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En la segunda mitad de los ochenta, y de eso ha hace unos cuantos días, empezaron a surgir en la famosa y mítica Bay Area de San Francisco, a saber, la cuna del thrash metal americano, diversas bandas que intentaron seguir la estela de los cuatro grandes titanes METALLICA, MEGADETH, ANTHRAX y SLAYER. Así fue como surgieron bandas como EXODUS, FORBIDDEN, VIO-LENCE, DEATH ANGEL o HEATHEN. Marcel.lí Dreamevil |
La mayoría de esas bandas presentaban un esquema de thrash bastante similar, configurando así este sub género del metal. Una de las características eran las voces desgarradas y feroces. No obstante, entre todas esas bandas a mí me llamó la atención HEATHEN porque su vocalista cantaba con voz limpia y la sección rítmica era mucho más técnica que la de la mayoría de grupos y grupitos thrasher que iban surgiendo.Fue en el año 1987 cuando cayó en mis manos aquel emblemático “Breaking the Silence” (1987), del cual conservo el vinilo original y tres años después no dudé en fichar el todavía mejor “Victims of Deception”, disco tras el cual la banda desapareció.
Desconocidos por la mayoría del público yo nunca olvidé a mis queridos HEATHEN y, por tanto, y después de tener rayados esos dos vinilos de tanto escucharlos, cuan mayúscula fue mi sorpresa cuando tras aquel anecdótico “Recovered” (2004), los de San Francisco volvieron a la carga con el excelente “The Evolution of Chaos” (2010), disco que siguen presentando en su gira actual y que les trajo a Barcelona el pasado 19 de junio.Si cuento todo esto es para ayudar a entender al lector que la emoción del que escribe estas líneas era más que notable ante la expectativa de dicho concierto. Haber pasado la adolescencia enganchado a esos dos vinilos y tener la oportunidad de, 26 años después, poder verles en directo por primera vez es algo que inevitablemente inquieta (lamentablemente no puede verles en su visita del año pasado).
Con todos estos pensamientos en la cabeza llegué a la despoblada sala para encontrarme con la triste sorpresa de que allí no había más de cincuenta personas pero pensé que la cosa iría mejorando ya que de momento estaban tocando los teloneros GENERATION KILL.
GENERATION KILL. De ellos poca cosa puedo decir porque apenas pude contemplar un par de temas (cosa que lamentablemente no puedo decir de sus predecesores DUST BOLT a los que ni pude ver). Una buena puesta en escena, actitud, mucha agresividad y todo lo que supone una buena ración de thrash metal como carta de presentación de lo que viene siendo su primer disco “Red, White And Blood”. Como dice el refrán, aquella velada todo quedaba en familia ya que el vocalista de esta joven banda, Rob Dukes, es el vocalista de EXODUS y, por otro lado, el guitarrista de Heathen, Lee Altus, es también el guitarrista de EXODUS, así que hoy estábamos viendo dos trozos de EXODUS en sus respectivas bandas paralelas.
HEATHEN. Acabada la descarga de la banda de Dukes vino el descanso pero, desgraciadamente, el público asistente no se incrementó. Fueron bastante críticas las voces que se escuchaban por parte de algunos acerca de la pésima promoción que se había hecho del evento, que si Barcelona está muerta en cuanto al negocio del metal y varios comentarios que, francamente, y a tenor de los cuatro gatos allí presentes, sobraba mencionar porque la evidencia hablaba por sí sola.
A pesar de ello, y tratando de sacar la parte positiva, ese ambiente tan “íntimo” propició que el concierto se viviera con una gran intensidad y con esa complicidad propia de los primeros conciertos thrasher en los que cinco agresivos músicos se desgañitan por agradar a sus escasos seguidores en aras de conseguir un mayor reconocimiento. Aunque éramos pocos lo cierto es que éramos fieles y por ello la entrega fue absoluta desde el minuto uno.
Empezaron con “Dying season”, tema que encabeza su último disco seguida de la también incluida “Control by chaos” y desde el primer minuto pude comprobar que estos HEATHEN son capaces de reproducir de manera exacta cada una de las notas de sus discos y llevar a escena su sonido con total crudeza y precisión.
A partir de ahí se sucedió una excelente selección de temas de sus tres discos insistiendo, eso sí, en su último trabajo. No en vano, de los 10 temas que tocaron, la mitad eran de este reciente “The Evolution of Chaos” y el resto se repartieron entre “Mercy is no virtue” e “Hipnotyzed”, de su segundo disco, y “Open the grave”, “Goblins blade” y “Death by hanging” de su debut.
Actualmente HEATHEN está formado por David White (voz), Lee Altus (guitarra), Kragen Lum (guitarra), Jason Viebrooks (bajo) y Jon Dette (batería que acompaña a la banda en su gira europea tras el reciente abandono de su batería original Darren Mirren). De todos ellos, como miembros clásicos de la banda tenemos a David y Lee mientras que el resto son recientes incorporaciones y, por tanto, se podría presumir que esto no es una reunión ocasional de HEATHEN sino un proyecto de futuro, de la cual cosa me alegro mucho.
El líder indiscutible de la banda es su vocalista David, que conservando un excelente estado vocal, demostró gran entusiasmo durante toda la descarga así como un gran afán por conectar con el público al cual iba chocando de manos entre canción y canción y animando a todos los presentes en la sala a acercarse a las primeras filas para así hacer más “calor humano”. Se notaba que para David el enano escenario se le hacía pequeño pero eso no fue problema para que lo diera todo.El segundo líder de la banda, y uno de los reclamos principales, es Lee Altus. Verle tocar desde tan cerca y comprobar la excelencia de su habilidad a las seis cuerdas es algo que solamente en estos recintos uno puede disfrutar.
No menor mención tiene el fenomenal batería que acompaña a la banda, Jon Dette, quien, a su vez, aporta experiencia en bandas de la talla de TESTAMENT y SLAYER. Tal vez no pueda decir lo mismo de los algo más estáticos Jason (bajo) y Kragen (guitarra) (especialmente Jason), que parecía estar más aburrido que una olla de coles pero supongo que cada uno vive a su manera el hecho de hacer tantos kilómetros para acabar tocando ante cuatro gatos mal contados. Cabe señalar en este sentido que HEATHEN ya estuvieron en Barcelona el año pasado girando en aquella ocasión con EXODUS, DEATH ANGEL y SUICIDAL ANGELS y que este año han apostado por ir de cabezas de cartel con lo que, al menos en la misma ciudad, ha supuesto un batacazo considerable para los americanos.
Hubo momentos anecdóticos como cuando David presentó uno de los temas de su primer disco y preguntó si alguien lo tenía. Solamente levantamos la mano tres personas! Da igual, el tema sonó tremendo y los presentes, embargados por la nostalgia de escuchar en directo ese tema hizo que nos partiéramos el cuello a base de headbanging.
Sin duda alguna, uno de los momentos del concierto fue la ejecución del temazo “No Stone unturned” (de su último trabajo), que empieza con un amplio pasaje instrumental en el que la banda hace gala de sus aptitudes técnicas (ahí el bueno de David se retiró del escenario para dejar lucirse a sus compañeros con total tranquilidad). Como decía, tras un espectacular pasaje instrumental el tema emerge como un torrente de thrash metal demoledor gracias a los fraseos de White. Thrash al más puro estilo ochentero y que eleva los niveles de adrenalina hasta lo más alto. La genialidad de estos músicos creo que ha sido siempre infravalorada.
Como apuntaba al principio, el breve concierto lo finiquitaron con la emblemática “Death by hanging” de su debut de 1987, y el bueno de David no paró de insistir con su micro para hacernos cantar y corear a todos su estribillo.Tras ese temazo se apagaron las luces del escenario, se acabó el concierto y empezaron a desmontar sin más. Ni bises, ni despedida oficial de la banda ni nada de nada. Ese detalle me pareció feo después de todo el esfuerzo que hicieron los de San Francisco por agradar. Francamente, puedo entender que fuéramos pocos los allí presentes pero un concierto de gira no puede basarse en un set de 10 temas porque entiendo que la gente paga para ver a su banda y poder disfrutar, cuanto menos, de los 90 minutos de rigor que suele durar una descarga de unos cabezas de cartel.
A modo de resumen aplaudir la profesionalidad y entrega de la banda, la calidad técnica de sus músicos y el carisma y cercanía de David White. Reitero que estamos hablando de un grupo con una larga trayectoria pero con pocos registros discográficos, es decir, tres discos en un cuarto de siglo no da para mucho y, excepto aquellos ya veteranos que seguimos a la banda en su momento, a día de hoy HEATHEN se presenta ante el gran público como una nueva banda y, por ello, creo que tardaran algún tiempo hasta que consigan llenar algo más estos recintos.
Espero y deseo poder volver a verles pronto y, a poder ser, con una mejor combinación de cartel para que así el foso esté un poco más animado.
Marcel·lí Dreamevil
Set list:
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Intro
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Dying season
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Control by chaos
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Open the grave
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Arrows of agony
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Mercy is no virtue
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Fade away
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Hypnotized
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No stone unturned
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Goblins blade
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Death by hanging
