claramente sabía cada una de las palabras y acompañaban cantado a Russell con su distintivo gritos al estilo de rock n’ roll .

Al lado de Russell estaba el guitarrista Mike Orlando, tal vez el miembro menos conocido de la banda pero el mejor criticado. Mientras Russell canta majestuosamente, adelantado y comprometido con el público, Orlando demostró ser el músico más impresionante de la noche, haciendo pedazos y trizas los trastes de su guitarra con una furia energética que crujía en sus riffs y crepitaba en los solos.Las características de Omertá son una buena selección de canciones y ayer la banda demostró que ellos merecían todo el territorio metalero que ellos revindicaban.Machacones como Indifferent y Psychosane dieron paso pronto a un sorprendente Russell emocionado dedicándole la balada All On The Line a su mujer, y pareció como si sus genuinas lágrimas cayeran de sus mejillas mientras el cantaba con voz fuerte ( al igual que un reflejo de sudor).

El grupo se centró entonces en el agresivo Hit The Wall, dándole a Russell una oportunidad para recuperarse en la intro instrumental, y en menos de 30 segundos el cantante ya estaba rugiendo como un jodido rock n’ rollero otra vez.El agresivo Feelin’ Me llevó a unas bromas entre Russell y el batería Mike Portnoy, de esta manera los dos bromearon entre ellos y el público. Pero dos canciones después, a medio camino de Believe Me, Russel se quedo a un lado, y el verdadero corazón de Adrenaline Mob brilló más que en cualquier momento. El bajista John Moyer, de la banda Disturbed que andaba un poco parado, saltó con un ímpetu demoledor y Mike Orlando se soltó con buen gusto, casi al estilo Pink Floyd.

Portnoy mantuvo un tono bajo con gran ritmo, el trío tocó los instrumentos, juguetearon e improvisaron el tema de una manera que sonó tanto orgánico como edificante. Nada más se dijo en la noche sobre el inmenso talento y química de esta banda de la misma manera que en los cinco minutos sesión de jam, y eso habla con gran significado del potencial de la banda.Eso no quiere decir, por supuesto, que el Señor Allen no tenga un punto intenso focal propio. El cantante ordena un poderoso clamor metalero a la vez que uno de los grandes, y lo empuñó como la precisión de un armamento como si corriera sobre una amplia gama de melodías vocales sin nunca recurrir a los rugidos de death metal. Él también hizo un gran trabajo interactuando con el publico, gritándole a sus amigos y su familia, moviendo los puños en frente de admiradores folloneros, y recordándole a los presentes que “! eso no era un concierto, era una fiesta!”

Las tres últimas canciones del album, Down To The Floor, Angel Sky, y Freight Train cada una destacó un differente aspecto sonoro de la banda. Desde los golpes de riffing hasta los estribillos retumbantes y poderosos para hablar en plata, de la energía del rock duro. Mike Orlando también continuó de brillar tomando el foco de atención para crear emocionantes, salvajes y empapados solos tan electrificantes que ellos no necesitaban otros instrumentos. No hubo más círculos, pero allí había una energía innegable saliendo desde el escenario que tenía a todo el público en pie rockeando hasta el final.

La banda dejó el escenario con un aplauso salvaje, y encontrándome a mi mismo al lado del Señor Schaffer y sus compañeros de banda en Iced Earth, le pregunté que pensaba él del espectáculo de esta noche.“!Ha sido jodidamente increíble, tío!” contestó sinceramente la leyenda del power metal. “Yo estoy realmente muy feliz por ver a mi hermano Russell aquí, el esta pateando el trasero y la energía de la banda es muy fuerte. Yo creo que esto golpeará a la comunidad rock n’ rollera, esto es lo que hace falta que pase ahora mismo.”

Habiendo tocado el álbum Omertá  en su totalidad, el grupo volvió para versionar dos versiones de Black Sabbath que esperemos que incluyan en su espectáculo en vivo The Dio-era Mob Rules, una referencia obvia al propio nombre de Adrenaline Mob , y un éxito absoluto, troneando War Pigs tuvieron a todo el publico gritando los estribillos. Russell acabó la canción con un grito fuera de este mundo en las letras finales que incluso podría haber roto el cristal, y los noventa minutos de explosión musical finalmente llegaron a su fin.

No hay duda alguna que Adrenaline Mob están influenciados por los mejores músicos del metal, y junto con John Moyers en sus filas parece que ha mejorado significativamente la banda desde su quinta pieza del verano pasado. Moyers suele ser una voz significativa en la mezcla, y su estilo tocando da a Mike Orlando mucho éxito y espacio para su guitarra majestuosa y pirotecnia. En comparación con sus bandas anteriores, la contribución de Mike Portnoy parece casi tenue en términos de complejidad, pero él lo compensa añadiendo un ritmo abrumador y radiando una presencia monstruosa en el escenario. Russell Allen, desde luego, lo ata todo como un poderoso cantante y líder entregado.

Si hay alguna crítica aparente a este grupo es que están escribiendo canciones por debajo de su gran nivel de talento combinado. La corta sesión de jam Believe Me dio la pista a un grupo capaz de escribir rugidos, intricados, épicas progresivas de 10 minutos donde se te sale el corazón, y cualquiera que sean los motivos, se quedan estancados en una música comercial de radio, en vez de la estribillo contra estribillo.Eso es decir, que las canciones que Adrenaline Mob escribe y toca tienen una energía innegable y atrapan nuevas adiciones a los altos cargos de las bandas activas metaleras. Se espera que se revele pronto las fechas del Tour Norteamericano, y hasta ese momento, ya se puede comprar una copia de Omertá.

Texto y Fotos: Examiner.Com
Traducción: Maika Gutiérrez