Iron Maiden + Within Temptation + Airbourne – 29 de julio 2022 – Estadi Olímpic (Barcelona)

IRON MAIDEN, tras haber llenado el Wanda Metropolitano de Madrid en su anterior visita en 2018, y dando continuidad a su “LEGACY OF THE BEAST TOUR”, revalida el título como banda de estadio llenando el Estadi Olímpic de Barcelona y demostrando así ser la banda de heavy metal con mayor poder de convocatoria de la escena.

Que IRON MAIDEN es una de las bandas más queridas en nuestro país no es nada nuevo y que son una de las que más nos han visitado tampoco es raro que lo diga, pero conciertos que puedan ser denominados “históricos” ya no hay tantos que puedan ser merecedores de llevar ese calificativo. Este, sin duda, ha sido uno de ellos porque, por primera vez, en la capital catalana, los ingleses llenaban el Estadi Olímpic Lluís Companys, con capacidad para 50.000 personas.

Cabe señalar que la gira “LEGACY OF THE BEAST” arrancó en el año 2018 y fue motivada como promoción del cómic y el juego que llevaba ese mismo nombre. Ese año, recordemos, IRON MAIDEN consiguió llenar su primer estadio en España. En aquella ocasión, fecha única en nuestro país, le tocó el turno al Wanda Metropolitano de Madrid. Un 15 de julio de 2018 Dickinson y los suyos tocaron ante 52.000 personas.

Así, el éxito de esa primera parte de la gira ya quedó plasmado en su directo Iron Maiden: Nights of the dead – Legacy of the Beast – Live in Mexico City (2020). Ese mismo año se anunciaban nuevas fechas. IRON MAIDEN debían aterrizar en un nuevo estadio en España. Esta vez le tocaba el turno al Estadi Olímpic Lluís Companys de Barcelona y lo harían acompañados de AIRBOURNE y WITHIN TEMPATION un 25 de julio de 2020. La pandemia lo impidió. La gira se aplazó y la nueva fecha quedó fijada para el 19 de junio de 2021 cambiando a AIRBOURNE por AVATAR. Tampoco pudo ser. Finalmente, se cerró nueva agenda para este 29 de julio recuperando de nuevo a AIRBOURNE y dejando fuera a AVATAR (una pena para mi, desde aquí sigo reivindicando a esta gran banda a la que, si no hay imprevistos, podremos ver en marzo por España).

Total, que con este trasiego de fechas y con la paciencia controlada, tota la legión de fans se mantuvo fiel a la cita y así fue como ese caluroso, a la par que nublado, viernes 29 de julio de 2022, 47.324 fans de nuestro querido Eddie acudieron al Estadio para rendir pleitesía a la que, sin duda, demuestra ser una de las banda con mayor poder de convocatoria del género en nuestro país. No en vano, 47 años de trayectoria cargada de éxitos y de una voluntad de hierro por seguir siendo actualidad avalan un currículo claramente intachable.

Lo de la voluntad de hierro por seguir siendo actualidad no es comentario gratuito porque para cualquiera que haya seguido de cerca la evolución de la gira que arrancó en 2018 se habrá dado cuenta que, en medio de la pausa, los ingleses aprovecharon para publicar disco. Hablamos de su nuevo “Senjutsu”(2021) y, evidentemente, había que dar cabida al nuevo material en el set-list de su “Legacy of the Beast”. Por tanto, todos íbamos preparados para sacrificar algunos de los clásicos a cambio de dar la bienvenida a los temas de nueva factura. Pero, en cualquier caso, no nos adelantemos. Hablemos primero de las bandas teloneras.

AIRBOURNE

A las 17:30h abrieron puertas del estadio para dar la bienvenida a la marea de camisetas negras y a las 18:15h empezaban los australianos a descargar su rock and roll más gamberro. Fue físicamente imposible absorber a semejante masa humana en tan poco espacio de tiempo así que, mientras el estadio se ocupaba, poco a poco, de ir engullendo las interminables colas de fanáticos, los hermanos Joel O’Keeffe y Ryan O’Keeffe y compañía salían al escenario para empezar a calentar a las primeras filas que ya estaban ansiosas por disfrutar de los sus riffs cargados de esa actitud macarra bañada en cerveza con todo el espíritu de AC/DC.

Joel, Ryan, David y Justin se entregaron al 100% regalando al respetable todo lo que saben hacer que no es otra cosa que rock and roll. Mucho tiempo no tenían los australianos así que fueron al grano así que de los cinco discos que llevan publicados en sus 16 años de trayectoria dieron repaso a cuatro de ellos, a saber, “Black Dog Barking”(2013), del que tocaron “Back in the game”, “Live it Up” y “Ready to Rock”, “Runnin’ Wild”(2008), del que tocaron “Girls in Wild” y “Runnin’Wild”, “Breakin’ Outta Hell”(2016) del que tocaron el tema que da título al álbum y, “Boneshaker”(2019) del que rescataron “Burnout the nitro”.

Litros de Airbourne para el sedientoLitros de Airbourne para el sediento  Litros de Airbourne para el sediento   Litros de Airbourne para el sediento

No se puede poner un “pero” a su actuación porque cualquiera que los haya visto en directo sabe que salen a ganar, a divertirse y a pasarlo bien. Aquí no hay postureo. Esto es desahogo, ganas de pasarlo bien y, como dicen muchos, posiblemente el relevo generacional de AC/DC. He de decir en ese sentido que no eran pocas las camisetas con el logo de la banda que se veían en el recinto.

Finalizaron el breve show anunciando su próxima visita a España en diciembre los días 1 en Madrid (Palacio Vistalegre), el 2 en Barcelona (Sant Jordi Club) y el 3 Bilbao (Sala Bec!) y dejando al público, evidentemente, con ganas de más.

SET LIST:

  1. Ready to Rock

  2. Back in the Game

  3. Girls in Black

  4. Burnout the Nitro

  5. Breakin’ Outta Hell

  6. Live It Up

  7. Runnin’ Wild

WITHIN TEMPTATION.

Llegaba la hora de los neerlandeses WHITIN TEMPTATION. Seguramente muchos se puedan preguntar acerca su idoneidad en el cartel pero si no me falla la memoria los teloneros de la Doncella siempre han sido bastante diversos. No en vano cabe recordar que hace 22 años en otro de los “históricos” conciertos de IRON MAIDEN, en aquella gira del año 2000 llamada “Brave New World Tour” en la que Bruce Dickinson volvía a la banda, trajeron de teloneros a SPIRITUAL BEGGARS y ENTOMBED. Quede demostrado así sobre el eclecticismo de la banda a la hora de elegir acompañantes.

Dicho esto, he de decir que un servidor tenía ganas de ver a Sharon den Adel y compañía a sabiendas de que llevan un buen directo y siendo consciente de que acumulan ya 26 años de carrera a sus espaldas.

Within Temptation Live

Después de haber visto sus actuaciones más recientes en estos festivales de verano me llevé cierta decepción a la hora de ver el recorte de medios al que se tuvieron que ver sometidos en esta actuación. Entiendo, claro está, que no puedan llevar todo su espectáculo encima del escenario por motivos obvios, pero lo que ya no entiendo tanto es el motivo que impide que la banda pueda lucirse en las pantallas del estadio para que el público pueda disfrutarlos en su máximo esplendor. En mi humilde opinión, una banda con casi treinta años de carrera merece algo más de respeto y conectar un par de pantallas no creo que ponga en riesgo el lucimiento de los cabezas de cartel.

Volviendo al contenido musical, WITHIN TEMPTATION jugó a caballo ganador. Como decía antes, tantos años de carrera permiten usar el comodín de los grandes éxitos así que empezaron con “Our Solemn Our” de aquel “The Heart of Everything”(2007) para seguir con “Paradise (What About Us?”) de su disco “Hydra”(2014) en el que colaboraba Tarja Turunen, la pegadiza “Faster” y la roquera “In the Middle of the Night”. Total, con estos cuatro temas los que estaban allí para ver a los WITHIN ya estaban más que convencidos con el espectáculo. Sharon estaba más que entregada sabedora de su difícil papel. Tenía enfrente a un estadio que cada vez se iba llenando de más gente que iba a ver a MAIDEN y que podría ser que a ellos ni los conocieran, pero eso no le importaba. Ella, con su corpiño dorado, su falda negra, su eterna sonrisa y su inagotable entusiasmo supo transmitir ganas, actitud, profesionalidad y consiguió emocionar. Cantó de diez, con una calidad extraordinaria y haciendo alarde de una técnica vocal exquisita.

“Angels” y “Stand My Ground” de aquel “The Silent Force”(2004), tema que llegó a colarse en la radiofórmula de este país, lógicamente fue éxito asegurado en el set de la banda. Añadido a esto, destacar que siguieron dando peso a su material más reciente. Prueba de ello fueron los tres temas de su último disco de estudio “Resist”(2019), “Raise Your Banner”, “Supernova” y “The Reckoning” así como el tema “Entertain You” de su reciente EP “Don’t Pray For Me”(2022).

Within Temptation Live

Y para los seguidores acérrimos de la banda también hubo ocasión para las clásicas joyas como son “Ice Queen” y “Mother Earth” de aquel homónimo disco de hace 22 años, tema con el que, precisamente, cerraron el concierto.

Tal y como pasó con AIRBOURNE, el concierto supo a poco y eso es buena señal. Futuras giras les auguran buenos resultados porque nos dejaron con ganas de más. Cierto es que habrá opiniones para todos los gustos y resulta complicado decidir qué bandas pueden o no encajar como teloneras de IRON MAIDEN, pero creo que esta combinación no estuvo mal del todo. Tuvimos una primera opción más basada en el rock and roll, más macarra y gamberra, algo más joven, con 16 años de carrera. Por otra parte, una segunda opción más sinfónica, con 26 años de trayectoria y con voz femenina.

El público no se aburrió en ningún momento. Ambas bandas supieron estar a la altura. AIRBOURNE lidió con la lluvia y con un público menor del que hubieran tenido si las entradas al estadio hubieran sido más fluidas y WITHIN TEMPATION tuvieron que esforzarse en lucir más por sí mismos sin los recursos habituales a los que suelen estar acostumbrados en sus espectáculos de gira. Da igual. Su profesionalidad les avala. Generosos aplausos para ambas formaciones y los mejores deseos en sus respectivas giras en solitario.

SET LIST:

Our Solemn Hour
Paradise (What About Us?)
Faster
In the Middle of the Night
The Reckoning
Angels
Entertain You
Stand My Ground
Raise Your Banner
Ice Queen
Supernova
Mother Earth

IRON MAIDEN

Llegaban las 20:53 y empezaba a sonar “Doctor Doctor”, a saber, ese famoso tema compuesto por Michael Schenker y Phil Mogg publicado como single de disco Phenomenon (1974) de UFO.

Ahora sí, el estadio ya estaba repleto. Rememorando aquel “son como hormigas” de los Barones, de repente la pista y las gradas aparecían llenas dispuestas a dar la bienvenida a los lores ingleses.

Hablaba al principio de aquellos pocos conciertos calificados como “históricos” de IRON MAIDEN en España. Evidentemente el primero de ellos fue aquel 2 de abril de 1982 en el Palau d’Esports de Barcelona. Era su primer concierto en España y estábamos en su gira “Beast on the Road Tour”. El segundo de sus “históricos”, por lo que supuso, fue la despedida de Dickinson, en aquella pequeña gira “A Real Live Tour”(1993) que los trajo a salas como la Canciller de Madrid o la Zeleste (ahora Razzmatazz) de Barcelona. En sentido contrario, siete años después, llegaría el retorno de Dickinson con aquel “Brave New World Tour”(2000) donde recuperarían grandes recintos como el Velódromo Anoeta en San Sebastián, Las Ventas en Madrid o el Palau Sant Jordi en Barcelona.

Iron Maiden en el Sweden RockIron Maiden en el Sweden RockIron Maiden en el Sweden Rock

Después se sucedieron más giras, festivales y palacios hasta que llegó el siguiente nivel, que fueron los estadios. El primero, citado anteriormente, fue en 2018 en Madrid, y el segundo fue ahora en Barcelona, siendo nuevamente un éxito. Por tanto, IRON MAIDEN consolida su estatus como banda de estadio en España.

Eso si, y sirva esto primero como punto a favor para la formación, aunque sea banda de estadio, de momento, no nos viene con florituras así que todo fan que quiere estar en primera fila solamente debe tomarse la molestia de ponerse el despertador e ir bien pronto para llegar el primero. Aquí no había nada de “Golden circle”, nada de espacios exclusivos para entradas VIP. En segundo lugar, una pista muy nutrida pero no saturada, la cual cosa fue de agradecer. El público así disfrutó, pero no se ahogó.

Tal y como apuntaba unas cuantas líneas arriba, en origen, este concierto se basaba en el juego “Legacy of The Beast” y, por ello, debía seguir el mismo set-list que llevaron a cabo en el año 2018. No obstante, el parón de la pandemia hizo que los inquietos ingleses publicaran nuevo disco y, como es lógico, hayan tenido que incluir temas de su nuevo material en el set-list y reorganizar así un poco la coreografía de su espectáculo.

Para no complicar mucho las cosas digamos que han ido a lo práctico. Han añadido tres temas nuevos, es decir, “Senjutsu”, “Stratego” y “The Writing on the Wall” al principio del set, con toda la iconografía propia de su último disco, incluida la aparición en escena de Eddie tematizado de samurái en el primer tema, para, luego, hacer una primera mini pausa y ya dar paso a toda la retahíla de clásicos.

A cambio de esos tres temas nuevos han sacrificado de su set list las canciones «Where Eagle Dare», «2 Minutes To Midnight», «For the Greater Good of God», «The Wicker Man» y «The Evil That Men Do» añadiendo a cambio, eso si, “Blood Brothers”. Dependiendo de lo fanático o no que cada uno sea del nuevo material de la banda pues dependerá del grado de satisfacción del set-list. Como dice el refrán, “a gustos colores”, pero si me dan a elegir, yo siempre elegiré a aquellas bandas que optan por promocionar su nuevo material, crear cosas nuevas y creer en sí mismas y no vivir de rentas. ¿Qué me hubiese gustado disfrutar de esos clásicos? Por supuesto que sí, pero seguro que habrá más ocasiones. Esto no es ninguna despedida y precisamente ahí está la gracia, en dejar la miel en los labios y en variar el repertorio lo suficiente como para no aburrir y generar el incentivo suficiente como para repetir en la siguiente visita.

Ahora bien, dicho esto, tal vez la duda pueda planear sobre los tres primeros temas por aquello de que son los más novedosos y tal vez aquí pueda erradicar el punto más crítico de mi opinión porque, ciertamente, después de haber crecido con la imagen de los MAIDEN arrancando sus conciertos en aquella mítica gira del “Powerslave” y su “Aces High” (cosa que emularon en primera parte de la gira “Legacy of the Beast Tour”), verles ahora iniciar el espectáculo con la, para mi, algo aburrida “Senjutsu”, no resulta plato de buen gusto. Por mucho arrope que le de el público, y ciertamente que se lo dio, cuesta subir el octanaje empezando con ocho minutos de canción a medio gas.

Iron Maiden en el Sweden RockIron Maiden en el Sweden RockIron Maiden en el Sweden Rock

“Stratego”, siendo el segundo de los temas nuevos que sonaron, al menos subió algo el ritmo de la actuación y aquí si que el público, que no tenía más ganas que rendirse ante los pies de Dickinson, siguió mostrando todo su impulso por conectar con el combo que, desde luego, ahí estaban, después de todos esos años, tan en forma como siempre, con los mismos gestos de siempre, en sus mismas posiciones con sus típicas coreografías y, lo más importante de todo, divirtiéndose como de costumbre (sobretodo Janick).

“The Writing on The Wall” cerraría el trio de singles de presentación de “Senjutsu”. Una canción compuesta por Dickinson y Smith que, a juzgar por la respuesta del público, muy posiblemente pase formar parte del catálogo de los clásicos de la banda en directo (aunque, cuidado porque entonces habrá que ir eliminando otras).

A partir de ese punto, se hizo una disimulada pausa, la justa para retirar las pagodas orientales inflables y toda ornamentación relacionada con el último disco para redecorar el escenario con estética propia de catedrales góticas y dar arranque, ahora sí, a lo que sería la gira de los grandes éxitos y un tremendo “Revelations” que, por fin, haría explotar, y de golpe, a todo el estadio. Se acabaron los experimentos. Saltábamos 39 años atrás, “Piece Of Mind”(1983) y uno de los mejores cortes del disco. Dickinson ataviado con capa negra y saltando de arriba abajo del escenario, a un lado Dave Murray y Adrian Smith tan tímidos pero efectivos como de costumbre, al otro el bueno de Janick con sus peculiares bailes dándolo todo, entre medias Steve Harris que nunca cesará de corretear con su bajo encargándose de que todo esté bien, de cantar y de revisar que todo funcione y Nicko, el hombre de la eterna sonrisa, con sus pies descalzos, sus baquetas y su espectacular batería decorada con todas las versiones de la mascota Eddie.

  

Ahora si que había empezado el concierto y Bruce lo sabía. Por eso aprovechó para dedicarnos unas palabras de hermandad. Por si quedaba alguna duda nos refrescó la memoria. En esos momentos las cincuenta mil almas estábamos allí porque no importaba ni el color, ni la religión, ni la edad. Todos los allí presentes estábamos allí porque éramos hermanos. Era el momento de “Blood brothers”. La comunión se llevó a cabo con un Dickinson que seguía exhibiendo unos registros vocales realmente sorprendentes.

Y si todos somos hermanos qué mejor gesto que acordarse de la era Blaze Baley y recuperar algunos de los temas de su etapa. “Sign of the Cross” de aquel “The X Factor”(1995) fue uno de los elegidos. Una canción que dura más de 11 minutos pero que para nada se hace pesada en directo. Además, en el show, fue el primer corte que incluía fuego y pirotecnia y que, por su progresión, bien podría recordar a aquel “Rime Of The Ancient Mariner” del “Powerslave”(1984).

“Flight of Icarus” fue el siguiente clásico de la noche, volviendo de nuevo a recuperar el disco “Piece of Mind”, con un Ícaro hinchable gigante elevado en el fondo del escenario y con Bruce la mar de entretenido con un par de lanzallamas en cada mano sirviendo, este verdadero tema añejo, como preludio de otro de los inevitables. “Fear of the dark”(1992), con Dickinson escondido tras una máscara y bajo sombrero de copa y capa negra, se dedicó a interpretar este icónico tema antes de entonar el “Hallowed Be Thy Name” del “The Number of the Beast” (1982), ahora ya con camisa blanca y, como no….dedicándonos aquello de “Scream for me…Barcelona”.

La segunda dosis de llamaradas nos llegó, como era de esperar, con “The Number of The Beast”, en la que Bruce volvió a demostrar que mantiene un tono vocal impresionante para los sesenta y tres años que tiene. Y llegábamos así al primer amago de fin de concierto con “Iron Maiden” y el nuevo modelo hinchable del malévolo Eddie en todo lo alto. Yo, que soy más romántico, me quedo con las versiones anteriores (digamos que soy más de la escuela Derek Riggs) pero he de reconocer que semejante monstruo en escena impresiona…y mucho.

Quedaba ya el póquer de ases. “The Trooper”, interpretada a la antigua usanza, telón de fondo con Eddie sosteniendo la bandera, Dickinson y su casaca, otro Eddie saliendo a escena, una lucha de espadas entre Bruce y Eddie y finalmente el disparo de escopeta de Bruce a Eddie. Todo muy teatral. Suele ser habitual, eso si, que cuando Bruce dispara a Eddie, de la escopeta se despliegue la bandera del país en el que está tocando la banda. En esta ocasión se desplegó la bandera pirata. La elegancia inglesa nunca falla.

El siguiente as de la manga fue otro guiño a la etapa Baley con la efectiva “The Clansman” para después dar ya la estocada final con la esperada “Run to the Hills”, momento en el que el estadio entero estalló en un clamor único “Run to the hills, Run for your lives”.

  

Y ya para acabar, ahora si, la esperadísima “Aces High” en la que, si he de ser sincero, me pareció ver que Dickinson tuvo que poner todo su empeño para sacar el tema adelante, cosa lógica tratándose de una de las canciones más exigentes del catálogo de la formación y teniendo en cuenta que normalmente era la primera en ser interpretada y no la última. Dejar este tema para el final, francamente, lo considero una apuesta realmente arriesgada y creo que en un futuro el orden posiblemente lo podamos ver modificado de nuevo.

Así acababa un concierto de casi dos horas de duración y que puede calificarse de intachable. Todos los que asistimos a la cita sabíamos qué íbamos a ver y los Maiden no nos defraudaron. Es cierto que ahora son una banda de estadio, pero ellos siguen con los pies en el suelo. Por poner un ejemplo, el propio Steve Harris el día antes del concierto estuvo tocando con su banda paralela, BRITISH LION, en la sala SALAMANDRA de Barcelona con capacidad para 800 personas.

Queda claro que Bruce Dickinson (63), Steve Harris (66), Dave Murray (65), Adrian Smith (65), Nicko McBrain (70) y Janick Gers (65) han encontrado un equilibrio a la hora de llevar a cabo el ritmo de su actividad en directo y, tal y como anunciaron, tienen pensado volver así que, aquí seguiremos encantados de darles la bienvenida nuevamente cuando sea menester.

Evidentemente quedó claro que el público no tiene intención de fallarles, que ya es multigeneracional y familiar, es decir, los fans han pasado de padres a hijos así que ahora todo depende de la guerra que nos quieran seguir dando estos seis caballeros ingleses que en cuestión de 3 años cumplirán los 50 años de trayectoria musical como banda. Supongo que a nadie se le escapa que no hay excusa mejor para montar otra gira. ¡Ahí lo dejo!

UP THE IRONS!

Texto: Marcel·lí Dreamevil
Fotos: Archivo MS

SET-LIST:

(intro) Doctor Doctor (UFO song)
Senjutsu
Stratego
The Writing on the Wall
Revelations
Blood Brothers
Sign of the Cross
Flight of Icarus
Fear of the Dark
Hallowed Be Thy Name
The Number of the Beast
Iron Maiden
The Trooper
The Clansman
Run to the Hills
Aces High
(outro) Always Look on the Bright Side of Life